Capitulo 20

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Es una mujer hermosa pero no podría ser Bulma, ella tenía un físico muy distinto. Tal vez si me acerco a ella podría conseguir su número para quedar un día. Me encamino hacía donde ella se encuentra con mucha seguridad y trato de tomar asiento en una de las sillas libres que están a su lado, es raro que esas sillas no estén ocupadas.

**********

- ¿Son buenos verdad? - Menciona un hombre alto, muy fornido y sin cabello que toma asiento en una de las sillas que pague para que nadie ocupará.

- La verdad, es que eso no es nada, hay un chico que es mejor que ellos.

- Tal vez sea yo.

Dice de manera sarcástica y le dirijo la mirada con más atención notando que la ropa que lleva puesta es el uniforme que llevan los demas participantes del torneo. Pongo los ojos en blanco tratando de ignorar lo que ha dicho.

- Me llamo Nappa y ¿cuál es su nombre señorita?

¿Nappa? ¿Será el Nappa que conozco? ¿El amigo de Vegeta?
Me quedé perpleja por un momento y trate de incorporarme como la mujer segura que soy.

- Bulma.

Le dije mi nombre sin más, quería ver cuál sería su reacción, tal vez este hombre no era el mismo que conocía.

- ¿Bulma que? ¿Eres Bulma Brief?

Carajo. Si es el Nappa de mi pasado. Me quedo mirándole con los ojos muy abiertos sin poder creer que estoy frente a él y al parecer él se encuentra igual que yo.

- ¡Nappa! ¿Qué haces aquí? Falta poco para que salgas a pelear, deja de perder el tiempo.

- Dame unos minutos más, necesito...

- No, vamos adentro.

Me miro por última vez y se retiró siguiendo al tipo que había llegado a reprenderlo. ¿Sera posible que él aún tenga contacto con Vegeta? Le ruego a Dios que no sea así.

*********

Era Bulma, por Dios, era ella...
Tengo que decirle a Vegeta, tengo que hacerlo... pero, no debo hacerlo, el ahora es feliz, está a punto de casarse, echaría a perderlo todo si le digo que ella al fin apareció... pero él me odiaría, ha luchado tanto tiempo por encontrarla. -¡Carajo! ¿Qué debo hacer?- Escucho mi móvil sonar y respondo la llamada.

- Vegeta.

- ¿Qué tal va la competencia?

- ¡Super!.- Mierda, no puedo quedarme callado, tengo que decirle que la he visto.- Vegeta tengo que decirte algo...

- Claro, pero antes déjame pedirte un favor, quiero que mañana me acompañes a buscar mi traje para la boda... ¿que dices amigo?

No puedo hacerle esto, no ahora, se lo diré después de que se haga la ceremonia, se que me odiará pero no echaré a perder su vida.

- Claro Vegeta, tomaré mi vuelo está noche para estar ahí a buen tiempo.

- Gracias Nappa, suerte con la competencia, si eres uno de los ganadores podrás enfrentarme en la competencia que se aproxima en ciudad Satán.

- Ya verás que si.

**********

No puedo quedarme aquí más tiempo, Yamcha se molestará mucho cuando no me vea aquí, pero se que en cuanto lo vea mas tarde y le cuente todo él me entenderá.
Me levanto de mi asiento y me dirijo al coche para llegar a mi hotel lo mas pronto posible, entre más tiempo pasé  aquí y vea a Nappa los recuerdos volverán a mi y por ahora no quiero que eso vuelva, me he estado preparando mucho tiempo para volver a mi pasado, pero esto no estaba dentro de mis planes.

Esperé y esperé, pensando en mi vida, pensando en si aún valía la pena tomar venganza, y si, valía más que nada, mi venganza contra Vegeta era mi propósito más grande, por eso es que ahora soy quien soy.
Me he estado haciendo pasar por mi padre todos estos años, para pasar desapercibida ante los ojos del mundo como la legítima dueña de Capsule Corp, cuando hay un contrato de por medio es Yamcha quien hace los tratos por medio de un teléfono y los contratos son enviados con mucha seguridad de dueño a socio o viceversa para que sean firmados, jamás me he presentado a las firmas ni acuerdos de ningún tipo, en las conferencias de prensa mi padre da el aviso de no presentarse ya que su salud se lo impide y Yamcha es quien va, así es como nadie sabe de mi.

Vegeta es ahora dueño de la corporación de su padre y se encuentra dentro de una de las mejores empresas del mundo, pero eso no será por mucho tiempo, hace un par de meses, él quiso hacer un contrato con Capsule Corp para que nosotros le vendieramos lo mejor en tecnología para poder mejorar los autos que vende. Claro que acepte hacer el contrato y en un par de semanas lo haré firmar un contrato por diez años en donde se estipula que quedará estrictamente prohibido dar información acerca de donde compra su empresa la tecnología que ocupará, tiempo exacto para llevarlo a la ruina y cuando se encuentre en la miseria haré que me ruegue para salvar su empresa.

Alguien llama a la puerta de mi habitación haciendome dar un pequeño salto del susto.

- Adelante.- Es Yamcha, se nota muy molesto.-

- Pensé que podía contar con tu apoyo Bulma...

- Yamcha yo...

- Sólo te pedí que estuvieras presente y te fuiste... ¿Es que acaso tus negocios importan más?

- Por supuesto que no Yamcha.

- Pff, que tonto, claro que tus negocios importan más que un simple empleado como yo.

- ¡Basta Yamcha! Tu sabes perfectamente que significas mucho más para mi, y por supuesto que eres importante... eres mi mejor amigo.- Alzó la cabeza y me miro fijamente con un dejo de dolor-.

- Pero yo no quiero ser sólo un amigo.

Carajo. Hace tiempo pude notar que Yamcha sentía algo más por mi, que no todo lo que hacía por ayudarme era sólo por ser una buena amiga, pero él nunca se atrevió a insinuar nada más, hasta hoy.

- Yo... no se que decirte, tu sabes que yo no... no estoy... no estoy preparada para esto...

- Tu sigues enamorada de él.

Dijo esto mientras se quitaba la camisa y tomaba asiento sobre mi cama. ¿Como se atreve él a decirme eso? yo odio con todo mi ser a Vegeta. Me acerqué furiosa y me detuve frente a él para mirarlo ofendida por sus palabras.

- Quiero que te quedé claro una cosa, no hay persona en este mundo que odie más que a Vegeta.

- Mentirosa, sólo dices eso y te haces creer a ti misma que lo odias, pero es sólo un simple disfraz para tratar de ocultar el amor que quedó hace tiempo y aún vive.

- ¡Ya te dije que no! Yo no lo amo, no puedo amar a alguien que me hizo tanto daño, entiende - Tomó mi mano para jalarme fuertemente y caer sobre él.

- Demuestrame que en tu vida no sólo existe él, demuestrame que puedes dejar que alguien más entre a tu corazón.

Su aliento entrecortado me golpeaba la cara, pero no me desagradaba, era dulce y mi reacción me perturbaba. La luz de la luna se reflejaba en su perfecto abdomen y eso lo hacía lucir hermoso, nunca jamás vi a Yamcha con otros ojos pero ahora se veía tan viril y eso me excitaba. Me acerqué a su boca poco a poco hasta chocar mis labios contra los de el, sentí su lengua entrar en mi para rosar suavemente la mía. Yamcha me acaricio el rostro y después se separó de mi dejándome deseosa de su ser.

- No así.- Dijo esto agachando la mirada para después tomar su camisa y salír de mi habitación.

Me quedé perpleja. Hace tanto tiempo que no tengo sexo y estuve a punto de cumplir mis deseos carnales con mi mejor amigo, mejor amigo que me ama, no puedo permitir que esto pase otra vez, no quiero que sufra por mi, no pienso lastimarlo, a él no.

La Gorda Bulma © (Vegeta Y Bulma)(En Edición)TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora