Confundida

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Mis ojos pesan, mi cuerpo pesa, todo me pesa.
Me muevo con dificultad, me zumban los oídos, no quiero hacer nada.
Con mucha dificulta me incorporo sobre la cama, me miro y solo traigo las bragas puestas.

Además no estoy en mi habitación, no estoy en casa, comienzo a asustarme, de pronto escucho voces, vuelvo a a costarme en la cama y  me hago la dormida.

Escucho que los pasos se acercan - ¿ Ya ha despertado? - pregunta un hombre
- No señor Guillén aun no despierta
- Bien entonces sólo la veré dormir, puedes irte

Seguido de ello sólo escucho un completo silencio, estoy un poco asustada,¿ dijo Guillén?, enseguida mis pensamientos se unen, Kurtis, el, el es quien me tiene aquí pero ¿ por qué?

Lo escucho entrar en la habitación, su cuerpo sume la cama, sus dedos acarician mi ante brazo, mi piel se pone china ante su tacto, sus dedos se mueven hasta mis piernas, en mi cuerpo se expande una corriente eléctrica que me hace gemir.

- Veo que te has vuelto más sensible al tacto
- ¿ Qué hago aquí? - pregunto aun con los ojos cerrados
- Renata tendrás que  estar en una reunión conmigo
- ¿ Renata? - cuestiono- yo no soy Renata- aclaro
- Sé quien eres
- No, parece que no lo sabes Kurtis, yo soy Regina

Kurtis me mira de manera extraña, sé que soy idéntica a Renata pero no soy ella, ni mucho menos soy como lo es ella.

- No trates de engañarme, siempre lo intentas pero no esta vez, estoy muy molesto como para tus juegos absurdos - dice muy molesto, no cabe duda que destila rabia

Me toma del brazo y hace que me llevate de la cama, su actitud extraña me asusta y eso no es nada bueno.
Trato de soltarme pero su mano presiona aun mas mi pobre brazo.

- Kurtis no sé que tratas de hacer pero yo no soy Renata, no sé que es lo que ella hizo para tenerte de este humor, pero no me lastimes - digo ya con un hilo de voz, esta actitud suya me da miedo y dicen que eso no es bueno para la salud.

Al menos no la mía.

Me lleva casi a rastras por el pasillo y se detiene frente a una puerta, saca la llave de su pantalón y abre la puerta.
Entramos los dos juntos- Bien si eres Regina quiero que me lo pruebes

Trago la saliva que está acumulada en mi boca - No...no yo no puedo hacer eso
- Veo el miedo en tus ojos, Regina quiero que me ayudes al menos en este evento, quiero que seas mi acompañante

Miro al suelo, no tengo idea de cual sea el tipo de reunión que se va a efectuar pero no puedo dejarlo así, el no es mi amigo, pero tampoco es mi enemigo, además puede que saque algo bueno de esto

- Esta bien - respondo con mucha seguridad- ¿ Cuándo es?
- Dentro de 30 minutos
- ¿ Qué hora es?
- Las  11:00pm - responde mientras mira a otro lado
- ¿ Las 11:00pm? ¿ Me has raptado de mi casa?
- Teóricamente no iba por ti
- Además me has desnudado
- ¿ Y eso qué?- dice sin importancia
- ¿ Eso qué? prácticamente has violado mi privacidad- grito- me has traído a no sé dónde y luego casi me violas
- Espera...espera- me detiene- no iba a hacer nada que tu no quisieras - repone

A decir verdad tiene razón, el tiene cierta influencia sobre mi débil cuerpo, sabe que me gusta su tacto, creo que me conoce mejor que yo misma.

- Bueno¿ y debo ir en bragas a la gala esa?

Me mira de arriba a bajo y luego resopla
- Nada me haría mas feliz que eso, pero no- parece que en verdad quisiera verme así todos los días, pero ¿ Porqué a mi y no a Renata? Ella es su amante honoraria, de hecho creo que ella piensa que tiene una relación con el.

Me lleva hasta una habitación llena de cosas, me guía hasta donde hay varios vestidos, son bellos y ostentosos, demasiado para mi gusto.

- Se ve que compras mucho para tus amantes- siento que eso me cuesta siquiera pensarlo y decirlo
- Si tengo que tener todo para ellas
- No quiero ningún vestido de estos- declaro, no quiero pasar como una amante amas sabiendo que no somos nada, que el sólo me necesita por esta noche.

Es extraño ya que siento como si fuese una acompañante, lo soy pero.....

- ¿ En qué piensas? - termina con mis cavilaciones
- En que no deseo ser una mas, en que no quiero ser una noche de placer y lujuria
- ¿ Quieres una relación?- se muestra un tanto curioso

Lo pienso ¿ quiero una relación con el?

- No.....no- dudo- me refiero a que no me gustaría que piensen que soy una acompañante
- Eres mi acompañante
- Me refiero a una prostituta, a una mujer que.....- me voltea abruptamente y estampa sus labios contra los mios, sus manos sostienen mis brazos, mi corazón late muy rápido, no sé si es por el beso o por el susto.

Su agarre se relaja y me encuentro demasiado feliz, mis labios tocan los suyos, mi lengua acaricia la suya.
Me pega a el y por impulso gimo.

¿ Qué quiere decir esto? ¿ A caso el siente algo por mi? 

Me encuentro muy confundida.
Estoy dividida en dos, Axel ocupa mi pensamiento a pesar de lo que ha pasado.

Y Kurtis, el está aquí  o yo estoy aquí con el, además mi corazón se desboca cuando el está cerca.

No hay mayor con fusión que la que ocupa mi cabeza, no sé que hacer de hecho podría acostumbrarme a estar así a lado de el. 
Kurtis deja de besarme y me mira, sus ojos me analizan, sólo puedo sonreír, sé que mis mejillas están rojas y calientes, de hecho todo mi cuerpo lo está.

- Ponte el que desees - me ordena
- No quiero ninguno de eso, ya que han sido utilizados por  alguien más.
- Puedo llevarte uno que no esté utilizado
- Bien me parece bien

Me sorprende su flexibilidad, me lleva hasta la habitación de la que me había sacado - Ahora vuelvo - me dice antes de que entre a la habitación
- Te esperó - le digo feliz

Se va y yo cierro la puerta, me acuesto en la cama y miro hacia la pared, estoy asustada pero a la vez estoy feliz.

No tarda mucho y el llega a la habitación, en manos trae un vestido de color verde, lo extiende, es bello, largo y se ve que se ajusta al cuerpo, no sé mucho de vestidos, ni cortes pero es hermoso.

- Es hermoso, este vestido es bello- voy hasta el y lo abrazo, le beso la mejilla
- Estate lista, en un momento vengo por ti

Dicho eso, se va dejandome con ese vestido en manos, pero sobre todo con esta confusión, sigo confundida, solo puedo esperar para que las ideas en mi cabeza se ordenen y pueda estar mejor.

Vecino Yo También Se Jugar Donde viven las historias. Descúbrelo ahora