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   Entro el helado a un niño de cinco años que va en brazos de su padre y me despido con una sonrisa. Me recargo en la encimera y miro a Bridget limpiar una de las mesas y luego se acerca.

— ¿Hasta qué hora estás hoy?

— Me iré en dos horas más.— le comento mirando el reloj que marca las 15:40pm.— ¿Por?

— No sé si recuerdas, pero prometiste hacerme el aro hoy, genio.

— ¿Debe ser hoy? Estoy muerta Brid.— ella hace un puchero y se sienta en el taburete.

— ¡Venga, mañana es Sábado y quiero mostrarlo!

— Bridget si te perforo el pezón no podrás jugar con ellas.

   Miro hacia sus pechos un poco sonrojada por estar hablando sobre esto en la heladería, pero a ella parece divertirle, incluso lleva sus manos hacia su pecho y las agarra.

— ¿Las voy a privar de un poco de diversión? Bueno, en ése caso me tocará a mi disfrutar.

—¿Disfrutar de qué?

— De tocar tetas.— ella tapa su boca enseguida y ambas rompemos a carcajadas.— Se siente como el cielo.

— No sé, nunca he tocado otras que no sean mías.

— Te lo estás perdiendo todo, querida.

   Bridget baja del asiento y se va arrglar la terraza mientras sigo riendo. Bridget es de mi segunda mejor amiga, la primera es Jenna, las tres nos conocimos en las inscripciones para formar un equipo de baloncesto hace muchos años atrás y desde ahí siempre hemos estado unidas. Somos muy parecidas, solo que ella es más dispersa, al contrario de Jenna, que parece ser la más alocada de todas, pero es la más sensata.

— Buen día, Stella.— Billy, mi jefe me saluda.

— Hola, llegas tarde, creo que no pagaré tus horas extras.— lo imito.

— ¿Es algo así como una queja hecha de forma divertida?

— Tomalo como quieras, cielo.— le labzo un beso y el solo ríe.

— Por cierto, ése chico al que le gusta imitar a Jon Travolta en Grease está afuera, en la terraza.— me mira con el ceño fruncido y un poco de hostilidad en su voz.

— Uh, un día te gustará como a mi, ta verás ¡Incluso querrás que sea tu novio!

   Salgo corriendo antes que me pueda responder algo y me lanzo a la espalda de Ethan, es más alto que yo así es que quedo colgado, su espalda vibra a causa de su risa y me descuelgo para que pueda girarse. Sus manos van a mi trasero y me alza para besarme.

— Buenos días, princesa.

— Ethan, ya casi con las cuatro de la tarde.— me pongo a reír y miro sobre su hombro a Bridget haciéndome caraa de asco, cruzo mis brazos por el cuello de mi chico y le enseño el dedo del medio, ella abre sus ojos haciéndose la sorprendida.

— ¿Nos vemos en la tarde? Ashton se fue a Florida.— entierra su rostro en mi cuello y siento cosquillas.— Podemos repetir lo de ayer.

— ¡Imitación barata de Jon Travolta quiero escuchar tus manos aplaudir! — Billy grita desde la entrada, y Ethan me suelta y ríe.

— Me gustaría pasar la tarde contigo, pero quede con el grano de culo que está allá.— señalo a Bridget, ambos caminamod hacia ella, Ethan la saluda y pone su mano en mi cintura para acariciarla.

— ¿No puedes dejarme pasar tiempo con mi chica, dulce Bridget?

— Bueno, para tu mala suerte, es mi chica.— dice haciéndome énfasis en el «mi» toma mi brazo y me jala hacia ella.— es tu novia, pero mi chica. Y no, no puedo, necesito que me perfore los pezones ¿Qué dices Ethan, ambos o uno?

Hotline?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora