Secuela de: "El Legado Stark"
Después de un año, Becky Stark vuelve a Nueva York. La reciente caída de S.H.I.E.L.D. ha dejado un gran vacío en los Vengadores, quienes necesitarán la ayuda de la chica cuando se ven afectados por una nueva y gran ame...
Becky y el Capitán llegaron al restaurante de la dirección que Tony les había enviado a su teléfono. Sin duda, el ingeniero elegiría uno de esos lujosos restaurantes gourmet de Dublín. En la recepción, el encargado los dirigió a un pequeño salón privado en el segundo piso del lugar. Ella no dejaba de abrazar a Steve, contenta y emocionada por la sorpresa que él le había dado.
Cuando ambos tuvieron frente a ellos la mesa reservada donde sus amigos los esperaban, Steve le sonrió a Tony mientras él se adelantaba para recibirlos. En la mesa había varias botellas de champagne y varios aperitivos para acompañar.
—¿No te desmayaste? —bromeó Tony mientras lo abrazaba para felicitarlo. Thor se acercó a Becky y su abrazo la cubrió por completo.
—Deseo de corazón que estés siempre rodeada de felicidad, pequeña; recuerda que Asgard siempre será parte de ti. —Las palabras del dios del trueno la hicieron llorar, sabía que Thor estaba abriéndole las puertas de su reino, sin importar lo que opinara Odín.
—Gracias, Thor —le respondió ella cuando él terminó con su abrazo. Steve era exageradamente felicitado por Clint cuando a ella se acercó Natasha, se veía conmovida por ambos.
—Ya es tiempo de que ambos sean felices, lo merecen y me da gusto que él ya no esté solo y te tenga a ti —dijo Black Widow con una enorme sonrisa.
—Te debo mucho, Nat... Gracias —respondió Becky mientras seguía escuchando las bromas que le hacían a Steve.
—Qué bueno que dijiste que sí o este anciano jamás habría sentado cabeza —dijo Clint a Becky mientras seguía al lado de Steve, ella rió cuando él guiñó dos veces.
—¿Estás segura? Todavía puedes rectificar —dijo Tony llegando a abrazar con dulzura a su hermana.
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—Estoy segura, Tony —respondió a la pregunta con un nudo en la garganta, emocionada de recibir la felicitación de su hermano. En el abrazo, Tony habló al oído a Becky.
—Te mereces todo lo bueno de este mundo, sé que serás muy feliz; te quiero, hermanita... Y, por favor, cuida a Steve que ya es algo mayor, ¿Sí? —La última frase la dijo más alto para que el Capitán escuchara, ella lo abrazó fuerte y después tomó la mano de Steve.
Felicitación tras felicitación, todos volvieron a su lugar en la mesa para cenar en honor al compromiso del Primer Vengador y la hija de Howard Stark. Todos parecían estar aprovechando esos instantes donde dejaban a un lado sus facetas de superhéroes. Sabían que dentro de pocos días tendrían que volver a la realidad donde había mucho con lo cual lidiar.
La estadía en Dublín duró dos días y después se hospedaron en unas cabañas lejanas bien adentradas en el bosque, las cuales eran muy lujosas y sólo eran utilizadas por personas que pedían estar lejos del resto del mundo y con la más absoluta discreción. La reservación la había conseguido Pepper con los contactos dentro de Industrias Stark.
