High School DxD - El Verdadero Sekiryuutei [La Poderosa Fracción de los Humanos]

Capítulo 17: Re-inicio

—Ise... resiste un poco... nosotras te sacaremos de ahí.

—No te preocupes Ise... confía en nosotras.

Rias y Luz me decían eso con plenas sonrisas en sus rostros, estaban convencidas en qué ganarían contra los gladiadores antes de mi ejecución... no lo entiendo...

[Días atrás]

Lentamente, mientras me revolcaba entre las estrechas sábanas que habían sido invadidas por todas las chicas del grupo gremory después del rescate de mis hijos, pude sentir una especie de calor en mi pecho.

¿Preocupación? seguramente era algo parecido, pues sentía una ligera sensación que me impedía respirar.

Poco a poco, logrando que nadie se despertara, me levanté de la cama y camine hacía una espejo.

Mi pecho brillaba con un incandescente color dorado era un círculo justo en el centro de mi pecho, se lo veía extraño y al mismo tiempo me provocaba curiosidad, sin darme cuenta, este se fue extendiendo y formando tatuajes en mi pecho, parecía una especia de araña creada con tatuajes que brillaban.

Y luego todo terminó, como sí no hubiera pasado nada, esas marcas desaparecieron como sí nunca hubieran estado ahí.

—¿Todo bien?

Una dulce voz me llamó desde atrás, era Rias, ella estaba completamente desnuda, yo la contemplé todo lo que pude, aunque ya tenía en mi cabeza varias formas de su figura descubierta, siempre era una maravilla para mis ojos él versa siempre así.

—Si los ojos tuvieran boca.... seguramente yo ya no estaría aquí... jajajaja

—Y seguramente yo estaría muerto...

Lentamente me acerque y la bese, ah, hace tiempo que quería sentir el sabor de sus dulces labios, pero volviendo a lo que ella me preguntó inicialmente, pues simplemente le dice que no sucedía nada.

Pensando en lo afortunado que soy ahora, pensaba que nunca podría disfrutar de está misión, pues al terminar de besar a Rias, y observar nuestro alrededor, ahí en nuestra cama estaban todas y cada una de las chicas con sus hermosas y eorticas figuras expuestas.

El festín de pechos y pezones era escandaloso, los culos ambien estaban bien, claro, no puedo no evitar verlo y desear tocarlos, soy yo después de todo.

—Ara... siempre eres así... deberías por lo menos evitar babear de esa forma al vernos a todas desnudas.

No podía evitarlo, está escena era sumamente conmovedora, su fuera de día ya me hubiera lanzado sobre esa cama y ya hubiera armado todo un escándalo entre ellas, bueno no lo ahora ahora porque recién acabamos de casarnos.

—¿De verdad Yami está embarazada?

Yo pregunto muy preocupado, todas las chicas me vieron con ojos indeseables, hasta mis piezas me dijeron repugnante ¡Yo no hice nada! estoy asustado también, quería saber quién fue el bastardo que le hizo esa a mi ¡Yami!

Bueno, decidi irme con rias al comedor y servirnos algo, de paso pasee por las recamaras de todos y verifique que nadie estuviera en algún problema, para mi suerte y para el bien del resto, todo seguía en orden.

Y por un instante, logre escucha qué Ddraig me llamaba, claramente parecía alterado y sin pensarlo dos veces grite su nombre para que hablara más alto, pues parecía como sí estuviera siendo opacado por alguien.

A mi alboroto, Rias se alarmó y ensegida, Chrisa también intervino e hizo que Ddraig logrará aclarar su voz.

—¿Sucede algo? ¿Por qué no hablas más alto Ddraig?