Las naves ya estaban entrando al garaje de La Guarida por una salida camuflada con un holograma, para que nadie supiera que estábamos allí. Había gente esperando para descargar los enseres que traían y clasificarlos. Yo observaba la situación a lo lejos, junto a mi cubo de agua y mi fregona, cruzada de brazos. La puerta, situada en un lateral del vehículo, se deslizó hacia arriba para dejar pasar a Craig, Thomas, y más hombres y mujeres que no conocía. Juntos abrieron la puerta trasera y dejaron ver varias cajas y refrigeradores que comenzaron a sacar y llevar al almacén.
Thomas y Craig se iban de la sala cuando se cruzaron conmigo.
—Estás increíble, Loreen — dijo Thomas, sorprendido.
Craig se calló y me miró sin más.
—Gracias.
—¿A ti que te parece? — Thomas le dio un codazo a su sobrino para que hablara.
—Un buen corte de pelo, sin duda.
—Me lo tomaré como un cumplido — dije yo.
Ya no quedaba nada de mi melena enredada y basta. Ahora llevaba el cabello corto a la altura de los hombros y angulado hacia delante, con la parte trasera más corta. Este nuevo look endurecía mis facciones y me hacía sentir más fuerte y segura conmigo misma.
—¿No te parece que Loreen ya ha cumplido con el castigo que le impusiste, Craig? — dijo Thomas cuando me vio coger el cubo de agua.
—Bueno... Puede ser — titubeó.
—Si por mi fuera, ya te hubieras librado de esto hace días — me susurró Thomas —. Pero Craig también manda, y cuando le llevas la contraria se pone como un basilisco.
—Te estoy escuchando — refunfuñó Craig —. Loreen, puedes volver a Armamento.
De la emoción y el alivio que sentí, solté el cubo de golpe, que chocó al suelo con un estruendo que asustó a Thomas y Craig. ¿De verdad estaban tan sensibilizados con los ruidos imprevistos?
Así que después de que Craig me diera luz verde para volver a entrenar, me esforcé al máximo para recuperar el tiempo perdido y así poder ir a la próxima misión. Quería que viera que estoy preparada y puedo cuidar de mí misma, aunque iba a ser misión complicada, porque él aún me seguía viendo como la niña delicada del vestido blanco que vino a salvarle la noche de la graduación. Aunque con el corte de pelo y mi nueva actitud, más enérgica y positiva, comenzó a mirarme con otros ojos. Me echaba una mano en todo lo que podía e incluso se pasaba tardes enteras ayudándome a practicar mi puntería con la pistola -tal vez para que no le volara la cabeza a algún compañero- pero aun así se lo agradecí. También comenzó a soltar la lengua y contarme anécdotas de su estancia en La Guarida, pero lo que más me gustaría saber, para poder entenderle mejor, era su vida anterior a unirse a La Resistencia. De momento ya estábamos haciendo grandes avances, los dos juntos.
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RESISTENCIA [EN EDICIÓN] [COMPLETA] #PGP2018
Bilim Kurgu[COMPLETA] Loreen está a punto de cerrar una etapa de su vida cuando sus planes futuros se ven frustrados tras conocer al líder de La Resistencia, una persona fría y seca que encabeza este movimiento insurgente en contra del Gobierno, controlado por...