— ¿Qué es eso? — Preguntó Astrid fingiendo asombro a la pequeña infante que movía el libro frente a ella.
— Definitivamente puedo acostumbrarme a esto — Le dijo Percy observándolas desde el umbral de la puerta.
La llegada de Colette a las vidas de Percy y Astrid había sido totalmente diferente a lo que pensaban y lo que todos comentaban. A veces no dormían mucho, no por culpa de los monstruos, sino por la niña que no paraba de llorar o porque no quería dormir, otras veces tenían pánico de que saliera del campamento mientras jugaban a la escondida entre gateos o se la pasaban a sus amigos.
Criar un niño no era lo más fácil del mundo, Percy había creído que después se vencer monstruos y dioses no habría nada peor, ni más difícil, pero cuando veía a Colette llorar con desespero, no sabía qué hacer y a veces solo quería llorar con ella hasta que ambos no pudiesen más por el cansancio.
También había aprendido que era un padre celoso. Demasiado celoso.
Odiaba cuando Colette reía en los brazos de Jace, Nico, Leo, Alec o Jason. No los quería ni cerca de su hija y mucho menos a otros niños que pudiesen jugar con ella o distanciarla de su lado. No quería pensar en lo que ocurriría cuando creciera y comenzara a salir con chicos, no lo soportaría, de eso estaba seguro.
Se encontraban en la ciudad para saludar a todos los que los querían, partiendo en el instituto, luego a la casa de Greg para ver a Wade, Summer y su padre, y finalmente acabaron en la casa de Paul y Sally. Tenían que dar el anuncio de su compromiso, aunque, no tenían fecha próxima, ya no consideraban un apuro casarse, además, que Colette les consumía tanto tiempo que planear una boda no estaba en su lista.
— No quiero que crezca — Le dijo Astrid levantándose del suelo al ver que Colette seguía con el libro entretenida moviendolo de arriba abajo.
— Yo tampoco, y pareciera que lo hace muy rápido — Le contestó Percy viendo como Astrid acomodaba las cosas en la mesa —. No estoy preparado para la etapa de novios.
— ¿Crees que no me he dado cuenta? — Se burló ella sin mirarlo. Percy sonrió tontamente.
ESTÁS LEYENDO
Cross Roads [Percy Jackson].
FanficPercy Jackson siempre creyó que ser semidiós era lo único extraño, y de cierta forma "mágico", que había en el mundo... Bueno, hasta que conoció a los Cazadores de Sombras. ¿Qué pasaría si todas las misiones que han hecho los semidioses trajeran rep...