Te defendí de muchos comentarios. Discutí con personas que me decían cosas malas de ti, te soporte más de lo que debía, me negué a muchas cosas he hice muchas cosas más por ti, me senté en silencio a ver cómo gota a gota se llenaba el vaso hasta que se reboso y la culpa fue mía por poner tanta fe en que de alguna u otra forma yo iba a encontrar la manera de ayudarte a cambiar, pero comprendo que no se puede ayudar a quien no quiere ser ayudado, de ahora en adelante respetaré tu proceso y te dejo libre de mí porque entiendo que hasta ahora te vale más lo material, y digo (hasta ahora) porque no pierdo la fe de que algún día cambiaras y te verás en el espejo de quien con tantas ansias yo he tratado de evitar que te conviertas... Me harté de tus humillaciones, de que solo resaltes mis defectos, de oírte exigir y de tratar de encajar en tu mundo tan superficial, yo NO soy ni seré esa en la que por tantos años me has querido convertir, sé quién soy y por lo tanto tus palabras ya no me afectan más, te saque de mi camino todo el tiempo solo has sido una piedra de tropiezo para mí y yo para ti aunque nunca lo reconozcas he sido más que un hombro cuando no encuentras en quien apoyarte y más que una guía cuando tu mirada se a encontrado perdida y no has sabido que hacer, sí eso he sido, he sido demasiado a cambio de absolutamente NADA Y después de todo tú al final siempre has sido la basura de persona que la gente comentaba. Tú no cambias, solo empeoras, y lo digo así mirando a la realidad porque me canse de justificarte y buscarte cualidades que nunca han existido, hoy ya te arranco, te despido, te hecho fuera por completo de mí y hasta de mis oraciones, te dejo en las mejores manos, en las de Dios y no te preocupes por mí se irme sin hacer ruido, solo notaras mi ausencia cuando nadie te soporte como yo lo he hecho. & una vez más y por última vez escribo, porque para qué hablarte si ni tan siquiera me escuchas.