Hotline?

16📲

    Bridget se separa de mi en busca de aprobación, al no tener ninguna respuesta de mi parte se aleja. Me levanto del suelo y tomo su mano tirando de ella para que se ponga frente a mi, mis dedos se enredan en sus rizos y una sonrisa floja crece en su rostro, se separa de mi y se asegura de que la puerta esté cerrada, baja las cortinas y prende el pequeño esterio que tiene en su cuarto, Still Got time suena y camina hacia mi de forma divertida.

— ¿Quieres hacer una fiesta en mi cuarto, Stella? — pregunta alzando su voz y yo solo me río mientras asiento.

     Me toma de la cintura y vuelve a besarme, sus labios succionan los míos de forma desesperada, sus pechos están contra mi playera, desnudos y ella está completamente comoda con ello.

    Tomo en mis manos el borde de mi blusa y la quito dejando mi sujetador de deporte.

— Es sexy.

— No venía con ésta intención.— digo mientras me dejo caer en la cama con ella entre mis piernas.

— ¿Cuál era tu intención al venir aquí?

    Sus labios bajan por mi cuello hasta el centro de mi pecho donde juega con la tela del sujetador.

— H-hablar, supongo.

    Bridget sólo se ríe de mi mientras sigue bajando para llegar a mi short y deshacerse de él, cuando lo quita por completo vuelve a acomodarse entre mis piernas, sus ojos se conectan con los míos y no es hasta ahora que siento los nervios creciendo en mi vientre, sus ojos son tan hermosos y sinceros. Su mano acaricia mi vientre hasta llegar a la base de mis pechos. Mientras las mías estan haciendo círculos en sus caderas, su cuerpo se mece contra el mío al mismo tiempo que volvemos a besarnos.

    Mi mano deja su cadera de lado y se escabulle dentro del short de deporte que lleva, ignoro por completo su braga y hago contacto con lo que estaba buscando.

     Bridget muerde mi labio cuando mis dedos se mueven en círculos sobre su clítoris.

— No le dejes marcas, Brid.

— Joder.— suspira agitada.— entonces no hagas éso.

— ¿Esto?

     Mis dedos se mueven un poco más fuerte y luego descienden para perderse dentro de ella. Las manos de Bridget dejan su inocente juego con la parte superior de mi cuerpo y descienden rápido para así comenzar una placentera pelea. Mi espalda se arquea cuando sus dedos me acarician justo donde deben hacerlo.

— Así no puedo hacerlo.— Brid se separa de mi y termina por quitarse el resto de su ropa, se acuesta sobre su vientre en el colchón y comienza a meter y sacar sus dedos mientras su boca se encarga de jugar un poco más arriba.

— N-no tan rápido, Brid.— digo con mi mano en la boca para así hacer el menor ruido posible.

— ¿No sé supone que deberías pedir más? — dice mientras aumenta sus movimientos.

     Separo mis piernas para así darle más espacio, y éso mejora lo que siento. En el momento en que ella succiona con fuerza ése pequeño y poderoso pedazo de carne y sus dedos entran en la forma indicada termino por venirme, mis labios se cierran con fuerza mientras una que otra gota de sudor se junta en mi frente. Antes de que ella pueda decirme algo camibio nuestras posiciones dejandola bajo de mi.

— Mi turno.

     Media hora después ella está con su cabeza descansando en mi vientre, no hemos apagado el estéreo, sólo abierto las cortinas y yo sólo llevo el sujetador.

— Siempre me han gustado la forma que tienen.— dice mientras pasa sus dedos sobre una de las estrías que estan en la parte de al lado de mi muslo.

— Son rayas de tigre.— bromeo y ella se ríe, pero enseguida un sentimiento de incomodidad cae sobre mi, esto es demasiado intimo, acurrucarse luego de tener sexo es intimo, que me diga lo que le gusta de mi, lo es. Tener sexo con otra persona cuando tienes pareja está mal.

— ¿Quieres bajar a comer?

   Bridget se levanta de mi y toma su vestido de dormir. Amarra su cabello en una coleta y apaga el estéreo.

— Creo que debo irme, no me quedaré, claro que si no te vas temprano con Naomi a la playa podríamos cocinar algo junto a Jenna.

— Creo que podríamos hacer una pizza y hamburguesas.— dice mientras me sonríe. Me levanto y me pongo rápidamente la ropa, nisiquiera tomo en consideración la idea de tomar una ducha. Una ducha con Brid acá era peligroso. Ella me acompaña hasta la puerta.— Avísame cuando llegues ¿Sí?

— Lamento no quedarme.

— Lo entiendo.— me guiña el ojo.— Y no te preocupes, Stella. Éste puede ser otro secreto, sólo entre nosotras.

— No quiero confundir las cosas. No quiero arruinar lo que tienes con Naomi, y definitivamente no quiero arruinar lo que tengo con Ethan. Tampoco quiero arruinarnos.

— Nosotras ya arruinamos lo de noostras. Tomemos esto como una despedida muy agradable. —dice haciendo énfasis la última palabra.

    Me despido con la mano y tomo mi bicibleta, pedaleo rápidamente a casa, cuando llego me sujeto la mochila al hombro e intento buscar una mentira del por qué volví a casa. Mi teléfono me saca de órbita y leo el mensaje.

Zafiro.

comienzo a creer que me olvidaste, Stella, estoy esperando por ti.

   Me dispongo a responder mientras entro a casa, voy hacia la sala de estar y dejo caer mi mochila al suelo.

— Cielo, estabamos por llamarte ¿No te ibas a quedar con Brid? Ethan ya se iba porque le dijimos que pasarías la noche allá.

    Levanto la mirada y Ethan está de pie junto a la estantería.

    ¿Llamo a Brid mentalmente para que venga a explicarle a nuestro amado Ethan por qué no nos queramos alla?