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I Need You- Morrissey & Marshall

Lauren's POV

Todo se sentía extraño, todo era demasiado fácil y liviano. Todo estaba tranquilo, todo iba demasiado bien y las cosas parecían estarse solucionando. No me gustaba porque lo sencillo siempre implicaba que te habías dejado algo atrás que podía haberse hecho mejor pero, no sé, era difícil resistirse a esa comodidad que había comenzado a rodearme.

Normani tan rápido como desapareció sin rastro durante cuatro días, apareció sonriendo en la puerta de mi casa mientras yo me desesperaba aterrorizada pero en silencio con Camila entre mis brazos. Recuerdo abrirle la puerta y encontrármela ahí, con un aspecto deplorable aunque intacta, y cómo tuve que inventar una excusa tonta para dejar a la latina sola en mi apartamento mientras me llevaba a mi hermana lejos para poder gritarle como lo deseaba. Porque estaba enfadada, porque había tenido miedo de perderla, porque había sido descuidada y se había ido sin un equipo, porque la quería y me alegraba de tenerla de vuelta conmigo.

— Estoy bien, Laur. Me dejaron salir cuando vieron que no les decía nada. Probablemente intenten seguirme para obtener más... Tendré cuidado. —Me repitió decenas de veces en el pasillo de las bebidas del supermercado según mis ojos la escaneaban de arriba a abajo, sin creérselo.

Yo sabía que algo no iba bien. Normani parecía menos concentrada de lo habitual, su mente estaba difusa cuando nos comunicábamos como si llevara demasiadas cosas en la cabeza, sus ojos estaban cristalizados y me evitaban demasiado.

Pero como dije, era más fácil escoger la opción más cómoda. Yo estaba cansada y sólo quería llegar a mi apartamento para abrazar a la que esperaba que pronto fuera mi novia, dejar de ser el robot que me habían programado para ser. Por eso lo ignoré, como había ido ignorando muchas cosas durante meses sin darme cuenta. Supongo, que me relajé al saber que iba ganando o quizás, fue el amor quien me hizo detenerme un poco.

— Hola, preciosa. —Murmuré al oído de Camila al llegar de trabajar, encontrándomela sentada en el sofá distraída leyendo un libro de medicina.

Esa era una de las cosas sencillas que habían surgido en la nueva rutina. La latina se negaba volver a la Casa Blanca pese a la insistencias de sus padres pero tampoco podía quedarse en casa de sus amigas. Ally vivía con su novio y no quería invadirles su privacidad, Dinah no tenía espacio para nadie más y el resto vivía fuera de la ciudad. Así que, llevaba casi una semana con ella en mi apartamento aunque apenas nos veíamos porque yo me levantaba demasiado pronto para ir a trabajar y me quedaba demasiado tarde en la redacción, agobiada por la pila de viejos artículos que tenía que publicar a finales de la semana.

Camila por su parte había decidido que volvería a la universidad después de las vacaciones de Navidad, cuando el mundo centrara del todo su foco mediático en otra cosa. Mientras tanto, se dedicaba a estudiar para sus próximos exámenes y había decidido atrincherarse en la mesa del comedor que estaba llena de apuntes, libros, platos y tazas sucias. Era un pequeño desastre que alteraba mi maniático orden en el apartamento. Curiosamente no me importaba, incluso había comenzado a amar ver ese caos que dejaba a su paso.

— ¡Hola, Lolo! —Camila soltó el libro y se giró para rodearme con los brazos el cuello, abrazándome primero y besándome levemente después. Al separarme pude ver la sonrisa con la que me miraba.

— ¡Wow, cuánta energía! No sabía que la microbiología fuera tan interesante. —Bromeé dejando mi chaqueta y bolso en la butaca para después sentarme a su lado.

— Es la cosa más aburrida del mundo... —Camila puso un puchero triste según se subía sobre mis rodillas— Por eso me alegro de verte. ¿Me entretienes un rato?

Unsteady; CAMRENDonde viven las historias. Descúbrelo ahora