Cap. 37

1.7K 154 36
                                    



_ Creí haberte avisado que si no te ibas por tu propio pie me encargaría yo de eso zorra.

Escucho una voz que reconozco, no porque haya hablado con ella, sino porque me resulta tan desagradable que en la vida la podría olvidar, es Samantha. Me levanto del asiento y me quedo mirándola cara a cara, esto ya empieza a cansarme, además, no estoy ahora como para aguantar sus tonterías.

_ ¿No crees que deberías de buscar otro insulto? Estoy cansada de que siempre me llames zorra, si quieres piensa en las cosas que te suelen decir a ti, no sé... puta, guarra, buscona, fulana, ramera, fresca... hay mucho donde elegir.

_ ¿En serio te pones a insultarme? ¿No te das cuenta de lo que ha pasado? -me pregunta completamente confundida-.

_ Sí, sé lo que pasa aquí perfectamente. Tú estabas con un hombre maravilloso, pero no le querías, le dejaste por el simple hecho de que eres una golfa, mira, otro insulto que puedes usar, y cuando el nuevo novio se dio cuenta de como eras te dejó y decidiste volver con ese maravilloso hombre que te quiso aunque no lo merecieras, y todo eso sin pensar en todo el daño que le hiciste, porque a ti eso te da igual porque eres tan egocéntrica que no te importa lo que les ocurra a los demás. Bueno, que me salgo del tema, volviste y descubriste que ese hombre ahora estaba con otra persona y ya no quería saber nada más de ti, y tú en vez de ser una persona normal y decente y empezar a pensar en qué haces mal en esta vida y por qué nadie te soporta, en vez de eso, decides amenazar a su nueva novia mandando anónimos, por el simple hecho de que eres una cobarde.

_ ¿Una cobarde aparecería aquí delante y te plantaría cara?

_ Haz lo que te de la gana, con total sinceridad, no quiero perder el tiempo contigo, ya cansas.

Veo que se acerca a mí encolerizada y me va a pegar una bofetada, pero aunque parezca imposible nunca llega a mi cara. Miro hacia un lado y me encuentro con Matt, está sujetándole el brazo a Samantha.

_ Como te atrevas a tocarla no me hago responsable de mis actos.

Matt le suelta el brazo mientras ella se lo sujeta con la mano, creo que le ha cogido con fuerza y le ha hecho daño, lo tiene rojo.

_ Matty.

_ Como vuelva a saber algo más de ti voy a la policía y te pido una orden de alejamiento, desaparece ya de nuestras vidas.

_ Matt, por favor, recuerda lo felices que éramos los dos.

_ ¿Felices? Yo me desvivía para hacerte feliz y tú solo te aprovechabas de mí mientras encima me eras infiel. No me quisiste ni un solo día, pero porque tú no sabes querer a nadie, eres una ególatra que solo se sabe querer a si misma, me das pena.

Samantha separa la vista de Matt y veo que se centra en mí, de sus ojos desprende chispas, está llena de rabia. En un ataque de furia se abalanza a por mí, pero Matt la sujeta y le da un empujón.

_ Todo esto es por tu culpa, tú le has comido la cabeza, él siempre me ha querido a mí, ¡solo a mí!

Matt la sujeta e inmoviliza de una forma tremendamente rápida, me resulta increíble lo fácil que le ha resultado, no me ha dado tiempo ni a pestañear y ya la tenía inmovilizada.

_ Samantha, jamás pegaría a una mujer, no juegues más con tu suerte.

_ Cariño, solo te ha engañado, solo eso, créeme -le insiste en voz baja-.

_ Emma lo único que ha hecho es quererme, nada más, no merezco a alguien como ella, pero tengo la suerte de tenerla, igual que tú no te merecías tener a tu lado a alguien como yo, tú te mereces estar sola.

El viaje de toda mi vida -COMPLETADA -Donde viven las historias. Descúbrelo ahora