Abro la puerta a la vez que enciendo la luz, una vez dentro la cierro detrás de mí.
Tiro mi bolso y chaqueta al sofá.
Tengo el presentimiento de que aquí ha estado alguien, los cojines que dejé uno encima de otro, ahora se encontraban tirados por el suelo.Después de mirar por todas las partes de mi departamento, sólo queda mi habitación.
Abro la puerta lentamente, no se ve nada, miro a todas partes de la habitación.
Entro completamente cerrando la puerta detrás de mi y enciendo la luz, contemplo como todo sigue en su lugar.Camino hasta la cama, me siento en esta y empiezo a quitarme los zapatos, algo capta mi atención, un sobre.
Lo cojo del suelo y lentamente lo abro.
Querida Beth.
¿Piensas que te escaparás tan fácil?
Te estoy vigilando.Atentamemte Rick.
Mi cuerpo se tenso,estuve como diez minutos mirando la carta y leyéndola una y otra vez hasta que volví a meter la carta en el sobre y la guardé en el cajón de la mesita.
Entré al cuarto de baño, me deshice de la ropa, abrí el grifo dejando caer el agua fría, me sumergí debajo de ésta haciendo que mis bellos se erizaran, pero lo pasé por alto y seguí dándome la ducha fría, necesitaba que el agua se llevara la tensión de mis músculos e hiciera que me relajara, después de quince minutos debajo del agua decidí salir.
Me enrollé una toalla alrededor del cuerpo y otra en el pelo.
Abro la puerta de mi habitación y entró lentamente.
Cierro la puerta una vez que estoy dentro, y me dirigo al vestidor, empiezo a sacar el pijama.
Estaba peinandome cuando de repente el timbre empieza a soñar constantemente a la vez que dan golpes en la puerta.
Rápidamente salgo de mi habitación y me dirigo al salón. Me acerco a la puerta lentamente, miro por la mirilla, no se ve nada, todo está oscuro.-¿Quien?- Pregunto asustada.
-Yo.- Responde una voz grave.
-¿Tu quién?- Pregunto esta vez con la voz firme.
-Stephen, abre ya la maldita puerta.- Ordena.
-No.
-Niñata...- Dice a modo de advertencia.
-TU-NO-ME-DAS-OR-DE-NES. ¿Ha quedado claro? Así que si no te quiero abrir la puerta te quedas fuera, y para terminar, las cosas se piden por favor, claro, que no sé si esa palabra está en tu vocabulario.
-Abreme la puerta ya.- Sus palabras siguen pareciendo una orden.
-No.- Vuelvo a repetir.
-Por favor.- Se nota por su voz que le ha costado mucho pronunciar esas palabras. Una sonrisa triunfadora se forma en mi cara, me acerco a la puerta, giro la llave y abro la puerta, me hago a un lado para que pase, un vez dentro cierro la puerta.
Observo como se sienta en el sofá y coloca los pies encima de la mesa.-¿Qué quieres Stephen?- Pregunto cansada.
-Quería preguntarte si... si ¿quieres venir a cenar conmigo?- Su pregunta me deja sorprendida.
Me está invitando a salir.
¡ME ESTÁ INVITANDO A SALIR!
¡ME ESTÁ INVITANDO A SALIR A MÍ!
Si, te está invitando a salir, creo que a todos nos ha quedado claro.
Tienes un don para destruir el momento.
-Y... ¿Que dices?- Sus ojos están posados en mi mientras espera mi respuesta.
- Esto... si, claro.- Me froto las manos en el pantalón.
-Bien, vamos.- Da un par de pasos hacia la puerta.
-No, quiero decir, si, pero tengo que vestirme antes, no puedo ir en pijama.
-Vale.
-No sé, puedes encender la tele o lo que quieres.
Rápidamente salgo del salón y voy a mi habitación, abro el vestidor, empiezo a sacar ropa y más ropa, hasta que me decido por algo, un vestido negro con la espalda descubierta.
Dejo el vestido sobre la cama, me siento delante del espejo y empiezo a maquillarme, me aplico un poco de máscara de pestaña, me paso la brocha para dejar colorete rosado en mis mejillas, y un brillo labial, el cual meto en mi bolso.Vuelvo a mi habitación, me pongo el vestido, cojo los tacones del zapatero, los cuales son negros al igual que el vestido, y recojo mi pelo en un moño desenfadado.
Salgo al salón donde Stephen me espera viendo un programa de lucha del cual nunca había oído hablar y mucho menos había visto.
No se da cuenta de mi presencia hasta que hablo.
-¿Nos vamos?- Rápidamente se pone de pie.
-Si, claro.- Me mira de arriba a abajo, espero a que diga algo, pero al final sólo abre la puerta y sale por ésta.
Todo un caballero.
Salgo del apartamento, cierro la puerta y guardo la llave en mi pequeño bolso.
Bajamos por el ascensor en silencio, ninguno de los dos intenta sacar ningún tema de conversación, y así seguimos hasta llegar al vestíbulo. Abre la puerta y esta vez se espera a que salga yo primero.
Miro a todas partes esperando a que Stephen empiece a caminar.
Lo sigo de cerca hasta llegar a un Jeep negro.
- A sido aun consideración por tu parte venir en coche ésta vez.- Digo recordando cuando me tuve que montar en moto para poder llegar a mi edifico.
-Vamos, sube.- Dice abriendo la puerta del coche.
¡MATADME YA!
Ha sido muchísimo tiempo sin publicar, lo siento tantísimo.
No tenía inspiración.
Pero estrujandome la cabeza ha salido esto, espero que les guste.
PERDONADME.
Besos.
Att: Andrea ♡♡OS SUPER QUIERO♡
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Me tendrás miedo
Ficção AdolescenteElla era una chica normal, trabajaba en un bar, tenía un pequeño apartamento, una familia a la que no le importaba y amigos que la querian. Y después llegó él, el chico conocido y temido por todos los de su alrededor. Se conocerán por culpa del des...