Día 14

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*otra vez no me ha dado tiempo de revisarla, así que por favor perdonarme las faltas! :ss* 

Día 14

Sebastian's POV

Se ha ido.

Mi respiración agitada y la lluvia contra la ventana es lo único que se escucha en la habitación. A pesar de estar en la mitad de la mañana, está oscuro a causa de las espesas nubes que cubren el cielo. La lluvia no ha dejado de caer desde ayer, y parece que el tiempo está siendo controlado por mis emociones. La ciudad parece triste desde mi visión en la ventana. Después de unos minutos, me doy la vuelta hacia la cama cautelosamente hecha, donde anoche Victoria dejó la nota.

Intenté llegar lo antes posible de la oficina, pero la cosa se complicó y me tuve que quedar más tiempo. Y aún así, no podía estar otra cosa más que ansioso por el mal estado de Victoria. Melissa estuvo llamándome y mandándome mensajes sin parar, y no tenía ni idea qué hacer. Y cuando finalmente llegué al motel para por fin ver a Victoria, encontré la habitación vacía. Aún así, su coche sigue en la calle.

Y cuando vi la nota encima de la cama con su móvil a su lado, ya sabía lo que estaba ocurriendo, aunque no hubiera leído la nota. Después de varios minutos mirándola, tuve la valentía de leerla:

Querido Sebastian:

no puedo hacer ésto más. Sé que probablemente arruine los planes de tu negocio por hacer ésto, y lo siento mucho, pero eres un magnífico abogado y vas a llegar lejos. Me voy, a algún lado donde nadie pueda encontrarme, lejos de ti, y lejos de mi padre. Aunque los últimos días a tu lado me he sentido más cerca de ti. Te deseo lo mejor para ti y para tu hijo.

P.D.: por favor, no me busques.

-Victoria.

Abandoné la habitación nada más leerla, y rastreé todas las calles, buscándola exhaustivamente. Y volví con las manos vacías. Y aún así sigo mirando la nota con recelo, con una sensación de vacío en mi pecho. Mi madre me lo explicó cuando era pequeño, y dijo que cuando fuera mayor lo entendería.

-Mamá, mamá, ¿has probado mi lasaña? -pregunté en voz baja.

-Estaba deliciosa, cielo -me respondió mientras me arropaba en un abrazo y me felicitaba.

-Lo aprendí de la mejor.

-Ganarás el corazón de una chica sólo por cocinar, no te olvides de eso -me sonrió.

-¿El corazón de una chica?

Se rió por lo bajo.

-Sí, algún día encontrarás una chica te parará el mundo y no sabrás qué hacer sin ella.

-Ew -esbocé una mueca.

-No te darás cuenta de que la quieres; de dará en la cara fuerte y no podrás hacer nada para remediarlo -convirtió la sonrisa en un ceño fruncido-. Sólo espero estar ahí cuando suceda.

-Deja de decir tonterías, Michelle, tu hijo se va a casar con Victoria Collins, y no importa si la quiere o no -dijo mi padre entrando en la cocina-. No le vayas a comer más la cabeza.

Ahora lo entiendo. Estaba en lo cierto cuando me dijo que me daría en la cara. Simplemente se le olvidó mencionar lo mucho que dolería. La vibración de mi móvil me saca de mis pensamientos.

-¿Sí?

-Sebastian, soy John. Necestito tu ayuda.

-Con todo respeto, no tengo nada que hablar con usted, señor. Desde que fue notificado de la desaparición de Victoria no ha hecho nada para encontrarla.

The Letter {Español}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora