Kim da vueltas por toda la habitación no está dispuesta a volver a Londres y dejar a Tom, necesita hacer algo para que Allie no le obligue a volver, ha descubierto algo que le parece muy interesante su prima está interesada en él, o eso parece se lleva ambas manos hacia las sienes dando un ligero masaje para alejar la jaqueca que le comienza atacar, cuando la puerta de su habitación se abre de golpe, dando paso a un Ethan furioso que la toma de ambos brazos lastimándola, mientras ella gruñe de dolor.
— ¿Quién es el imbécil con el que me engañas? —zarandea a Kim mientras exige una respuesta los ojos de la pelirroja se llenan de lagrimas del dolor pero aun así no deja que estas se escapen, forcejea hasta liberarse del agarré se acaricia ambos brazos los cuales están rojos por el brutal agarre.
—No es de mí, de quien deberías preocuparte — responde con la mirada puesta en sus brazos
— ¿De qué hablas? —cuestiona Ethan intentando tomarla de nuevo para que hable, pero Kim se aleja.
—Con quien me acuesto. ¡No es asunto tuyo!— levanta la mirada y la fija en él — soy libre de hacer lo que quiera, cuando y con quien Yo quiera— recalca cada palabra, Ethan le mira furioso, odia que se esté burlando de él.
—Escúchame bien Kim— la vuelve a sujetar de ambos brazos, pero con menos brutalidad— No soy tu puto juego me entiendes—siente rabia de las palabras de él.
—Mi juego tal vez no pero si de Allie y Dorian—suelta con desdén y sonríe al ver la cara que ha puesto— que en verdad tú también eres de los que cree, entre ello solo hay una pura e inocente amistad.
—Ella no es como TU— sonríe Ethan mientras Kim se pone más furiosa detesta que todos tengan tan idealizada ha Allie, por su dulce rostro y su carácter tan fuerte.
—No claro que no somos iguales— responde volviendo a soltarse del agarre de Ethan para pasar ambos brazos por el cuello del chico, mientras este rodea su cintura y sonríe— yo me acuesto contigo y ella con tu hermano— Ethan furioso de las palabras la empuja haciendo que esta caiga en la cama, Kim se levanta y queda recostada en la cama— dime cariño ¿Qué se siente ser el hazme reír de todo Londres?, primero fue Carter— Ethan aprieta la mandíbula al escuchar ese nombre. Si hay alguien a quien odia además del nuevo amante de Kim es a su querido hermanastro, por ser el consentido y el mejor y por tener el título de Lord, siendo que tenía que pertenecerle a él.
—Escúchame bien — toma a Kim por el mentón — nunca vuelvas a mencionar a Carter—sonríe al ver la furia y la duda de Ethan en sus ojos, sabe que él ha escuchado los rumores, después de todo, todo lo que Allie sabe de caballos fue gracias a su hermanastro, los rumores siempre habían dicho que la castaña y su rubio hermanastro habían sido algo, pero él jamás le tomo importancia, él se había quedado con Allie, pero Dorian era otro asunto sabia de los rumores pero los ignoraba, ahora es algo que le intriga Allie siempre ha sido distante, pero con Dorian es diferente— Piénsalo, Ethan— sonríe haciendo que salga de sus pensamientos— ahora largo de mi habitación — abre la puerta para que se marche.
Ethan abre la puerta la de su habitación sintiendo rabia por el reciente rechazo de la pelirroja, el que la había llevado a Alemania para pasarla bien a expensas de su prometida y su cuñada, pero las cosas no habían resultado así, ahora Kim se estaba revolcando con alguien que no era él y eso lo enfurecía, sabía que Kim era una zorra por muy hija de Condes que fuera, era de cascos ligeros, su madre una mujer que se dejaba dominar por el que dirán decía que si los rumores sobre Kim no fueran ciertos ella sería el partido ideal pero no era así y esa era la razón por la que estaba comprometido con Allie, una chica hermosa, noble eso lo reflejaban sus ojos azules y con carácter, pero aun así con todas y cada una de las dichas y virtudes de Allie, eso no lograba despertar al hombre que había en él, solo Kim lo lograba , para él besar Allie era de lo mas incomodo cada vez que se besaban para él era como hacerlo con un tempano de hielo, que le quemaba, pero no era culpa de ninguno de los dos. Pero la idea de los rumores de su hermano y su prometida comenzaban a molestarle más de la cuenta, sus amigos más cercanos decían que la dichosa amistad era muy extraña, el no era el juego de nadie, Kim se las iba a pagar eso estaba más que claro, pero primero arreglaría el asunto de Dorian y Allie.
Kim sonríe al recordar la cara de Ethan cuando le echo en cara que Allie y Dorian tenían algo más que una supuesta amistada, con eso se vengaría un rato de la bofetada que le diera y de haberla humillado frente a Tom y a los demás durante el desayuno, así como también se libraría un rato del fastidioso de Ethan. Ahora era el turno de Maggie molestar a Allie, Kim abre la puerta del despacho, encontrando a Maggie riendo con Bill.
—No sabes llamar— Maggie mira molesta a la pelirroja.
—Tenemos que hablar— responde Kim importándole poco las palabras dichas anteriormente por Maggie e ignorando a Bill que se pone de pie para marcharse de la habitación y así darle privacidad a ambas chicas.
—Estoy ocupada, vuelve después— toma a Bill de la mano para que este no se marche.
—Hablaremos ahora Margaret — advierte Kim en tono autoritario.
—Bill, me disculpas—hace una mueca—al parecer Kimberley, no tiene modales— Bill asiente dedicándole una sonrisa a Maggie.
—Más tarde hablamos— dice Bill sonriendo para salir del despacho,
Una vez la puerta cerrada Maggie toma asiento de nuevo y Kim se sienta frente a ella.
— ¿De qué quieres hablar? y mas te vale que sea algo sumamente importante como para que hayas interrumpido mi conversación con Bill.
—No pensé que te relacionaras tanto con el servicio domestico— sonríe con sarcasmo— pero veo que tienes los mismos gustos que tu madre— sonríe con maldad, Maggie levanta una ceja.
—No tengo por qué darte explicaciones de vida privada— la mira molesta — así que si has venido a eso márchate
—No he venido a eso…. Allie me ha echado— dice seria y Maggie estalla en carcajadas.
—Algo le habrás hecho— dice controlando su risa, Kim muere de rabia odia que la gente se burle de ella— y que quieres que yo haga si mi hermana te ha corrido no puedo hacer nada para impedirlo, la mitad del lugar es de ella.
—Lose así como también es tuya la otra mitad— interrumpe— la única forma de que Allie no me corra es convertirme en tu invitada.
— ¿Y qué te hace creer que yo te hare tal invitación? — pregunta curiosa.
—Oh muy fácil querida prima — sonríe con maldad— porque me lo debes— Maggie mira a Kim sin entender, mientras la pelirroja llena dos vasos con whisky, le tiende uno vaso y lo rechaza—acéptalo lo vas a necesitar, después de que te cuente un pequeño secreto que puede hacer que tu querida hermana te odie más de lo que me odia a MI.
