Capítulo 4.
Nos comimos la pizza en un suspiro, y nos fuimos al baño a lavar los dientes.
En cuanto dieron las once y media, salimos hacia la casa de Nate.
Yo iba con Heather en su coche, y Jace iba en su moto.
Cuando estábamos a unas manzanas de la casa de Nate, se nos unió Logan, que también iba en su moto.
Llegamos a la casa y estuvimos buscando sitio para aparcar.
Cuando lo encontramos, bajamos del coche y sacamos nuestras mochilitas para guardar la ropa, nuestra intención era darnos un chapuzón, pero en cuanto llegamos y vimos el ambientazo, lo primero que nos apeteció fue ir a por una copa.
Tal cual.
Nos dirigimos hacia unas mesas en las que había todo tipo de alcohol y vi que Jace y Logan cogían unas botellas y vertían su contenido en un vaso con zumo de frutas.
Yo no era muy experta en beber, y había perdido de vista a Heather entre el bullicio.
Logan se me acercó y puso su boca cerca de mi oído.
-Yo te ayudo, Sid-me dijo mientras cogía mi vaso y vertía Coca-Cola en él para luego agregarle un chorrito de líquido transparente.
Me dio el vaso y yo bebí.
-¿Te gusta?
Asentí sonriendo con la cabeza y me puse de puntillas para acercarme a su oído.
-Me termino esto y vamos a la piscina, ¿te parece?-le dije.
-Me parece perfecto.-Me dio un beso en la sien y le dio un trago a su vaso.
Minutos después estábamos en la piscina rodeados de gente que salpicaba y reía a carcajadas.
Sentí que la piscina estaba demasiado llena y que se hacía pequeña por momentos.
-Sid, ¿estás bien?-Logan me miró preocupado, le sonreí para tratar de tranquilizarlo.
-Solo estoy algo agobiada, esto está petado.
-¿Quieres salir?-Asentí y buscamos las escaleras.
Pasamos al lado de un grupo de chicos que se nos quedaron mirando, bueno, en realidad no me miraban a mí, miraban a Logan.
Una vez estuvimos fuera de la piscina fui a buscar a Heather para que me acompañara a por mi mochila y así poder cambiarme.
La encontré en una esquina rodeada de chicos. Me acerqué tímidamente a ella, intentado taparme un poco, ya que estaba en biquini.
-Heath.-La llamé y ella se giró con una sonrisa de estúpida en la cara.
-¡Sid!-Exclamó-Me parece que acabo de ver a Jace por ahí buscándoos a Logan y a ti.
-Oh, vale, ¿me acompañas a tu coche a cambiarme?
-No hace falta que te cambies rubita, así nos das unas vistas exquisitas-Dijo uno de los chicos que estaban con Heather, a lo que yo hice una mueca de asco.
Eran tres chicos. Un rubio cenizo de ojos oscuros, bastante alto, otro moreno de ojos marrones, también alto y el tercero era castaño , no podía mirarle a los ojos porque estaba apoyado contra la pared mirándose las uñas con aire despreocupado. Era el más alto de todos ellos, y tenía varios tatuajes en sus trabajados brazos.
Todos ellos vestían ropa oscura y tenían copas en sus manos.
Todos excepto el moreno, que ahora sí me estaba mirando. Tenía los ojos extraños. Eran unos ojos preciosos, aunque desde mi posición no los podía apreciar bien y me estaban mirando fijamente.