Capítulo 26

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Stephen

Dos horas, dos putas horas y no había llegado nadie a informar sobre Cameron, mi pecho aún seguía subiendo y bajando apresuradamente, mi corazón iba a mil por hora.

Miré como Lara y Elisabeth se abrazaban, no sé como Elisabeth le había dado la noticia a su amiga, pero lo que sí sé es que después de contárselo ella se desplomó en el suelo como si fuera una pluma.

1 hora después

Otra puta hora, y aquí seguimos, sin saber una mierda sobre Cam.

Miro a Lara, que ha ido a por dos cafés, uno para ella y otro para Elisabeth.

Elisabeth me mira, y me hace un gesto con la cabeza para salir de la sala de espera.

Le dice algo que no puedo llegar a escuchar a Lara y los dos salimos a paso rápido de allí para dirigirnos a la cafetería.

-¿Qué pasa?- Le pregunté.

-Stephen, yo estaba allí, todo fue tan... tan rápido, sólo sentí como mi corazón empezaba a latir rápidamente, y sentí la necesidad de saber quien era esa persona, jamás imaginé q-que sería él.- Elisabeth comienza a llorar, se tapa la boca con sus manos. Yo simplemente la observo.

-¿Qué más pasó?- Pregunto con interés.

-¿Qué más pasó?- Repite secándose los ojos.

-Si, ¿viste algo más?.- Elisabeth frunce el ceño.

-Si, estaba bajando las escaleras de mi edificio, vi dos coches de color negro, puedo decir que el coche de alante es el de Cam, el de atrás estaba persiguiendolo, hubo tiros, la policía está allí ahora mismo, puedes ir a hablar con ellos.

Dejé a Elisabeth sola en la cafetería y yo eché a andar hacia mi coche que estaba en el parking.

Salí del parking haciendo rugir el motor del coche, ya sabia lo que tenía que hacer y a por quién tenía que ir.

Agarré el teléfono y llamé a Sean.

-Dime hermano, ¿qué pasaaaa? - Respondió al instante.

-Llama a nuestros hombres. ¡Ya!.- Ordené.

-Claro, ¿Qué es lo que pasa?- Pregunta. Muy pocas veces necesitábamos refuerzos, pero en éste caso sí, iba a ser algo difícil de acabar, pero nadie se metía con los míos y mucho menos les hacen daño, y es algo que a todo el mundo le tiene que quedar muy claro.

-Después te cuento, te veo en mi casa en veinte minutos.- Colgué sin esperar una respuesta.

Veinte minutos después allí se encontraba Sean.

-Cuéntame qué pasa.

-La banda de Robby, han atacado a Cameron, ahora está en el hospital, lo están operando, no saben si despertará.

Sean me miraba seriamente esperando a que le dijera lo que vamos a hacer.

-Vamos a hacer lo siguiente. - Sean apoyó sus codos en ss rodillas juntando sus manos.

-Reuniremos a todos nuestros hombres, tenemos que preparar todas las armas que tenemos en el sótano, cargarlas, limpiarlas, y todo lo necesario, hoy por la noche iremos a la casa donde se encuentran todos los que forman esa banda y los mataremos a todos, no importa si cae alguno de los nuestros, tenemos que arriesgarnos, hay que dejar claro que en este puto mundo nadie se mete con los nuestros. ¿A quedado claro?- Terminé de contar el plan.

-Como el agua hermano.- Me tendió la mano y se la estreche.

3 horas después

Todo estaba preparado. Sean estaba añadiendo algunas cosas al plan cuando mi teléfono empezó a sonar.

Me tendrás miedoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora