Capítulo 35

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-¡Venga! Seguro que tienes más de un vestido en ese armario tuyo para la boda.-Dijo frunciendo el ceño Molly Weasley mientras tomaba en brazos a "Teddy Lupin".

-Tengo demasiadas cosas que hacer como para estar preparando la boda de Fleur y Bill.-Dije seca mientras continuaba analizando varios informes y anotaciones sobre la orden que Dumbledore había hecho llegar a casa de Caelus para que supiese todo lo que era necesario.

-¡No hace falta que ayudes! ¡Sólo tendrás que ponerte un vestido y acudir!-Respondió suplicante mientras observaba cómo Sirius me miraba y estiraba una de sus manos hacia mí.

Sin decir nada, Molly me lo entregó mientras yo lo acunaba en mis brazos. Para sólo tener dos meses, Sirius era un bebé muy inteligente, dando la sensación de ser un bebé de once meses particularmente pequeño.

-Mi respuesta sigue siendo no.-Dije tajante.

-¡Vamos! Hazlo por el pequeño Ted. Así sus padres podrán disfrutar de un día juntos y tú estarás más tiempo con él.-Reprochó sabiendo de antemano que uno de mis puntos débiles era este bebé. No en balde era mi único hijo al cual sólo podía ver alrededor de una hora diaria con suerte.

-De acuerdo, pero no esperes que haga nada especial. Sólo estaré allí como miembro de la orden.-Cedí levemente enfadada.

-Vamos querida. Todos sabemos que eres la líder de la orden, a pesar de que Ojoloco y Kingsley finjan hacer ese papel.-Dijo con una sonrisa mientras se agachaba y acariciaba el cabello de Sirius.

-Eso no te lo discutiré.-Respondí con cierta diversión.

-Teddy es el bebé más bonito que he visto. Parece uno de esos muñecos con los que juegan los muggles.-Dijo con una sonrisa.

-Es verdad.-Respondí contagiandome de su sonrisa.

-Claramente es un Black, aunque tiene cierto parecido a alguien más que no es Remus.-Dijo pensativa.

Rápidamente pensé en Severus, por lo que me inventé la primera excusa que rondó mi mente.

-Creo que se parece al difunto Ted Tonks. Por ello le pusieron el mismo nombre.

Al escuchar mis palabras Molly se encogió de hombros mientras lo observaba más de cerca.

-La verdad es que no lo sé. Nunca llegué a conocerlo...-Dijo pensativa.

En ese momento, apareció Dora por la puerta, situando sus manos en sus caderas como símbolo de ligero enfado.

-Teddy debería estar durmiendo en la cuna.-Dijo frunciendo el ceño mientras se acercaba y observaba cómo el bebé jugaba plácidamente con uno de mis mechones de pelo mientras lo sujetaba en mis brazos.

-Esque estaba despierto y no paraba de mirar hacia _____ y hacer pucheros. No pude evitarlo.-Dijo Molly como si fuese una niña a la que acaban de regañar.

-Después por la noche no dormirá, ¿Y a quién le tocará despertarse?-Dijo mirándome fijamente.

Había que admitirlo, Dora estaba haciendo bien el papel de madre, aunque ambas sabíamos que quien se despertaría para darle el pecho era yo ya que en medio de la noche no quería calentarle leche. Vivir en la casa de Caelus me permitía darle el pecho y cuidar de él cada vez que la oportunidad se cernía, y como la habitación de Hermione y la de Caelus estaba en el lado contrario de la casa donde se encontraba la mía y la de los Lupin, nunca descubriría que yo era quien amamantaba al bebé. De hecho, prácticamente yo y toby, éramos los que cuidábamos de Sirius, mientras que delante del resto eran los Lupin.

De cierta forma podía sentirme feliz por el arreglo que realizó Albus antes de morir, ya que podría ver y criar a mi hijo en vez de dejarlo con los Tonks sin posibilidad de estar cerca suyo.

Perdonar nunca es fácil (2 temporada de ¿Volver a amar? Snape Y Tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora