Capítulo 17

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La cocina  es un caos las chicas del servicio comentan la llegada de los tres huéspedes de las hermanas, pero están más entusiasmadas por los dos chicos que han llegado pues nunca habían estado cerca de dos chicos que tuvieran lazos con la realeza y eso para ellas es como un cuento de hadas.

— ¡Vamos niñas! — Ordena la señora Baizen— dejen de soñar despiertas y mejor coloquen la vajilla que no tardan en sentarse todos a comer—Lucy entra en la cocina ante la atenta mirada de todos, pues es la única que prácticamente ha visto muy bien a ambos chicos. La señora Baizen le sonríe para finalmente salir por la puerta acompañada de las otras dos chicas del servicio.

— ¡Lucy! — grita Ana, deteniendo el paso de la chica— ¿Cómo se llaman? –Lucy la mira si comprender— los chicos que llegaron esta tarde.

—Ah… ¿te refieres al prometido de la señorita Allie y su hermano? — comenta mientras se sienta junto a Bill que le sonríe.

— ¿Prometido?

—Si— responde Lucy — el prometido de la señorita Allie se llama Ethan — le dice a la chica y Tom levanta la cabeza y entonces recuerda las palabras de Aldair, cuando le contara que el caballo no podía verlo y que prácticamente ella y el chico no se llevaban bien pero por lo que había visto cuando caminaba con Bill de regreso a las caballerizas se veían felices, incluso Allie sonreía y había un brillo de vida en sus ojos, no parecía no estar enamorada de su novio— el otro chico se llama Dorian—comenta la rubia y Tom sigue mirándola.

—Se lleva mejor con el otro que con el novio— comenta Georg sentándose a la mesa, y todos le miran— ¿Qué, pregúntele a Gustav si no me creen? — Dice mirando al rubio de lentes que no dice nada— vamos viejo, tú los vistes cuando los demás entraron el se fue tras ella.

— ¡Cállate, Georg! —dice Bill al ver como Ana se acerca, al pelinegro no le agrada la chica, por lo poco que le conoce, puede notar que es una chica a la cual le encanta el chisme y eso es algo que él detesta— no hables si no sabes… mira que puedes meterte en problemas— hace un gesto con los ojos señalando a la chica que se ha sentado y el chico mejor decide guardar silencio.

— ¿Lucy? — Llama Ana a la chica, quien se gira a mirarla — ¿Cuál de los dos es el novio?

— ¿Por qué no vas y se lo preguntas tu misma si tanta curiosidad tienes? —Responde, Ana se pone de pie molesta.

—Lo que pasa es que tú te crees intocable, porque la señorita Allie te tiene como su empleada personal— suelta la chica molesta.

—En realidad es porque me agrada— la voz de Allie hace que todos se giren a mirar a la chica que acaba de entrar por la puerta de servicio seguida por un chico, que mira a cada uno de los presentes. —El es Dorian — señala Allie al chico detrás de ella.

—Hola — saluda el chico a todos los ahí presentes.

—Tienes suerte que este de buenas Ana— sonríe Allie—de lo contrario en este mismo momento de corría— advierte, toma la mano de Dorian para salir de la cocina, no sin antes sonreírle a Lucy, quien los mira atentos al igual que el resto.

La chica se ha quedado en silencio y una vez que los dos chicos desaparecen el resto estalla en carcajadas al ver la cara que Ana a puesto.

—Eso te pasa por imprudente— dice Bill mirándola seriamente y la chica sale de la cocina.

—Pobre Ana— dice Gustav negando— creo que es la segunda persona no grata para la señorita Allie.

— ¿Y quién es la primera? — pregunta Georg.

—Fácil — responde el rubio y sonríe mirando a Bill

— ¡Tom! — responden Gustav y Bill en coro, el de trenzas los mira enojados.

—Muy graciosos, par de idiotas— dice levantándose de la mesa.

—Oh vamos viejo… que es la verdad—le dice Gustav riendo

—Me importa muy poco lo que esa niña malcriada opine, en cuanto juntemos el dinero yo me largo de aquí— dice poniéndose de pie para salir de la cocina. Los chicos lo miran salir, el comentario no era para hacerlo enojar, al contrario se imaginaban que Tom saldría con alguna de sus típicas frases, pero en lugar de eso solo hicieron enojar al de trenzas.

— ¿Ahora a ese que le pico? —pregunta Georg y todos se encojen de hombros, Lucy los mira confundida.

—Seguro extraña pelear— comenta Bill— Tom no se irrita con tanta facilidad, el siempre se toma las cosas a broma, pero al parecer hoy  no está de humor.

— ¿Y cómo es  la cosa, aquí dentro Lucy? — pregunta Gustav para cambiar el tema.

—Tranquilo— dice sonriendo— bueno, casi siempre estoy con Allie.

— ¿Allie? — dice los chicos

—Vaya confianzas Lucy— ríe Bill y la chica se sonroja, haciendo que los chicos rían.

That BoyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora