Unsteady; CAMREN

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Nota: este capítulo contendrá varias canciones, escúchenlas cuando lo indique si quieren y si no pues, sepan que les quiero igual <3

I feel It Coming - The Weeknd

Lauren's POV

Cuando terminó la conferencia, Keana ordenó al chófer de la limusina a que se detuviera delante de un puesto de perritos calientes y así fue como, vestidas de gala, estuvimos de pie comiendo entre bromas. Todas parecían llevarse estupendamente con Lucy, que había encajado de maravilla con el grupo de amigas de Camila, mientras yo escuchaba sus conversaciones divertida pero sin atreverme a intervenir. No sabía qué podía decir sin sentirme estúpida pero sobretodo, no podía apartar los ojos de la chica de ojos chocolate que me observaba con un brillo diferente tras su discurso. Estábamos rodeadas de seis chicas en pleno Washington D.C, ya no llovía pero el agua había empapado las aceras y dejado hermosos charcos que reflejaban las luces nocturnas de la ciudad que tanto me gustaban. Pero nada de eso importaba porque desde que nuestras miradas se habían conectado tras bajar del vehículo, mantenían una charla silenciosa que me moría por saber qué escondía. Algo había cambiado entre nosotras aunque no sabría decir el qué ni cuándo lo había hecho. Sólo lo sentía, la electricidad que me ponía la piel de gallina cuando la contemplaba sonreír aunque sus sonrisas no fueran para mí. ¿Cuándo había llegado a esto? ¿Cómo mi deseo de protegerla, de querer descubrir por qué estaba rota, se había transformado en esto?

— ¿Y en qué trabajas, Lauren? —Inquirió Ally haciéndome apartar dolorosamente mis ojos de los de Camila. La pequeña había terminado de comer y se limpiaba sus dedos con una servilleta de papel.

— Oh, eso me gustaría saber.

— ¿Eres su amiga y no lo sabes? —Dinah alzó una ceja curiosa intercambiando su mirada entre Lucy y yo.

— Nos conocimos hace un mes pero Lauren nunca habla de su vida. Ahora que lo pienso, la que habla sin parar soy yo todo el rato... —Lucy entrecerró los ojos provocando que todas rieran excepto yo, que forcé una sonrisa.

«Mierda, mierda, mierda» sólo podía pensar mientras sus carcajadas se apagaban y ahora todas me observaban curiosas, esperando a que dijera algo. Tenía que encontrar la forma elegante de responder sin revelar demasiado. Jamás podría decir que era periodista aunque esta fuera parte de mi falsa identidad mortal porque, ¿cómo se tomaría Camila esto? Algo en mi interior me dolió al pensar en ello. Decidí jugar mis cartas despacio, utilizando todas mi dotes comunicativas que había aprendido en libros y analizando el comportamiento humano.

— Me gusta hacer fotografías de la ciudad, del agua, de animales, personas... Cualquier cosa que sea lo suficientemente hermosa como para atraer mi atención —Clavé mis iris verdes según hablaba sobre Camila esperando a que ella confirmara lo que acababa de decir pero, sorprendentemente, sólo se sonrojó—. La gente me paga bastante bien por ellas aunque mis preferidas las tengo en el salón de casa. Verdad que sí, ¿Camz?

La aludida asintió elevando sus ojos del suelo para mirarme, esbozando una sonrisa aún con rubor en sus mejillas. No sé qué le pasaba pero no había sido capaz de hablar nada coherente conmigo desde que nos vimos por primera vez esta tarde. Al principio realmente había creído que eran los nervios por el discurso pero tras verla hablar con esa confianza en el escenario, supe que no era eso lo que la tenía así. Estaba tan tímida... Pero era sólo conmigo. No lo entendía.

— ¿Camz? Ok, creo que necesito un chupito de tequila tras ese apodo cursi. —Dinah habló con fingido asco poniendo los ojos en blanco.

Todas volvieron a reír y tras comentar un par de cosas sobre la fotografía, continuaron su conversación como si nada. Una vez que Ashlee y Camila terminaron de comer su cuarto perrito, volvimos a la limusina. Todas parecían entusiasmadas por ir a ese club y yo había comenzado a tener curiosidad, quería saber qué tenía tan de interesante ese sitio.