Anastasia
El olor a hospital inunda mis fosas nasales, Gail está recostada a un lado de mi con la cabeza gacha. Recuerdo todo y siento unas terribles ganas de vomitar. Ver el odio en los ojos del Señor Grey y ver el rostro de decepción de la Señora Grey hacen que una opresión en mi pecho se instale y no quiera irse.
Miro un reloj a un costado de la habitación y marcan las tres de la mañana. Conociendo a Gail debió haber llamado a Taylor y Christian debe venir volando hasta Seattle. Ese pensamiento me descontrola, nunca pude hablar con Christian sobre lo que dijo Susannah y ahora mismo no me apetece hablar con él.
Muevo a Gail y ella se sobresalta.
-¿Estás bien Ana? ¿Cómo te sientes?
-Estoy bien Gail. Llevo mucho tiempo dormida.
-Oh no, es normal. Recuerda que tus horas de sueño han sido pocas en los últimos días. La Señorita Kate y el Señor Elliot están fuera con tu padre y Emily, quieren verte.
-Diles que pasen, me siento bien Gail. Uhm... ¿Los Señores Grey?
-Están ahí fuera Ana. La Señora Grey actuó rápido cuando caíste al sillón cosa que fue una suerte. El Señor Grey se quedó a un lado.
-No quiero verles Gail, me han hecho mucho daño...
-No lo harás sino quieres, buscaré a los demás.
Minutos después, papá, mamá, Kate y Elliot entran a la habitación seguidos de Gail.
-Nos asustamos mucho Annie, Em y yo íbamos saliendo del teatro cuando Gail llamó al teléfono de Em. ¿Estás bien?
-Lo estoy papá, estoy bien.
-Nos dimos un susto de muerte Ana. Ahora te vigilaremos más, comerás y dormirás lo correspondiente.
-Vale. Vale.
-Te dejamos descansar cariño pero nos quedaremos aquí, no te dejaremos.
Despierto por un olor característico que no había sentido desde hace algunos días. Christian.
Abro los ojos y está mirándome. Susurra un hola y devuelvo el saludo. Miro a la habitación y solo estamos él y yo. Genial. Emily entra con un vaso térmico con un dibujo de café en él y siento unas ganas de tomar un sorbo. Mi estómago ruge. Demonios, tengo hambre.
Emily me da un pequeño sermón de que comeré más cuando vayamos a casa. Esta vez no regresaré al Escala, mi tiempo ahí terminó en el momento en que sentí que ya no era mi hogar, seis meses atrás.
Mi desayuno llega y no es lo que esperaba pero sacia un poco mi hambre. Hago una nota mental en pedirle a Gail que me traiga algo de comer.
Espero pacientemente a que la Doctora llegue a hacerme nuevas pruebas. ¿Qué pruebas? ¿Por qué?
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Misteriosa
FanfictionAnastasia Steele es la dueña de la pequeña y vieja Editorial que su madre le dejó al morir y que mantiene a ella y a su padre. Dicha Editorial tiene inmensas deudas y necesita saldarlas todas, teniendo que buscar a una empresa que esté dispuesta a a...