2-. Recuerdos.

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Aquí estás, Wayland—Astrid molestó a Jace cruzándose de brazos frente a él—. ¿Te estás escondiendo de mí?

No podría esconderme de alguien tan hermosa—Le guiñó un ojo el rubio mientras guardaba su estela—. ¿Pasa algo?

Habían transcurrido exactamente siete años desde que Astrid Frost estaba en el Instituto al cuidado de Maryse y Robert Lightwood, siete años desde que su padre y hermano murieron en un terrible incendio de causas desconocidas y siete años desde que Jace la cuidaba como si fuese lo más importante en su vida. Aunque, para el rubio, en ese entonces sí era así, Astrid era lo más importante para él, al igual que su seguridad y bienestar. La adoraba más que a nada.

Poco sabían ellos de que ése mismo año las cosas cambiarían para los dos chicos enamorados.

No, sólo quería saber si entrenaremos hoyPreguntó la castaña apoyándose en el marco de la puerta.

Claro que sí, pero Alec está extraño últimamente.

Claro que estaba extraño. Acababa de enterarse que su otra "hermana" también estaba enamorada de Jace y que el rubio lo estaba de ella. ¿Quién no estaría extraño si descubriera éso? Astrid lo sabía, el mismo Alec se lo había confirmado y no había sido una conversación agradable ni grata, todo lo contrario. Casi habían terminado en una gran pelea porque el de ojos claros no quería admitir la verdad, que era bastante obvia para todos, menos para Jace.

Uh... hablaré con él—Sonrió a medias la castaña—. ¿Nos vemos luego, teñido?

Es natural, Frost—Rodó los ojos un sonriente rubio—. ¿No me darás un beso?

¿Por qué siempre debo dártelos yo?—Se rió la chica cruzándose de brazos—. Dame uno tú, Wayland.

Jace se acercó a Astrid con lentitud, tomó su mejilla suavemente con la palma de su mano y la besó tan delicadamente que pensó que era más frágil que el cristal. Sus ojos se habían cerrado inmediatamente al sentir el contacto del rubio, un suspiro se escapó de sus rosados labios y los nervios se apoderaron de su estómago. Aquella sensación era única y le gustaba sentirla junto a Jace, porque él expresaba lo mismo sobre ella.

Sabes que siempre estaremos juntos ¿Verdad?—Susurró el rubio sobre los labios de la castaña.

Por siempre y para siempre—Confirmó la chica sonriendo sonrojada.

~*~

¿Quién es ella?—Preguntó Astrid observando a la pelirroja frente a ella que yacía inconsciente.

Se llama Clary Fray—Jace indicó cruzándose de brazos—. Una cazadora de Sombras, como nosotros.

No lo sabemos—Alec fulminó a su parabatai con la mirada—. Es una mundana con suerte.

No es una mundana, una runa habría acabado con ella de ser así—Defendió Jace a la chica frunciendo el ceño.

—¿Cuál es tú interés en ella, Jace?—Alzó una ceja Astrid observando a su "novio".

No tengo ningún interés, Ast—Rodó los ojos el rubio—. Creo que debemos ayudarla, eso es todo. Es lo que hacemos, ¿no?

Cross Roads [Percy Jackson].Donde viven las historias. Descúbrelo ahora