Unsteady; CAMREN

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Imagine - John Lennon

Lauren's POV

Algo no iba bien. No sabía la razón pero era un presentimiento que zumbaba en la parte trasera de mi mente, hurgando en mi cerebro cada vez más y más. Mientras patinaba alcé la vista al cielo soleado que se preparaba para el atardecer y desvié mi vista a la gente que reía y se movía al ritmo de la música sonando por los altavoces de la pista. Todo parecía demasiado simple, un día feliz y común más en sus vidas efímeras. Y era exactamente esto lo que me estaba preocupando cuando frené en seco, dispuesta a investigar más, y alguien chocó contra mí. Alguien que deduje que era Camila por el olor de su champú afrutado y el gritito adorable que hizo al caer.

— ¡Ay!

No pude evitar reírme al girarme pese a que seguía con esa maldita sensación. Había aterrizado de culo y me observaba con cara de desconcierto desde el suelo.

— ¡Pero no te rías! —Su ceño se había fruncido porque estaba ofendida al escucharme reír— ¡Me va a salir un enorme moretón en el culo!

— Perdón, perdón. ¿Estás bien? —Le tendí la mano para ayudarla a incorporarse pero la apartó de un golpe.

— Creo que ahora es tarde para preocuparse cuando has estado riéndote de mí cinco minutos... —Replicó sacándome la lengua y el gesto fue demasiado infantil como para tomármelo en serio.

— Eres demasiado linda cuando estás enfadada conmigo. —Comenté sin pensar causando que ella y yo abriéramos los ojos sorprendidas.

Camila esbozó una sonrisa cuando se percató de que había hablado sin ningún tipo de filtro, que este era un pensamiento sincero que tenía sobre ella. Carraspeé incómoda mientras la observaba ponerse en pie. Cuando creía que lo había logrado, uno de sus pies se deslizó demasiado rápido provocando que volviera a caer. Lo intentó de nuevo pero sólo se quedó en eso, en un intento. Me llevé una mano a la boca intentando ahogar mi risa. Mierda, era demasiado tierno y gracioso verla así.

— ¿Podrías dejar de reírte y ayudarme? La gente está comenzando a mirarme y Dinah no para de señalarme mientras me graba con su teléfono desde lejos. —Intentaba sonar seria pero hasta ella había comenzando a reírse de su torpeza.

Le tendí una mano para ayudarla pero ella usó más fuerza de la que había previsto en un principio y tiró de mí, arrastrándome sobre el hielo con ella. Supongo que la situación ideal, la típica de una de esas películas cursis que había visto cuando vine a la Tierra, era aterrizar sobre ella de forma casual y elegante donde nuestros labios estarían a centímetros. No pasó eso. Camila volvió a golpearse el culo, yo le clavé el codo en el estómago, me mordí la lengua al golpearme con su hombro y mi rodilla sufrió un dolor fuerte al impactar contra el suelo.

— ¡Mierda! Vale, esto sí que ha dolido.

— ¡Ouch! —Solté sentándome mientras movía la mandíbula de un lado a otro para intentar aliviar un poco el dolor.

Recogí el beanie que se había caído al suelo y lo coloqué en su sitio, dejando que mi pelo oscuro hiciera el resto del trabajo y se ordenara a sí mismo. Giré mi cabeza para comprobar si la castaña estaba bien pero sorprendentemente me la encontré sonriéndome cuando mis ojos se posaron sobre los suyos. En cuanto fruncí el ceño confusa, ella rompió a reír seguida por Dinah, Ally y Normani que se habían acercado para observar mejor qué estaba pasando.

— Creo que lo que mejor que he hecho en mi vida fue comenzar a grabar a Mila en cuanto subió a la pista de hielo con esos patines. ¡Voy a subirlo a Instagram y tus fans van a enloquecer! —Comentó la rubia más alta entre carcajadas según continuaba enfocándonos con la cámara su iPhone.