Era el punto de la ocho de la noche, del 28 de febrero, esa semana se había ido realmente rápido y en el apartamento de Viktor se llevaban a cabo los preparativos para cierta fiesta que sería mañana. Ambos esa noche tenían la ayuda de Isabella y Mila, ellas se habían ofrecido amablemente a decorar todo para el fabuloso cumpleaños de Plisetsky que se celebraría después del entrenamiento.
Ambas chicas permanecían en silencio pues notaban que algo extraño estabas pasando entre Viktor y Yuri los cuales sólo se hablaban lo necesario, parecían dos desconocidos. Terminaron aprisa los preparativos y finalmente ellas se despedían de aquella pareja y de la pequeña Victoria en conjunto de Maccachin.
-Ya esta, todo listo Viktor.-expuso Isabella mientras Mila se encontraba jugando con Victoria la cual había aprendido un nuevo truco, jalar los cabellos de las personas que la cargaban, Nikiforov observó a su hija divertido a Mila y luego a su hermana exponiendo.
-Gracias, fue de mucha ayuda espero que a Yurio le agrade todo esto.-
-A ese chico le agradará no te preocupes y si no lo hace yo me encargo.-Dijo tronándose los dedos, mientras sonreía de manera malévola.-Entonces nos vemos mañana.-
-Si...-
-Oh es verdad, Viktor, mamá y padre quieren venir ¿esta bien?-
-Claro ¿por qué no?-respondió animado el peli plata.-Entre más personas mejor.-
- Esta bien, hasta mañana Yuri.-
-Hasta mañana Isabella, Mila muchas gracias.-agrego tomando a su hija en brazos.
