Menor

CAPÍTULO 36

Sabía que no había sido buena idea haber venido a la fiesta de Ally, desde un principio supe que venir no iba a ser bueno.

Rebecca dijo que iba a valer la pena, en especial cuando se trataba de una fiesta de la familia Bones. Además, le encantaba la idea de que Luke iba a estar ahí.

No sabía si ella conocía que Luke y Elizabeth fueron novios, y lo mucho que él me debería de estar odiando por pensar que su relación había terminado por mí, porque ahora Elizabeth estaba enamorada de mí.

Pero a mí no me gustaba Elizabeth, empezando por que ella había estado con Luke y ser su novio era entrar a una zona peligrosa que solo Luke puede manejar.

Sin embargo, ella aún estaba con él. No sabía si como amigos o si su rompimiento eran simplemente rumores. Pero los había visto en la fiesta, había visto a Elizabeth en la fiesta.

Ella estaba con un vestido de color azul que contrastaba de su cabello de una forma en la que no podía evitar llamar la atención a todos a su alrededor, pero lo peor de todo fue que, ver a Elizabeth fuera del uniforme del colegio me hizo darme cuenta de la silueta que tenía y que en realidad no era del todo plana. Para nada plana.

Lo más extraño de todo fue la forma en la que ella reaccionó al verme, creí que ella iba a dejarme de lado e ignorarme yendo con sus amigos o Luke, pero ella actuó simplemente de la misma manera en la que yo.

Rebecca por otro lado se la mantuvo con los chicos de la escuela de Joyce Williams, de la cual ella había pertenecido antes de entrar a Worstershire. Ella me había dejado solo, si quiera me presentó de sus amigos.

La había perdido de mi mirada, la estuve esperando en las escaleras cuando ella me había pedido que no me moviera del lugar donde me encontraba, no supe cuánto tiempo llevaba ahí esperándola, pero no había sido mucho.

Había tomado mi camino hacia las afueras de la casa y había sido un gran error, ya podía ver como algunas empezaban a comerse entre sí esperando tener un poco de privacidad.

Me recosté contra uno de los carros que estaban estacionados, los vidrios del auto estaban completamente polarizados y no podía ver por dentro, pero si logré ver como estaban de empañados los vidrios.

En cuanto recosté mi cuerpo en la parte frontal del auto, la alarma del auto sonó. Automáticamente me levanté del auto asustado.

—¿Quién está ahí?— escuché una voz proveniente de dentro del auto, rápidamente el auto dejó de sonar.

—Yo.

Me golpeé mentalmente por haber dicho eso, igualmente, el chico dentro del auto no pareció importar.

—Oye—me dijo él—, ¿cómo sabes si una chica es virgen?

La pregunta me cogió desprevenidamente, pero aun así contesté. Al menos era mejor que estar esperando a Rebecca en las escaleras.

—Pues, por el himen ¿no? — dije dubitativo.

—Ja, a mí me contaron que eso depende por la forma de las caderas y cómo bailan— eso era algo que también había escuchado, pero no creía, la verdad sonaba bastante absurdo. Nos quedamos en un largo silencio hasta que él se dignó a seguir hablando—. ¿qué es el himen?

—Pues, es un tejido que tienen las mujeres y se rompe en una relación sexual, sangran en realidad— dije, la verdad me escuché un tanto inteligente al decir eso, ¿pero que más podría decir? Mi madre es ginecóloga.

—¿Eso significa que no fui la primera vez de mi novia?— esta vez él sonó un tanto decepcionado—, yo no vi que ella haya sangrado.

—Pues—empecé yo—, hay excepciones. Quizás si lo fuiste.