SEIS LÁGRIMAS DE ACERO

Capitulo 16: Tatuaje

Hoy he decidido subir el capítulo un domingo (no porq se me haya olvidado ni nada XD) así q disfrutar.
J.S

Nunca me creí que las palabras de una persona te cambian la manera de verla. Que como pensabas que era o como se comportaba ya era una razón para creer que era así. Que algunas personas cargan con un dolor más grande que ellos. Que hay pequeños demonios en tu mente que hacen historias paralelas a lo que es. Malditos prejuicios que adornan la mente de una persona.

***
Hace ya una semana que ocurrió lo del incidente del viaje. Él padre de Max recibió los mensajes que le había enviado su hijo y nos pudieron recoger junto con una grúa. Todo parecía ir bien, y Coco estaba más tranquila.
Pero ya no puedo evitar mirar a Coco con otros ojos. Ya no es la niña pija que siempre se arrastra por la atención de los demás. Ahora veo a una chica normal que se busca la vida como puede y intenta buscar su sitio en este mundo. Como todos intentamos hacer. Pero hay una duda que todavía no he podido resolver.

-Coco se que no quieres hablar de ello, pero... el chico que traías a las reuniones de padres... ¿Quien es? y también ese chihuahua que tienes- me atreví a preguntar.

Ella me ojeo de arriba abajo. Haciéndome un escáner completo.

-Ese chico es un vagabundo que le chantajee con unas cervezas para que se hiciera pasar por mi padre. La ropa cara y asearse hace sus milagros. Y el chihuahua... lo robe, era de una casa de ricos que había en Dakota- contesto como si fuera la cosa más normal de este mundo.

Bady que iba andando delante nuestra, se paró y se giró impactado. Menos mal que no era el único con cara de póker. Ha Emma y a Veronica se les escapó una pequeña risa. Pero Max estaba raro. No sé que le pasaba. Pero desde lo que pasó en el viaje lo veo más distraído y distante.

-Oye Max ¿Estas bien?-

Él frunció el ceño y me miró como si le estuviera hablando en otro idioma.

-Eh... si, estoy bien- contestó después de unos largos segundos de espera.

Eso para mí, no es nada convincente.

Se estaba alejando cada vez más de nosotros. No le hemos visto casi el pelo en esta semana y No sabemos porque.

-¡MAX!, hay una fiesta en mi casa esta noche deberías venir va a ser brutal, hay unas chicas para morirse- dijo un chico que se acercaba a Max dandole un golpe en el hombro muy sonriente.

-No sé si ir...- confesó dudoso.

-Venga tío, no te lo puedes perder, va a molar que te cagas, además que vengan tus amigos también-

Estaba empezando a pensar que Tío era El Segundo nombre de Max, porque no dejaba de repetirlo una y otra vez.

-Tú, ¿como te llamas?- comentó Coco con voz cortante.

El arqueo las cejas sorprendido. Por la presencia de Coco. Podía notar un poco de duda y miedo en sus ojos.

-Rick Simpson...-

Coco se recolocó el mechón rubio que se le había escapado detrás de la oreja. Abrió levemente sus ojos azules. Me agarro de la manga y me llevo lejos de grupo.

-¿Pero que haces?-

-Es uno de los chicos más populares y ricos de todo el instituto, es uno de los cabecillas de la SUT, tenemos que ir a su casa, bueno, a su mansión, sus fiestas son brutales y no suele invitar a gente como nosotros-