The Letter {Español}

Día 19

Día 19.

*Victoria's POV*

Sujeto mi café con ambas manos y doy un pequeño sorbo. Me apoyo en el marco de la puerta y simplemente le miro. Sebastian está sentado en el sofá viendo la tele, y se supone que yo tendría que estar preparándole el desayuno. Pero en vez de eso, paso la mayor parte de mi tiempo mirándole; todavía estoy intentando trazar un plan. ¿Debería de seguir pretendiendo que es el hombre perfecto o debería ir directo a él y lanzarle la prueba en la cara? La primera parece más tentadora, ya que él también ha estado pretendiendo conmigo todo éste tiempo.

-Me gusta cómo me miras -las palabras de Sebastian me pillan desprevenida; no me he dado cuenta de que me estaba mirando.

Rápidamente esbozo una sonrisa y cambio mi postura

-No lo puedo evitar, no cuando tengo un novio como tú.

-Ahora me entiendes por qué te miro todo el rato -sonríe.

En silencio me castigo por derretirme cada vez que sonríe. ¿Cómo se supone que tengo que vengarme si ni siquiera puedo con su sonrisa? No va a ser tan fácil como yo pensaba.

-¿Qué quieres desayunar? -pregunto cuando me doy la vuelta.

Pienso que si puedo evitar su sonrisa, no me afectaría tanto. Me aterroriza por una parte no volver a ver esa sonrisa que me mantiene en pie, y me da miedo no volver a ver a Sebastian después de ésto. De todas formas, es culpa de Sebastian por mentirme de esa manera.

-Lo que quieras, cielo -dice levantándose del sofá y andando hasta mí.

Por el rabillo del ojo le veo acercarse a mí con una sonrisa en la cara. Dejo el pan en el horno y siento sus manos rodear mi cintura.

Su roce hace que la piel se me ponga de gallina, y me siento a mí misma derretirme bajo sus dedos. Cierro mis ojos, intentando relajar mis músculos “Te ha traicionado” me repito una y otra vez. Besa mi cuello, y me derrito en sus brazos una vez más, me odio a mí misma por actuar de ésta manera pero no lo puedo evitar. Me recompongo y reúno toda la fuerza de voluntad para separarme de él, esbozo la mejor sonrisa falsa que puedo y me doy la vuelta para mirarle a los ojos.

-¿Cómo se supone que tengo que hacerte el desayuno si no puedo apenas pensar contigo besádome? -digo, y me doy cuenta de que es la verdad.

-Podemos no comer en todo el día si lo prefieres -dice sonriéndo y acercándose a mí.

-Voy en serio -me río y le doy un pequeño beso en los labios-. El doctor ha dicho que tienes que descansar y comer bien, y yo soy responsable de eso.

-Ah, vale. Dios, qué suerte tengo de tener una novia que me cuida tanto y que tanto se preocupa por mí -dice con esa sonrisa triunfadora y vuelve hacia el sofá.

Empiezo a cocinar los huevos, bacon y tortas para él. Cuando cocino no puedo evitar sentir cómo mi corazón se rompe sabiendo que yo también le voy a traicionar. Sé que él ha hecho lo mismo, pero, ¿sentirá igual que ésto? ¿Me sentiré satisfecha después de haberle roto? Rápidamente aparto esos pensamientos, no me puedo permitir pensar así y retirarme, no ahora.

Seguiré el plan, uno por uno; cada persona va a pagar por lo que me han hecho. Nada, y mucho menos sentimientos, se va a entrometer en mi camino.

*Melissa's POV*

-¿Cómo puedo ayudarte? -pregunto al chico en frente mía.

No quiero estar aquí, debería de estar con Sebastian, obviamente no está en un estado sano mental si está con esa chica.

-Café de Vainilla -dice-. Grande, por favor.