Pov Nico
Mire a Emma y vi que no podía creer que su amiga me hubiera dicho eso, su linda cara esta roja por la vergüenza.
- Así que, te deje caliente pequeña - No pude evitar hacerle esa pregunta, fue doloroso haberla dejado hoy, pero si no me hubiera ido la hubiera tomado hay mismo en la cocina. Esta chica se había metido en mi cuerpo para no salir, era mía aunque ella no lo supiera.
Ella era completamente ajena de lo que yo era. Era un capo de la mafia rusa, era el jefe mis negocios eran sucios ilegales, aunque eran pocos los cuales eran legales, me gustaban contaba con bares, restaurantes y departamentos a mi nombre, mi patrimonio. Pero a pesar de todo me gustan los negocios claros, y su padre era uno de los que no había cumplido esto. Hace unos meses descubrí que una carga no había llegado, la cual Robert era el encargado había estado a punto de castigarle y torturarlo por la verdad, hasta que mis ojos se fijaron en ella.
Esa inocencia y a la vez pasión me tuvieron hechizado de inmediato, así que por ella decidí quedarme y averiguar que había pasado con la carga, aunque el verdadero motivo por el cual me quede fue para poseerla, hacerla mía.
- Ya es tarde, hay que irnos - Evitando mi pregunta, agarro sus cosas y de paso a su amiga que tenia una sonrisa burlona mientras pasaban por mi lado.
Subimos al auto, esta noche estaba llevando a unos de mis hombres no quería correr ningún riesgo con Emma, su seguridad es mi responsabilidad. El viaje dura al menos 20 minutos mientras las chicas hablaron todo el camino, me dedique a revisar y hacer llamadas de los últimos encargos que teníamos.
Baje del auto y fui a abrirles la puerta a las chicas, Emma me miro con una ceja levantada y una mirada burlona, como su nunca hubiera pensado que yo le abriría una puerta.
- Llegamos princesa - Me sonrío, mientras que su amiga me levantaba los pulgares en señal de aprobación.
- Gracias
Pasamos la puerta de entrada de inmediato, las chicas me miraron extrañado solo moví los hombros para que no le dieran tanta importancia y solo entraran. Lo que no sabían era que este club me pertenecía, tenia a varios de mis hombres en seguridad en caso de algún problema.
- Vamos chicas entremos - deje que pasara Sophia primero así pude entrar detrás de Emma, puse mi mano en su espalda mostrandole a todos que era mía, que si no querían problemas mejor que ni acercaran conocían mi reputación así que no estaba jugando.
Nos dirigimos a la barra para que las chicas pidieran sus tragos, eran recién mayores de edad pero aun así no dejaría que tomaran mas de la cuenta y algo les pasara. Mire a mi segundo Collin y le hice señas para que se acercara, el manejaba el club nos conocíamos hace mas de 15 años era el único en que podía confiar.
- Nico! hombre que bueno verte - me agarro en un abrazo, no me gustaba mucho los afectos cariñosos y el lo sabia, solo les permitía esto a mi madre, mi hermana , Collin y ahora a Emma. Ni siquiera las otras chicas con las que me acosté podía soportar este tipo de cariño.
- Me alegra verte también, estoy cuidando a alguien
- Tu, que es alguna misión o que? - su cara lucia confusión, ya que rara vez tenia que cuidar a alguien, decidí decirle algo de la verdad necesitaba que Emma estuviera a salvo y su amiga también.
- Es mía - y como si la hubiera invocado ella apareció junto a Sophia con sus tragos en mano.
- Nico te estaba buscando - Me miro con reproche su boca formando un pequeño puchero que quería morder. Vi que mi segundo miraba de mi a Emma con una mirada de burla, sabiendo que la pequeña me tenia. Siguió mirando cuando su atención fue dirigida a Sophie, su mirada cambio de burlona a interesada en 2 segundos.
Oh Oh, problemas a la vista.
ESTÁS LEYENDO
La Obsesión del Jefe de la Mafia
Romance- TU ERES MÍA PEQUEÑA... - NUNCA - YA LO VERAS Emma una chica de 21 años, quien tiene una vida normal, no puede creer cuando sus padres le dicen que alguien vendrá a vivir con ellos por un tiempo, el problema no es eso, el problema es EL. Un sexy y...