Unsteady; CAMREN

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Let You Go - CASHFORGOLD

Lauren's POV
**Flashback**
- 3 de enero -

— ¿Entonces Gabriel es un arcángel también? ¿Algo así como una súper poderosa jefa odiosa? —Inquirió Camila acostada bocabajo en su cama moviendo los pies de una forma  que me causaba gracia y ternura a la vez mientras intentaba resumir lo que yo acaba de responderle.

Sólo me dediqué a asentir porque supe que continuaría hablando.

— Genial... No es que tu ex novia sea supermodelo o perfecta, es que es literalmente un ángel. ¿Cómo se supera eso? Me siento halagada por ser escogida, Lern Jergi —Bromeó, aunque sabía que no le hacía nada de gracia— ¿Intentó matarme, verdad?

— Sí. Por eso jamás debes acercarte a Gabriel, ¿vale? —Le advertí endureciendo mi mirada, cosa que resultó difícil al ver su rostro con aquellos enormes ojos chocolate mirándome expectantes— Ella no es como yo o como Normani. Te hará creer cosas que no son, te prometerá un mundo si hace falta para acabar contigo.

— Lo sé, Lauren... Me lo has repetido decenas de veces ya. Creo que aquella vez en el puente fue suficiente.

La observé suspirar con el ceño fruncido, molesta. Esbocé una sonrisa suave según me alejaba de la ventana de su cuarto, acercándome a ella para acuclillarme a su altura. No pudiendo resistirme a su cara enfurruñada besé su nariz escuchando un quejido por su parte.

— ¿Alguna pregunta más, gruñona?

— ¡No soy una gruñona! —Infló sus mejillas causando una risa instantánea por mi parte— Pero sí, tengo miles.

— Adelante. Te responderé lo que pueda.

Eso fue como disparar el gatillo porque la latina se incorporó rápidamente sentándose con las piernas cruzadas sobre el colchón. Oh, no.

— ¿Entonces no tenéis género definido? ¿Cómo te convertiste? Oh, espera, ¿te conviertes o naces siendo así? ¿Por qué la abuela Jauregui te llama ángel? ¿Acaso sabe que lo eres? ¿Cuántos años tienes? Oh, por Dios, estoy saliendo con una anciana... ¿Le diste aquel regalo misterioso de navidad a Dinah? —Habló de repente en un tirón apresurado sin apenas respirar— Porque sé que, quien estaba siempre conmigo cuando me sentía mal, eras tú.

— Epa, epa —Alcé mi mano en un gesto de calma—. Más despacio.

Camila rió hinchándome el corazón instantáneamente. No había mayor felicidad para mí que verla así.

Me levanté para sentarme a su lado sintiéndome analizada por ese par de esferas marrones que me escudriñaban al detalle. Su curiosidad necesitaba ser saciada porque era parte de su naturaleza, así que decidí complacerla un poco. Aunque fuera a medias.

— A ver, a ver... —Medité un instante haciendo memoria a todo lo que había preguntado anteriormente— No tenemos género, pero tenemos la capacidad de poder transformar nuestro cuerpo al sexo que más cómodo nos resulte. En mi caso, es una mujer porque Padre me recogió siendo una niña humana. Así que respondiendo a tu siguiente pregunta, algunos nos convertimos y sólo unos pocos son creados siéndolo. Esos son los ángeles más poderosos que existen.

— ¿Cómo es el proceso? ¿Cómo te escogen?

— Debes ser huérfano y estar perdido, necesitar ayuda y tener un corazón lleno de luz. Padre simplemente te ve, ve tu futuro y en quién te convertirás y te asciende.

— ¿Recuerdas algo de tu niñez?

— Apenas recuerdo nada. Sólo la antigua Grecia, el hambre, las calles y la soledad. La soledad es lo que más recuerdo.