Primer Curso (Harry Potter)

7. Primera clase de vuelo

-NARRA EMILY-

Estaba terminando mi trabajo cuando la profesora nos dice que fuéramos a nuestra siguiente clase, pociones.

Salí de aula de transformaciones con Hermione.

-¡Emily! ¡Emily!- gritaron mi nombre.

Al girarme me di cuenta que era Harry.

-Hola Harry.- sonreí.

-Muchas gracias, sino fuera por ti no hubiéramos llegada a la clase.

-No tienes nada que agradecer.- dije y caminamos todos juntos.

Ron estaba con Harry, así que estaban ellos dos y Hermione, nos dirigimos juntos al aula de pociones.

Todo allí era oscuro y un poco escalofriante.

Habían unas largas mesas con calderos encima de ellas. Nos sentamos a esperar que el profesor llegara.

A mi lado derecho estaba Harry y al izquierdo Hermione. Estaba hablando con ellos tranquilamente cuando la puerta del aula se abrió fuertemente haciendo que todos nos giráramos y quedáramos en silencio.

Me dijeron que el profesor era Snape, que él es muy misterioso y daba mucho miedo. Tienen toda la razón.

El profesor entró y mientras caminaba hacia al frente del aula comenzó a hablar.

-Nadie agitará sus varitas ni hará encantamientos tontos en esta clase.- dijo serio y se paró frente a todos nosotros.-Por lo tanto, supongo que muchos de ustedes no apreciarán el valor que tiene la ciencia y el arte de la creación de pociones. Les enseñaré muchas cosas, ejemplo, hasta como detener la muerte.

Pude notar como Snape no le quitaba los ojos de encima a Harry. Cuando miré a Harry vi que él estaba escribiendo algo.

-Aunque quizás, muchos de ustedes hagan venido a Hogwarts con la confianza de saberlo todo y no-poner-atención.- siguió hablando y yo le di con mi hombro a Harry para que viera hacia el frente y lo hizo.-Señor Potter nuestra nueva celebridad. ¿Qué obtendría si agrego raíces de asfódelo a una infusión de ajenjo?- dijo y yo rápido levanté mi mano.

Yo sabía mucho sobre pociones.

El profesor me vio pero me ignoró. Harry me miraba apenado.

-No lo sé, Señor- dijo Harry haciendo una mueca y bajé mi mano.

-¿No lo sabe?, entonces dígame exactamente ¿En dónde iría si tuviera que buscar un bezoar?

Hermione alzó la mano esta vez. Yo lo sabía, pero el profesor sólo quería que Harry la pasara mal.

Harry no contestó y el profesor siguió haciéndole preguntas. Harry no contestó ninguna.

-Es claro que la fama no lo es todo, ¿O si señor Potter?

Podía ver la sonrisa de Malfoy desde mi asiento. El profesor no debió hacerle eso a Harry.

Y pasaron las clases hasta la hora de almuerzo.  Nos dirigimos al gran comedor y nos sentamos juntos.

Estaba muy entretenida en mi libro hasta que escucho una pequeña explosión.  Alzó la vista y veo a Seamus todo sucio con polvo y había humo en el aire.

Todos se rieron incluyéndome, excepto Hermione, ella está un poco fría y rara últimamente. No sé porque.

Se empezaron a escuchar chillidos de lechuza, miré hacia arriba y habían muchas lechuzas con paquetes y cartas.

-El correo llegó.- canturreo Ron.

Empezaron a caer los paquetes y Clarisse me dejó uno.

En él había una hermosa pulsera con un corazón. Abrí el corazón y había una foto mía cuando bebé con mis padres.