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POV Omnisciente

Para estar solos, el pequeño moreno y el híbrido fueron al departamento del primero en ser nombrado sólo para no ir a la fiesta.

-Quieres hablar de lo que pasó?.-Preguntó Jaime mientras le hacía un café al pequeño moreno, refiriéndose a la situación que hizo que este tuviera una crisis emocional.

-No por ahora.-Respondió Nicolás sinceramente, notando como el híbrido terminaba su café y se lo pasaba, causando que lo tomara.-Gracias Jaime.

-No es nada, cariño.-Dijo el enojón, observándolo mientras notaba que el pequeño moreno se había levantado del sillón para que él se acomodara mejor, causando que lo hiciera para que después el moreno se colocara al lado de él, tomando un poco el café que le había preparado su "amigo".

-Pero para que no pienses mal de mí o algo así, no estoy con Fernando ya.-Dijo el moreno, con una pausa.-Al menos con lo que le hice, no.

-Estoy interesado ahora pero no quiero hablar de ese weón.-Dijo el híbrido, casi amargamente.-No ahora que estoy contigo.

El moreno lo observó por unos segundos y se acurrucó un poco más contra él.

-Creí que Fernando era bueno.-Dijo el pequeño moreno en un susurro, no queriendo mirar a los ojos a su híbrido.-Pero era el peor de todos.

-Bien, ahora necesito saber qué pasó.-Dijo el señor Navarro, tomándose un momento para luego seguir hablando.-Para ir a sacarle la chucha con razón.

-Me contó todo lo que hizo y lo que te hizo a ti.-Murmuró el pequeño vampiro, provocando que el híbrido se tensara.-Y como él y la manada me manipularon para alejarme de ti porque eras un peligro para ellos, no para mí.

-Ellos hicieron que te alejaras de mí?.-Preguntó Jaime, no pudiendo creerlo. Claramente Manuel no le había dicho eso.-Nico, los voy a matar.

-Le rompí el cuello a Fernando.-Dijo Nicolás, siendo sincero con él.-Y le rompí un par de costillas a Nick y lo dejé inconsciente. Le dije a toda la manada que si se volvían a acercar a nosotros, los iba a matar uno por uno.

El híbrido lo miró, bastante sorprendido por aquello.

-Tengo que decir que estoy orgulloso de ti.-Dijo el enojón, notando como el pequeño moreno lo miraba con tristeza.-Qué pasa, amor?

-Fernando mató a tu amigo.-Dijo el moreno, tomándose un momento para luego seguir hablando.-E hizo que me alejara de ti. Tú no te mereces nada de esto, no eres un monstruo.

-Cariño...

-No te atrevas a discutir sobre eso, porque es la verdad, no lo eres.-Dijo el pequeño moreno, negándose completamente a lo que el enojón iba a decir. Este último se quedó callado mientras veía como el moreno se tomaba rápidamente el café que su híbrido le había hecho para después dejar el café en la mesa que estaba casi al lado suyo.

El pequeño moreno miró al híbrido y este lo estaba haciendo hace mucho ya.

-Me dijo que tú le prometiste a mis padres que me protegerías.-Dijo Nicolás, por fin hablando, provocando que el señor Navarro se colocara un poco pálido.

-No lo hice y lo siento.-Dijo Jaime, en un susurro, casi alejándose del pequeño moreno si es que este no lo hubiera detenido.

-Jaime, no te culpo.-Dijo el moreno, con una pausa.-Yo hubiera reaccionado peor si mi amigo... ya sabes. Hiciste lo que pudiste.

-Pude quedarme y cuidarte.-Dijo el enojón, tomándose un momento para luego seguir hablando.-Pude haber evitado que la manada de Nick y que Fernando se hubieran acercado a ti.

-Jaime, no pensemos en lo que pudo haber pasado.-Dijo el pequeño moreno, no culpando en algún momento a su híbrido.-No ahora.

-Está bien.-Dijo el híbrido, admirándolo por varios segundos para luego darle un ligero beso en los labios, provocando que el moreno tuviera un ligero brillo en sus ojos.

El moreno lo observó por varios segundos para después besarlo, haciendo que el enojón le respondiera el gesto de amor de inmediato.

Estuvieron así por varios minutos cuando se separaron por el sonido de la puerta, causando que los dos gruñeran cuando estaban bastante bien en ese momento.

El pequeño vampiro y el híbrido se miraron.

-Debe ser Fernando o algo así.-Dijo Nicolás, sabiendo que debía ser eso.-No quiero que se quede mucho tiempo, y lo va a hacer si te ve aquí, así que crees que...

El híbrido asintió y le dio un pequeño beso rápido en los labios para después ir a la habitación del moreno, causando que este sonriera un poco y que se levantara para luego ir a abrir la puerta.

Apenas lo hizo, su ex novio entró de inmediato antes de que el pequeño moreno intentara cerrarle la puerta en la cara.

-Nico, de verdad no estoy enojado por lo que hiciste pero debes entender que no podía decirte todo eso.-Dijo Fernando, hablando rápidamente para que el moreno no le sacara la chucha como antes.-Sí quieres puedes ser amigo de Jaime pero no me dejes.

-No voy a seguir contigo, Fernando, creo que lo dejé muy claro cuando te rompí el cuello.-Dijo Nicolás, tomándose un momento para luego seguir hablando.-Y sabes qué? Yo no quiero ser sólo amigo de Jaime.

-De qué estás hablando, Nicolás?.-Preguntó el ex novio del recién nombrado, teniendo el ceño fruncido mientras lo miraba fijamente a los ojos.

-Quiero a Jaime y no exactamente como amigo.-Respondió el moreno, teniendo una ligera sonrisa en sus labios mientras veía como su ex pololo se colocaba furioso.

No pasaron ni cinco segundos cuando el pequeño moreno fue acorralado contra su pared fuertemente, pero no le dio el gusto de quejarse.

-Me abandonas por ese weón?!.-Preguntó Fernando, no soltándolo en algún momento mientras lo asfixiaba, causando que el pequeño vampiro intentara soltarse pero no podía.-No lo vas a hacer, Nicolás...

No siguió hablando cuando alguien lo empujó lejos del moreno, causando que cayera al piso.

-Lo vuelves a tocar y te haré sufrir de maneras inimaginables.-Gruñó Jaime mientras tenía sus ojos dorados en ese momento. Lo tomó por la ropa y lo estampó contra la pared, levantándolo un poco.-Te vuelves a acercar a mi novio y te mataré por todo lo que has hecho, entiendes?

Fernando asintió como pudo y el enojón lo soltó a los pocos segundos, provocando que el ex novio del moreno se fuera de inmediato.

El híbrido ahora se concentró en su pequeño vampiro y lo ayudó a levantarse. Observó la marca de la mano de Fernando en el cuello de su novio, causando que gruñera un poco y que hiciera que esta desapareciera con sólo un chasquido.

-Son muchas emociones por hoy.-Dijo Jaime en un tono bajo, queriendo que el pequeño moreno se relajara.-Qué tal si te baño y luego vamos a dormir, cariño?

Todo esto lo dijo delicadamente, tal como si el pequeño moreno fuera un niño, causando que este asintiera y que el enojón lo tomara de la mano para después ir a la habitación del pequeño moreno.

You (Jainico). Donde viven las historias. Descúbrelo ahora