- ¿Dónde está? ¿Cuánto tiempo más estará aquí? - Escuche la preocupada voz de Yamcha atravesar mi sueño.
Desperté y me di cuenta que me encontraba en la cama de un hospital. No entendía como carajos había llegado ahí, lo último que recordaba es que estaba en una florería comprando rosas azules para mi casa. Vi a Yamcha quien al notar que yo estaba consciente se acercó a mi.
- Hola bonita ¿como te sientes?
- ¿Qué paso? - Me miro taciturno y acto seguido acercó un pequeño sillón a mi, me tomo de la mano y volvió a mirarme pero esta vez me miro serio.
- Estabas en un estado de debilidad muy grave... ¿por qué lo hiciste?
- ¿Hacer que?
- Estaba muy sorprendido por la rapidez con la que bajabas de peso pero no me imaginé lo que estabas haciendo... debí darme cuenta, cada día te cansabas más y más y luego empezaste a cancelar las rutinas. ¿Quieres morir? - Lo sabe. Las lágrimas amenazaban con salir y sin poder controlarme más rompí en llanto.
- Claro que no, sólo estoy arta de mi, de mi físico, de todo. Ya no quiero ser así.
- Vas a lograr bajar de peso pero no así, vomitando todo lo que comes, tienes que ser paciente. El proceso es largo pero te dará resultados de por vida pero sólo si lo sigues tal y como es y más que verlo como un castigo o un reto difícil lo veas como una forma de vida.
- Es que no puedo Yamcha. No puedo.
- Eres tan débil. Cuando te conocí pensé que eras una chica fuerte que podía lograr lo que quisiera. Estaba equivocado.
No, yo no quería ser débil y no lo era, había dejado de llorar todas las noches por Vegeta, ya no pensaba en él. Que Yamcha me dijera que yo era débil era algo que me hacía enfurecer, yo no era débil.
- No lo soy.
- Claro que si, sólo las personas débiles recurren a este tipo de estupideces y no confían en su fuerza para lograr las cosas.
- Ya basta, tu nunca me habías hablado así. Me duele oír de ti esas palabras, más que un entrenador te has vuelto mi mejor amigo.
- Y precisamente por eso te digo todo esto. ¿Vas a seguir con esta mierda? Por que de ser así lo único que lograrás será acabar contigo. Nunca podrás verte como deseas.
- Es que quiero que sea rápido, quiero cambiar ya, quiero volver y hacerlo tragarse todas sus palabras, quiero que se arrepienta y sufra...
- ¿De qué estas hablando? - Nunca le conté a Yamcha lo de Vegeta, lo único que llegue a decirle fue del bullying que sufrí más no esa parte que era la que más me había marcado - ¿Quien te hizo daño realmente?
- No tiene caso - trate de desviar el tema.
- No, dime - insistió.
- Cuando iba al instituto conocí a un chico llamado Vegeta. Era el chico mas guapo que había visto en mi vida, lo veía como un príncipe. No imaginé que existiera alguien como él, tan perfecto. No pensé que se fijaría en mi pero ese día me defendió de una de las tantas ofensas que recibía, nadie había hecho eso por mi, nadie como el. Me esperaba que también me humillara pero no fue así... Me enamoré sabes y al final él sólo había jugado conmigo. Me dijo que yo le daba asco, que no se fijaría en alguien como yo... terminó matandome... - Yo lloraba y Yamcha se veía afectado por lo que le dije.
- Un imbécil. Pero él no se merece ningún sentimiento que venga de ti, ni siquiera el odio. Mejor piensa que ahora él ya no está ni estará nunca más y trata de idealizar una nueva vida sin vengarte de nadie.
- Imposible. Voy a destruirlo. Voy a humillarlo incluso más de lo que él me humilló a mi, voy a acabar con él me cueste lo que me cueste.
Pasaron cinco años desde aquel día que estuve hospitalizada. Yamcha y yo entrenabamos juntos de vez en cuando,pero él ya era todo un profesional en ello. Me convertí en la única dueña de la corporación Cápsula ya que papá se retiró y decidió vivir tranquilamente con mamá, supe que la empresa estaba al borde de la ruina y me dediqué a sacarla adelante, ahora mi empresa era la número uno en el mundo en tecnología. Le di trabajo a Yamcha como mi mano derecha, era algo así como mi chofer, mi guardaespaldas, mi amigo, mi todo. Lo más importante es que por fin había logrado bajar de peso, era como si me hubiera deshecho de todo mi pasado y todo gracias a la ayuda de Yamcha y más que nada a mi, por luchar contra todo para lograr mi cambio.
- ¿Vendrás entonces?
- Si Yamcha, sabes que no me perdería esta competencia por nada, te has estado preparando por todo un año y no pienso dejarte sólo.
- No sabes lo bien que me hace escucharte decir eso. ¿a qué hora sale tu avión?
- A las once, así que voy a colgar para preparar mis cosas.
- ¿Aún no lo has hecho? Te Quiero aquí a las siete eh, se puntual niñita.
- Baboso, no me llames así.
- Pues date prisa.
Sonreí y termine la llamada, hoy era la competencia anual de artes marciales y tenía que apoyar a mi mejor amigo en esto, sólo me tenía a mi así que me apresure a empacar para no llegar tarde al aeropuerto.
La ciudad era cálida y me recordaba a ciudad Satan, la cual no visitaba en años. Suspire y baje del taxi. Me encaminé dentro del auditorio en donde había iniciado ya la competencia. Trate de buscar a Yamcha en el área donde se encontraban los competidores pero no se me permitió el acceso así que le mande un mensaje de texto.
Ya estoy aquí.
Suerte, yo se que lo lograrás.Apenas habían pasado unos segundos y recibí su respuesta.
Estaba preocupado, si no venías te asesinaria cuando te viera.
Gracias por los ánimos.Sonreí y tomé asiento en el lugar que me correspondía a lado de mi otro guardaespaldas y observe atenta las competencias.
******
- Debiste venir, los competidores este año son unas bestias salvajes.
- Dudo mucho que alguno pudiese ganarme - bufo arrogante mi querido amigo Vegeta - Además, no podía cancelar la firma del contrato.
- Lo se, ojalá el próximo año pueda partirte esa cara arrogante que tienes.
- Sigue soñando Nappa, eso nunca pasará.
- ¿Apuestas? - uno de los encargados del torneo tocó mi hombro y me señaló su reloj para que me diera prisa - Tengo que colgar Vegeta, hablamos después.
- Claro, suerte Nappa.
Termino la llamada y me asomo a ver la batalla para ver que tal pelean esos tipos. Son muy buenos, pero no podrán vencerme, el moreno es muy lento y el del pantalón rojo repite mucho los movimientos, será imposible que me ganen.
Me acerco un poco más y entre la gente observo una hermosa cabellera azul, nunca vi un cabello así antes, sólo el de Bulma.
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La Gorda Bulma © (Vegeta Y Bulma)(En Edición)Terminada
Fanfiction*MUNDO ALTERNATIVO* Advertencia de contenido adulto. Gorda y fea. Esa era yo, Bulma Brief, la chica más repugnante en todo Orange School. Obra registrada en Safe Creative. Código de registro: 1711294959729 Licencia: Creative Commons Attribution-Non...