— Estoy embarazada.— no quito los ojos del test que tiene dos barras demasiado bien marcadas. Joder, esto es real y no me siento come se supone debería sentirme.— Arruine mi vida.
— Bueno, esto es una…
— Stella, no digas que esto es una bendición.— Jenna la mira enojada y me arrebata su test.— ¡Éstas dos barras significan que tendré que dejar la Universidad para cambiar pañales!
— Sólo intento ser positiva.— Stella toma un cojín y se lo pone sobre sus piernas.— Di algo, Brid.
— Es una jodida mierda. Una gran mierda.
— ¡Bridget!
— ¿Qué? Está por cumplir diecinueve, va a entrar a una de las mejores Universidad del país con una beca por ser una jodida Einstein y ahora tiene un pequeño parásito al cuál tendrá que ponerle nombre, quererlo y vestirlo.— digo haciendo alusión a las palabras de Dr.House.
— Controla tu tacto, la haces sentir peor.— Stella se levanta y abraza a Jenna, pero ella no llora sólo está molesta.
— Mis padres me matarán, Dios, realmente la he cagado.
— Podrás salir adelante.— realmente agradezco que Stella esté aquí, porque yo no podría decirle cosas bonitas.— nos tienes a nosotras.
— Odio los niños.— ambas me miran mal.— al tuyo lo querré…si es que decides tenerlo.
— ¿Qué dices? Es obvio que lo tendrá. Jenna no mata siquiera a una asquerosa mosca o una mortal abeja.
— Necesitamos a las abejas para vivir, no a un bebé.— digo sonriendo.— ¿Qué harás?
— Debes hablar con el padre del bebé. Y hacerte una ecografía para saber cuántos meses tienes, Jenna.
— Sabes mucho del tema ¿Has estado practicando con Ethan? —digo de forma ácida sin querer.
— ¿A qué viene éso?
— No sé quién es el padre.— Jenna mira a un punto fijo del cuarto de Stella.
— ¿Hablas en serio? Joder.
— Definitivamente esto no es una bendición.
— ¡Bridget, deja de hablar tanta mierda!
A pesar de que al principio ambas me miran mal, rompemos en risa a los segundos. Esto era una mierda, Jenna tenía un plan de vida que no iba en ninguna otra dirección que no fuera el éxito.
— No quiero der madre soltera, nisiquiera quería ser mamá.
— Bueno, pero ya está acá. Tienes que decidir.
— Hablas como si se tratara de un par de zapatos.
— Jenna, debes decidir luego, o debes actuar pronto, como quieras. Pero debes hacer algo, buscar a quién te embarazo, decirle a tus padres, cualquier cosa, pero no actues como si acabaras de descubrir que el cielo es azul.
— Brid tiene razón. Debes hacer algo, y sea lo que quieras hacer será difícil, y nostras estaremos acá, somos las mejores amigas, no te dejaremos sola.— Jenna mira con culpa a Brid, y la abraza, muerdo mi mejilla y miro hacia otro lado.
— Las quiero tanto. Gracias por hacer esto conmigo.
— Nos estabamos perdiendo de una experiencia obligatoria de la adolescencia. Brid estuvo disfrutando de los dedos por un tiempo, y yo sigo con ellos, y ésos no embarazan.
— Oh cierra la boca.— ambas me lanzan almohadas.
Luego de un rato más de charla Jenna se va a su casa decidida a contarle a su madre y que ella pueda ayudarla con los procedimientos médicos. Stella y yo nos vamos a dar un paseo por el parque que está cerca.
— ¿Qué crees que hará?
— Va a abortar.— suspiro y miro al cielo.
— ¿Crees que sea capaz?
— ¿Siquiera viste su cara o estabas fantaseando con si sería niño o niña? Nisiquiera estaba llorando de susto, o de emoción. Estaba enojada.— siento un pinchazo al decirlie.— está enojada porque está por ser mamá, no quiere a su hijo ¿Por qué no sería capaz de hacerlo?
— Bueno, es una parte de ella…y, no lo sé, supongo que es el impacto del momento.
— No es el impacto del momento. Stella. Ella realmente estaba enojada consigo misma y con ése pequeño costal de células formando vida, porque sabe que será un impedimento para todo.
— Pero…
— Mi madre tardo tres años en volver a la Universidad, y dos en poder encontrar un trabajo, casi siete para tener un novio al que no le importara que tuviera una hija. Y me ha dicho en dos ocasiones que hubiese preferido no tenerme, prefiero que Jenna aborte a tener que escucharla lamentarse toda la vida.
— Puede que tengas razón, pero quiero creer que puede entrar algo que la haga sentir mejor.
— Siempre quieres encontrar algo bueno en todo, Stella.— sonrío al mirarla.
— Ése es mi trabajo en ésta amistad.— nos sentamos en los columpios y nos quedamos en silencio por un momento.— ¿Qué tal todo con Naomi?
— Está viendo un piso para éste año. Ya sabes, sólo quedan tres semanas para el comienzo de clases.
— ¿Vas en serio con ella?
— Tan seriamente como tú y Ethan.— me mira con uns ceja alzada.
— Puedo saber por qué tienes a Ethan tan presente en tu mente el día de hoy.
— El sol brilla tanto como su odioso cabello, debe ser éso.
— Brid…
— Sólo bromeo. Me gusta Naomi, y mucho. Ella es linda conmigo, sabe como mantenerme bien.
— ¿Mantenerte bien?
— Sí, Naomi me hace bien, Stella. Y quiero dejar que las cosas sigan así.— intento decirle que lo de mi habitación no se repetirá.
— Me alegro por ti.— dice mientras juega con la arenilla del suelo.
— ¿Qué hay de ti y el principe Disney?
— Estamos en ése momento donde todo es plano.— suspira.— no hay buenos días o malos, todos son iguales. Siento que ya no le gusto tanto.— comenta, pero suena más bien como si se hablara a si misma.
— Ethan muere por ti, no seas tonta.
— Ya no quiere tener sexo conmigo.
— Quizás tú quieres demasiado sexo.
— No hablo de éso, él simplemente se ha estado alejando de mi.
— Quizás quiere un tiempo y no sabe cómo pedirtelo sin que creas que …
— ¿Me engaña? Ethan no haría éso.
— Tu decías lo mismo y lo hiciste, Stella.
✨✨
mi pensamiento sobre el aborto no está explayado en ninguno de los diálogos de las chicas, por si acaso :p.
Y sí, éste capítulo lo narra Bridget.
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Hotline?
Teen FictionT E R M I N A D A✔ Bienvenido a Hotline, te ofrecemos una variedad de opciones para que disfrutes. Si estás interesado en nuestros servicios, maras: cero. -- Historia con contenido sexual +16. Historia originalmente mía.