CAP 4/ un dulce aroma inundó la oficina

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Doble cap hoy... 

La mañana pasó muy rápido, estaba terminando una conferencia online cuando mi secretaria me anunció que ya había llegado la señora Castillo. Luego de unos minutos la hice pasar, escuche la puerta sonar y mi secretaria le dijo que podía pasar.

— buenos dias— escuche una dulce voz.

— buenos días, tome asiento.— dije con los ojos aun en la computador.

— gracias.— de pronto un dulce aroma inundó la oficina. Gire hacia ella y pude ver que es una joven muy atractiva, de piel morena y ojos claros, las facciones de su rostro eran perfectas. Trate de obviar todo eso portarme profesional.

— Señora Castillo, mucho gusto. Soy Tomás Mejías abogado de familia.— le extendí mi mano.

— Victoria Castillo. gracias por atenderme— dijo para tomar mi mano y pueden sentir que estaba un poco nerviosa.

— tranquila. Estuve leyendo los documentos.— ella asintió. — quiero escuchar su versión de los hechos.

— ok...— tomó aire para continuar.— Mi hermano y su esposa murieron hace 3 años en un accidente de tránsito, durante los primeros días yo estuve quedan me con las niñas mientras se definió que sería de ellas, los trabajadores sociales estaban buscando que sus abuelos se quedan con ellas pero luego de unas semanas ellos se negaron, ni siquiera aparecieron el el funeral de mi cuñada, para los trabajadores sociales era más conveniente para las niñas estar con una parejas que con una joven soltera. En estos tres años nunca las han llamado ni escrito ni nada, solo hasta ayer que me llegó la demanda.

— ¿crees que tienen alguna razón?— cuestione.

— sí, mis hermano dejó inversiones y un seguro de vida a nombre de las niñas, el cual será administrado por lo persona que tenga las custodia legal de las niñas.

—¿crees que es por el dinero?

— si, no veo otra razón. Ellos han sido los peores padres del mundo, y de vez en cuando llamaban a mi cuñada para pedirle dinero.

— vamos a ver como surgen las cosas en la audiencia. Tienes muchas cosas a tu favor. La convivencia con las niñas, tienes un buen trabajo, por lo visto no necesitas el dinero de las niñas para vivir.

— si, gracias a Dios me va muy bien, ese dinero es usado para los estudios de las gemelas.

— excelente, debes anexar todas las facturas y estados financieros en la carpeta que llevaremos mañana.— ¿llevaremos? me estoy comprometiendo a ir con ella. No se si pueda.

— pensé que le asignaría mi caso a un abogado de su bufete.— dijo sorprendida.

— sacaré el tiempo para ayudarla, por su amistad con mi hermano.

— muchas gracias.

— de nada, esta es mi tarjeta.— le extendí una.— puede llamarme cuando lo necesite.

— gracias... — dijo para colocarse de pie y pude ver que es una joven con un cuerpo muy bonito. Ya Tomas!

— hasta luego.— me coloque de pie y le extendí la mano. Fue allí donde sentí una corriente entre nosotros.

Cuando salió de la oficina no pude dejar de pensar en ella, de verdad era una mujer muy bella, en su forma de hablar se le notaba lo inteligente y educada que era. Luego de un atarde larga de reuniones salí hacia mi casa tratando de despejar un poco mi mente de tanto trabajo.

Derecho y Amor serie Hermanos Mejias # 3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora