Capitulo 21

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Ya falta solo una semana para mi boda, poco a poco han estado empacando mis cosas en grandes cofres de madera con ostentosos decorados  que llevaban al castillo, la gente en casa a estaba muy acelerada, como era de esperarse desde hacía un par de meses se habían repartido ya las invitaciones para la ceremonia, no tenía tiempo para estar con Jules, con tantas visitas al castillo entre otras cosas, estaba todo el día de un lado a otro, cada vez se veía mas vacía mi habitación, mis vestidos habían sido sustituidos por unos más elegantes, de cuando en cuando lograba intercambiar alguna sonrisa con Jules, en una pequeña maleta había estado guardando algunas cosas que me llevaría conmigo en mi huida, entre ellas, joyas, mi enciclopedia, pedí a mis criadas unos de vestidos, para poder llevarlos conmigo al ser mucho más sencillos y ligeros, ellas accedieron a darme los y di la indicación de que pudieran a Madame Inés unos vestidos nuevos por orden mía, una vez salieron de mi habitación, comencé a doblar cuidadosamente los vestidos para luego guardarlos en la maleta, la cerré y la guarde bajo mi cama, que era de las pocas cosas que se quedarian aquí, había regresado de otra visita al castillo, ya están cada vez más adaptada a el, me acosté con todo y el vestido, estaba muy agotada, cerré los ojos y empezaba a dormir cuando llegaron mis criadas para ayudarme, me retiraron el vestido y me colocaron la ropa de dormir, está vez me recosté ya tapándome con las cobijas y dormí, recordando las platicas y lecciones de Manon sobre cómo ser una buena esposa, las clases con Madame Jade, todo ese entrenamiento especial  y para ser una  excelente princesa y futura reina de Francia. Tenía más miedo de casarme, no quería hacerlo y al mismo tiempo si, pues escaparía con el amor de mi vida, pero aún así estaba nerviosa por el acto que cometería, más no podía arrepentirme de esto, ya estaba muy cerca, aún no viviría en el castillo, eso sería hasta el día de mi boda, aunque en ese momento no tenía idea de los problemas que más adelante enfrentaríamos para lograr nuestro cometido.

No me voy a casar.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora