No me dejes caer (Gate to hell #1)

Capítulo 5: Débil

Hola!!

Este es el capítulo más largo que he hecho, así que me he asombrado hasta yo.  

espero que os guste, un beso :)

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Selatiel

Que ella no bajara a cenar después de haberla dejado de esa manera me dolía. Quería subir arriba y bajarla. O abrazarla. O besarla. Pero me tuve que conformar con Zop.

-¿Que tal el día?

-No quiero que le vuelvas a hablar así a Hada- la aviso. Zop me mira, asombrada.

-¿Nos oíste?

-Como para no hacerlo. No estoy sordo, ¿Sabes? Y no quiero que vuelvas a decir esas cosas de ella.

-No es el momento...

-Pero no le digas eso. Soy mayorcito como para que me hagan daño.

Me mira unos segundos.

-No es a ti al que estoy protegiendo, si no a ella. Es frágil y necesita cosas que tú no le podrás dar.

-Le bajaría la Luna si ella me lo pidiera.

-Son necesidades especiales.

-Yo...

Zop me corta levantando una mano.

-No voy a hablar más del tema. No te acerques y se acabó.

Esas palabras sólo me hacen quererla más.

Me paso la noche entera dando vueltas en la cama. Hada era tan dulce, pero eso de “necesidades especiales” me asusta un poco. Quiero preguntarle a Zop sobre el tema pero no me atrevo del todo. Aunque no sé por qué me estoy comiendo la cabeza al respecto, si ya he decidido olvidarla.

A la mañana siguiente, Zop me hace despertarla a la misma hora que yo. Tiene mala cara, pero no se queja. Yo hago un sándwich de mantequilla de cacahuete, como le gustan a Hada y se lo dejo con una nota. Después, la encaro.

-Dime qué es eso de necesidades especiales.

-No.

-Lo necesito. No haré nada para dañarla, lo sabes.

Ella respira hondo. Tiene el pelo revuelto y ojeras. No está acostumbrada a despertarse tan pronto.

-Ella sufrió abusos por parte de su padre de pequeña- voy a contestar que eso ya lo sé cuando levanta los ojos diciéndome que me calle.- Así que ella tiene necesidades especiales en ese ámbito y será difícil llevarla.

Me quedo callado, procesándolo.

-¿Cómo sabes eso?

-Hada no se ha acostado con nadie por voluntad propia, si es lo que me preguntas. Además, llora por las noches y grita.

-¿Qué le hizo ese hijo de puta, Zop?

Ella mira por la venta, pensativa.

-No se lo he preguntado. Pero las marcas de su cuerpo hablan por sí solas. Ya las has visto, ¿No?

No me quise dar cuenta en el momento. Tiene el torso, los brazos y las costillas llenas de heridas, pero no me atreví a mirar más abajo.

-Sí.

-Déjala tranquila. Al menos hasta que la terapia surta efecto y ella se encuentre mejor.

Miro como se levanta y deja el plato en el fregadero.