The Invisible Boy |Jackson Wang|

Capítulo Nueve

En cuanto Diana se fue, Jackson no tuvo más remedio que suspirar frustrado y controlar sus emociones. Sabía que las cosas con ella no habían mejorado del todo y esperaba que pronto se resolviera.

El chico fue a su cuarto, luego de cerrar la puerta detrás suyo, depositó la dichosa invitación en la mesa de noche y se tumbó boca abajo en su cama.

Unos leves golpes en la puerta hicieron que Jackson se levantara de la cama.

—Adelante —dijo poco entendible

Su madre abrió la puerta y asomó su cabeza mostrando una sonrisa en el rostro.

—Cariño, ¿te apetece tomar algo mientras la cena está lista? —dijo la mayor.

—Claro, en un momento voy —se quedó sentado en la cama.

—¿Qué tienes hijo? —entró y cerró la puerta— ¿Pasó algo con Diana? Te noto extraño.

Él negó, aunque en su interior sabía que sí era por ella su estado de ánimo.

—Oh. ¿Qué es esto? —ella vió la invitación y la tomó para observarla mejor.

—No es nada —dijo él con cierto tono de fastidio. Odiaba que su madre se metiera en ese tipo de asuntos.

—Así que una fiesta ¿Eh?

—Mamá deja eso. Sabes que no voy a ir.

—¿Qué? ¿De qué hablas? Deberías ir, hace mucho tiempo que no sales a divertirte. Además, es fiesta de... — vio el nombre en la invitación— ¿Los Thomson? ¿Acaso ese no es el apellido de Diana?

—La fiesta es de su hermano.

—¡Mejor aún! Ve y diviértete —dijo Sophie tratando de animar a Jackson.

—No voy a ir, sabes lo que sucede en esas fiestas.

—Hijo, ya pasó mucho tiempo desde aquella vez. Tú no tuviste la culpa de nada, todos cometemos errores y más a esa edad.

—No quiero que se vuelva a repetir.

—Date una oportunidad, no puedes estar encerrado tanto tiempo. Pronto se acabará tu etapa de juventud y no habrás aprovechado nada.

—Si digo que sí, ¿Dejarás de insistir la próxima vez?

—Lo prometo —declaró ella.

(...)

—¿Qué dijo Nick que lleváramos? —preguntó Rebeca a Diana una vez que habían entrado a la tienda.

—La botana y desechables —contestó ella tomando un carrito de supermercado.

—No entiendo por qué dejó esto para última hora —bufo Rebeca.

—Ya sabes como es de irresponsable.

—Pero lo malo es que nos mandó a nosotras para comprar todo esto —exclamó la castaña.

Diana sólo rió por lo que le escuchaba decir a su amiga.

El carrito ya estaba lleno, ellas estaban formadas en la fila para pagar.

—¡Oh cierto! —exclamó Rebeca asustando a Diana.

—Hey, ¿Qué te sucede? Casi me revientas el tímpano —Diana hizo una mueca.

—No me contaste lo que sucedió con Jackson  — Rebeca la miró pícara.

—¿De qué hablas? Quita esa cara porque ya no le hablo más.

—¿Qué? ¿Por qué? —reclamó Rebeca, que al parecer sabía algo que Diana no.