Selatiel
-Deberías dejar de pensar en ella, Sel.
Me giré entornando los ojos hacia mi mejor amigo. Llevábamos juntos desde que teníamos tres años, éramos inseparables. Con mi metro noventa y tres, le sacaba casi media cabeza a mi amigo Liam, cosa que usaba para picarle.
-Lo he intentado y lo sabes.
-No lo suficiente. Cindy lleva detrás tuyo desde el año pasado y ella es... bueno. Es Cindy. La reina del baile de otoño y probablemente del de invierno y primavera.
-Eso no es suficiente como para hacerme olvidar lo mucho que la quiero.
Ambos sabemos a qué se refería. Nos acercamos a mi taquilla y cojo mi mochila, poniéndomela al hombro. Después dirijo la mirada hacia mi amigo. Los ojos verdes de Liam permanecieron impasibles.
-Llevas enamorado de ella desde que tienes uso de razón. Acéptalo, nunca va a fijarse en ti, eres demasiado feo.
Le doy un puñetazo en el hombro. Si cualquier otra persona hubiera dicho eso, le habría partido la cara. Pero él tenía razón, debo pasar página e ir a por otra.
Entramos al aula. El color de las paredes es de un deprimente gris y los armarios son de un rojo que ha pasado mejores momentos. Las mesas están colocadas por parejas, y la pizarra es electrónica. Una lástima, las tizas eran mejor para lanzar que esos punteros. Nos acercamos a nuestros sitios, al lado de la ventana, y me siento pesadamente. Liam hace bromas sobre una chica que se había tropezado contra él para ligar. Dice que eso es un truco absurdo e inútil. La verdad que es un tipo agradable: ojos verdes y brillantes, pelo rubio y un maldito hoyuelo en la mejilla. Alzo una ceja cuando los comentarios pasan a ser más lujuriosos que otra cosa.
-Y tenía unas tetas que...
-¿Ya estás contando las cosas que no te han pasado?- Ruz, un chico con agradables ojos marrones y pelo corto al estilo militar se sienta frente a nosotros.
-¡Qué gracioso!- le dice sarcásticamente Liam.- ¿Dónde estuviste el sábado? No te vimos en la fiesta.
-Maldita cena familiar. ¿Estuvo bien?
-Fue brutal. Cindy se lanzó al cuello de Sel como una lagarta. Podría decirse que fue un asalto sexual en toda regla.
Le lanzo una mirada asesina.
-Lleva queriendo meterse en tus pantalones desde hace un año. ¿No vas a ceder nunca? Eres un estrecho- eso me lo dijo directamente a mí. Me remuevo, incómodo. No me gusta ser el centro de atención.
-Lo que digáis. Creo que quizás debería darle una oportunidad.
Momento de silencio.
-Oh, joder. Ya era hora de que dejaras a la gran A atrás y corrieras a por otra- pongo los ojos en blanco y rezo para que nadie haya escuchado ese comentario de Tyler, que acaba de meterse en la conversación. Es un chico bajo y adorable, más parecido a una mujer que a un hombre. Lleva el pelo largo por los hombros y tiene unos agradables ojos azules. Viste siempre de negro y es fan incondicional de Zophiel, cantante del grupo Gate to Hell. A pesar de su nombre femenino, las canciones son del género heavy metal. También tengo que decir que yo también soy fan de esa cantante, mi hermana.
-Claro, grítalo a los cuatro vientos. Cindy estará aquí violando a nuestro chico antes de que podamos terminar esta frase.
Me rio a mi pesar del tonto comentario de Liam y saludo con la cabeza a mi amigo. En ese instante, entra el profesor con mi acosadora. Tiene el pelo rubio fresa, ojos azules y el maquillaje recargado típico de las chicas pijas. Va vestida entera de rosa y lleva las uñas pulcramente pintadas y recortadas. Sonríe seductoramente y trago saliva. Más por miedo que por excitación.
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No me dejes caer (Gate to hell #1)
RomanceCuando los integrantes del grupo de heavy metal Gate to Hell llegan a su casa después de cada gira, acaban revolucionando su propio pueblo. Eso lo comprueba Sel, el hermano pequeño de la cantante de la banda. Y es que no puede dejar de pensar en cie...