The Invisible Boy |Jackson Wang|

Capítulo Cuarenta y Cuatro

—Jackson...— gimió suavemente.

Diana cerró los ojos con fuerza mientras disfrutaba los besos que se esparcían por su cuello y clavícula.

—Mhm...— volvió a emitir ella seguido de un par de jadeos.

Jackson se separó un poco de ella para observar con detalle su rostro consumido por el placer, su piel ardía al igual que el deseo en sus ojos. La besó delicadamente, sus suaves labios la acariciaban con ternura y suavidad. Ella aferró sus manos a la espalda de Jackson y sus piernas a su cintura, su cuerpo caliente la hacía desearlo cada vez más.

—No me hagas esto —susurró Jackson con voz ronca—. Regresa conmigo, lo último que quiero es lastimarte.

Ella no entendía muy bien lo que le decía, sólo pensaba en el placer que estaba recibiendo. En ese momento su mente estaba bloqueada. Acarició de nuevo su pecho y abdomen sintiendo el impulso de tenerlo cada vez más cerca.

—Sabes que jamás te haría daño —musitó él—. Yo te am...

—¡Despierta! Se te hará tarde para ir a clases.

—¿Qué hora es? —preguntó Diana adormilada.

—No quieres saber, mejor date prisa, te veo abajo en diez minutos para que desayunes algo —terminó por decir Nick y se fue.

—En cinco estoy abajo.

Diana se vistió lo más rápido que pudo, pero en su mente no dejaban de aparecer ciertas imágenes de aquel sueño.

Llegó a la cocina y cogió una manzana a la que le propinó una mordida.

—¿Lista? —le dijo Nick.

Ella asintió. Nick dio un último sorbo a su café y salió de casa.

Al cerrar la puerta del auto, Diana miró con insistencia a su hermano, él la ignoró y puso el auto en marcha.

—¿Puedo contarte algo? —habló ella sin dejar de mirarlo.

—No —respondió Nick sin dejar de ver el camino.

—Bien. Te lo diré de todas maneas, tuve un sueño bastante extraño —apartó la mirada dirigiéndola a sus manos.

—¿Me importa?—comentó el chico.

—En mi sueño, yo... bueno... tenía sexo con Jackson —admitió susurrando lo último.

Nick comenzó a toser, se estaba ahogando con su propia saliva, su confesión lo tomó desprevenido.

—Okay, esos son muchos detalles, me estás dando muchos detalles, no te pedí detalles, ¿Por qué me das detalles? —dijo Nick hablando rápido y pasando cada una de sus manos por su cabello con nerviosismo.

—El punto es... —continuó Diana riendo por la actitud de su hermano

—¿Hay más? Oye disculpa pero no quiero saber más detalles —dijo escandalizado.

—... que él me decía cosas extrañas —terminó ella frustrada por su exagerada reacción. ¿No era él quien hablaba tanto de sexo?

—Escucha, se supone que no debo meterme en tus asuntos pero si quieres saber el por qué de tu sueño ve y preguntárselo a Jackson.

—¿Estás loco? Jackson no es alguien con quien quiera hablar.

—No me has dicho por qué no quieres hablar con él. Entiendo que no lo recuerdes pero si te das la oportunidad de conocerlo tal vez no te arrepentirás.