No me dejes caer (Gate to hell #1)

Capítulo 7: Plan para la Vendetta (Maratón 2/?)

Zophiel

Vale, hoy no es mi día. Primero, me despierto pronto y no encuentro a Gael por ningún sitio. Según me dice que está en el trabajo. ¡Y una mierda! Pero en fin, no es que sea una maldita celosa irreprimibl... ¡¿DÓNDE PUÑETAS ESTÁ?! Así que no estoy de mucho humor, lo único que me apetece es acurrucarme junto a Hada y dormir un rato.

El caso es que entro en la casa y el imbécil de mi hermano está viendo una mierda de lucha (sí, se nota cuándo estoy de mal humor, ¿No?). Le gruño algo, pero no sé qué, hasta ese punto estoy ida, cuando entro en la habitación... para oírlo.

-¿No te has dado cuenta de que eres muy poca cosa para él?- pregunta Ellie, con las manos en las caderas, amenazante. Hada está sentada y aprieta con sus manitas las sábanas sin poderlo evitar. Lucha por no llorar, lo noto en su mirada, en su entreceño fruncido, en sus gestos. Y yo voy a matar a una zorra. Me lanzo contra ella y mi vena “Sel” entra en acción. Hada grita, pero no de sorpresa, sino de dolor. Ha intentado levantarse de la cama para quitarme de encima de esa retrasada, pero es mi hermano quien lo consigue al fin.

-Z-z-... ZOP¡¿Qué cojones haces?!

-¡NO! ¡¿Qué cojones hace eso aquí?!- digo el eso con todo mi odio, rabia y asco. Con todo lo que puedo juntas y quiero escupirla por hablarle así a MI Hada.

-¿ESO? ¡¿Estás loca o qué?! ¡Podrías haberle hecho verdadero daño, joder!

Ojalá tuviera su fuerza. Le habría reventado la boca por furcia y mala persona. Quiero seguir gritándole a Sel, impedirle que la ayude, que la mande a la mierda. Pero me puede el orgullo, no seré yo la que se arrepienta de ser su amiga. Siempre me he dado cuenta de cómo lo mira. Es jodidamente odiosa, como si tuviera derecho sobre mi hermano, como si él le perteneciera a pesar de saber que para él sólo existía Hada.

-¿Por qué no me preguntas qué ha hecho o dicho para que me enfade?

-Porque es irrelevante y será una chorrada que me hará cabrearme aún más. Y ahora tengo que ir a llevarla a casa. Joder, Zophiel, no me das nada de espacio.

¿QUÉ YO NO QUÉ? ¿Y ESA ZORRA? Cuando se ha ido, quiero correr detrás de ellos, gritarle que es retrasado, que es estúpido y que le voy a matar. Increíble.

-Para, Zop- me pide Hada.

-Le reventaría la cara- gruño.

-Hablas como él- sonríe cuando me siento a su lado.

-Es mentira todo lo que te ha dicho.

-No sabes qué ha dicho- ríe.

-Pero lo intuyo. Sel te quiere, te adora, eres su jodido mundo- traga saliva y baja la cabeza. agarro su mano.- Eres fuerte, y puedes con ella. Es sólo una puta más tú eres especial.

-Pero Zop...

-Hazme caso. Mi hermano no ha tocado ni a una sola mujer en este año, esperándote- abre los ojos mucho, sorprendida.- Sí, se ha hecho muy amigo de su mano derecha.

Se ruboriza.

-Eres de lo que no hay- susurra dulcemente.- Ay, pero... ¿Y si yo ya no le... gusto?

Se señala, dándome a entender que con sus atributos le iba a ser imposible atraer las miradas de ningún hombre. Cosa ilógica, ya que sin esa ropa tan sumamente grande que se ponía, y con ese bonito vestido azul claro, Hada está preciosa.

-Eres adorable, ¿Cómo no ibas a gustarle?- vale, si antes estaba roja, ahora parece una lucecita de navidad roja de esas.

-P-pero...