#6 "Savior"

811 50 4
                                    

Jade

Ha pasado exactamente una semana desde ese mágico momento en el que por fin logré cantar en público y ese hubiese contado como el día perfecto de no haber sido porque perdí mi plan de escape, mi madre me castigó porque según ella demoré mucho, pero papá dijo que llegara con todo eso, nunca dio límite de tiempo.

Ese día me quitó el móvil, además me prohibió salir de la casa y aunque quisiera hacerlo no podría pues me dejó literalmente encerrada dentro de la casa, fue una semana horrible, pues una vez más me golpeó mientras mi padre estaba sumido en el alcohol.

Hoy finalmente he sido liberada y estoy rogando desaparecer de aquí, rápidamente me cambio de ropa y abandono mi cárcel lo más rápido que puedo para ir a casa de Perrie.

—¡Poopey! –chilla al abrir la puerta cuando finalmente he llegado a su casa y corre a abrazarme—. Estaba muy preocupada, no contestabas tu teléfono ni mis emails y...–la separo de mí y veo sus ojos al borde de las lágrimas.

—Pezz, estoy bien –la envuelvo en mis brazos para tranquilizarla—. Ya estoy aquí.

—No puedes seguir viviendo allí –ahora está histérica—. No puedes seguir siendo maltratada de esa forma.

—No tengo de otra, Perrie –me encojo de hombros—. Son mis padres.

—Podrías vivir conmigo –dice en un tono que identifico como súplica.

—No, adoro a tus padres pero no quiero ser una carga.

—No hablo de eso –me toma de la mano y me lleva al interior de su casa para luego arrastrarme escaleras arriba e introducirnos en su habitación—. Mi padres me compraron un apartamento y es lo suficientemente grande para las dos.

—¿Dices que abandone mi casa? –nos sentamos en su cama—. ¿Cómo podría hacer eso?

—Jade, piénsalo –me toma de las manos—. Se acabarían los maltratos y que tu mamá te golpee, ya no soporto verte con esos moretones en los brazos y espalda.

—No creí que se notaran –hago una mueca e intento cubrir mi cuerpo.

—Soy tu mejor amiga, no tengo que verlos para saber que tu espalda tiene hematomas –me mira seria y sigo sin entender cómo ella sabe de mis moretones en la espalda—. Cada vez que te abrazo te estremeces y sé que es por el dolor.

—No es cierto, solo me da cosquillas –miento.

—¡Jade, ya basta! –me regaña—. Deja de hacerte esto, si no lo vas a hacer por ti entonces hazlo por mí –aparto mi mirada de ella—. O mejor aún...Hazlo por Harry –sonríe ampliamente.

—¿Quién es Harry?

—El chico de los ojos verdes –canturrea y no puedo evitar sonrojarme.

¿Qué tiene que ver él en todo esto?

—Perrie, por favor –me río—. Cómo si a él llegara a importarle lo que sucede conmigo.

—Eso no lo sabes –sonríe y se levanta de la cama de golpe—. Es más, vamos a ir a verlo.

—¡¿Qué?! –abro mis ojos tanto como es posible—. No quiero hacerlo, él no me importa.

sweet creature ; jarry stirlwall ✔✔ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora