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Narrador Omnicente

Bianca y Carolina generaron una conexión muy linda. Bian no parecía una nena de 5 años, ella entendía a Carolina, o por lo menos lo intentaba y eso valía mucho. Se contaron experiencias de cuando eran más  chicas y los acontecimientos o recuerdos importantes para cada una... generaron una confianza instantánea.

Bian: Cuando era más chiquita mi papá me llevaba al parque y ahí conocí a mi mejor amigo -dijo sonriente-.

Caro: ¿Si? Cómo se llama.

Bian: Gonzalo -dijo con una sonrisa me parcaba sus lindos hoyuelos-. ¿Quién es tu mejor amiga?

Caro: Karol y Valentina... quizá después te las presente -dijo y la nena asintió enérgica-.

Escucharon un toque de puerta entonces Carolina se paró a abrirla.

Al abrirla se encontró con el rostro pálido de Mariano cuando la vio.
El sonrió un gran nudo en la  garganta al ver a su hija tan grande. Se sintió culpable, por eso no quería que ella lo descubriera.
Carolina, al ver el estado del hombre, todo mareado, le propuso pasar.

Bian: ¿¡Papi!? ¿Estás bien? -corrio su hija hasta el-.

Mariano: Si... -dijo sin aliento mientras se sentaba en la cama de Agustín-.

Caro: Siempre que lo veo le pasa algo -diji graciosa-.

Justo en ese momento entraron Agustín y Maia.

Maia: Papá... ¿Estás bien? -dijo preocupada-.

Mariana: Si... Es solo un mareo, no es nada -dijo nervioso-.

Agustín sirvió un poco de Coca Cola en un vaso y le entregó al hombre.

Agus: Le tiene que subir la azúcar.

El hombre se tomó todo el vaso y el color le volvió al rostro.

Mariano: Ya estoy mejor, gracias Bernasconi -dijo con una media sonrisa y el muchacho se la devolvió-.
Niñas, es hora de  volver a casa... - con cada palabra que decía, se sentia más culpable. Tener a su hija, la cual abandonó por un amor y la dejó sin nada en la calle, no te hace sentir la mejor persona del mundo-.

Bian: ¿Ya? -hizo un puchero- ¿No me puedo quedar con Caro y Agus?

El padre negó.

Mariano: Vayan al estacionamiento... ahí está su madre -dijo mientras se ponía de pie-.

Maia: ¿A donde vas? -pregunto confundida-.

Mariano: Tengo que hacer algo... Ustedes vayan al auto, si? -pregunto mientras se dirigía a la puerta seguido de Agus y sus hijas- Hasta luego muchacho -le dio una palmada en el hombro mientras este abria la puerta-.

Antes de que se vayan, Bianca entró corriendo y abrazó a Carolina. Un abrazo lleno de  cariño, el cual no sabian de donde habían conseguido ya que recien se conocieron.

Cuando todos se fueron, a  Carolina se le ocurrió una idea... seguir a Mariano.

Se acercó a la puerta pero Agustín la detuvo.

Agus: ¿A dónde vas? -pregunto confundido-.

Caro: Necesito saber que oculta ese hombre... yo, yo siento que lo conozco y siento que el también me conoce a mi -dijo mientras abria la puerta-. Voy a descubrir que sucede.
Y después me contas porque tardaron tanto con Maia eh, que de mi no te salvas  -dijo y se fue-.

Localizó a Mariano a unos cuantos metros de ella... Estaba entrando a la oficina, ella se ubica al lado de la puerta la cual quedó mal  cerrada, por lo tanto se escuchaba lo que se iba a decir.

Mariano: No puedo más... necesito decirte... Ariel, es  algo muy importante que  me está torturando -se lo escuchaba alterado-.

Xx: Déjate de babosadas y decime de  una vez  lo que pasa -dijo el padre de Agustín-.

Carolina sintio que alguien se puso al lado suyo. Giró la cabeza y se encontró con Agustín. Decidió volver a poner atención a lo que estaban diciendo los padres de ambos.

Mariano: ... Me siento culpable Ariel, no se como decir esto.

Carolina y Agustín se miraron confundidos.

Ariel: Decime ya Mariano -dijo duro-.

Mariano: La novia de tu hijo Ariel... la novia de  tu hijo... Carolina -dijo con un nudo en la garganta-.

Carolina estaba más que confundida.  El señor si la conocía.

Ariel: Es una groncha ya lo sé -dijo restandole importancia-.

Mariano: No, Ariel, no. Yo... yo la conozco desde que es una bebé y se porque está acá... -dijo en un tono apenas audible, tanto que apenas Carolina pudo entenderlo-.

Ariel: ¿De dónde la conoces? ... ¿Sabes quienes son sus padres? -pregunto con intriga-.

Mariano: Si, si lo sé... suspiró - ...Ariel... yo soy el padre de Carolina.

El corazón de Carolina dejó de latir por un microsegundo. Agustín se giró a verla con la misma cara y la abrazó muy fuerte, tanto que podía sentir su corazón latiendo fuertemente. Lágrimas se comenzaron a desprender de  los ojos de Carolina mientras que de  fondo se escuchaban los gritos de sorpresa del padre de Agustín.

Ahora todo encajaba... absolutamente  todo.

Ariel: No puede ser Mariano... ¿Clara es  la madre?

Mariano: No... yo estuve con Clara mientras estaba casado con Sara, la madre de ella, después cuando Sara no sobrevivió al parto... decidí irme con Clara pero ella no quería a Carolina y... y la abandoné -dijo en susurró -.

Impotencia, miedo, bronca... eso sentía Carolina. Todos esos sentimientos se mezclaban con las lágrimas que caían de sus ojos y hacian un largo camino hasta mojar el pecho de Agustín.

Carolina se safó del agarre de Agustín.
🔶🔹🔶🔹🔶🔹🔶🔹🔶
Holaa, cómo están? A mi me brotó la inspiración 😅

Ok... CAPÍTULO IMPORTANTE , Carolina ya descubrió la verdad.

Estoy en un dilema... ¿Carolina interrumpe la escena y comienza a gritar sin parar a Juan o que ella salga corriendo y que Agustín se encargue del suegro 👊? Me gusta más la idea  de Agustín pero no estoy segura .

Comenten que les pareció 🤗.

¿Me sugieren novelas Aguslina?

Espero que les haya gustado 💕

Por cierto... ¿Quieren segunda temporada? Una lectora me puso que la haga y se me vino una idea... aunque tal vez sea la secuela y no la 2 temp.

Chauuui y gracias por hacerme feliz 😘💚


















En el video de la multimedia se ve el piquito que le dio Agus a la Kope 💚💚 ya les aviso que convulsione ahre pero posta 💕💫 ¿Ustedes que piensan sobre eso? Las leo ➡🙈🙉🙊




No Soy Igual Que Las Demás  [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora