19- El ciclo de la luna

4K 279 2
                                    

Hay una tension que se ha puesto en el norteño después de nuestro altercado. Se ha cerrado conmigo, ya no está tratando de conseguir que yo comparta su comida, ya no busca mi compañía. Me habla directamente y al grano.

Es un hombre de negocios, sin afecto. Atrapo su mirada de vez en cuando, mirando mi cuerpo, mis cambios. Siempre tiene la mandíbula apretanda y le dan espasmos musculares mientras trata de luchar contra sus instintos hacia mí. Él entiende lo que nos está pasando. Él esta afectado por mí, tanto como yo estoy afectada por el.

Creo que por eso está tratando de mantener su distancia. Está luchando contra sus instintos naturales, negando sus impulsos primordiales. Lo que él está haciendo es una perversión, va contra todo en nuestra manada. Somos lobos: comemos, luchamos, nos casamos y nos apareamos eso es lo que hacemos.

Hay una tensión sexual explosiva cuando estamos en la misma habitación juntos, haciendo que los miembros de la manada se sientan incómodos.

Lo puedo decir por la forma en que se mueven en sus asientos, por cómo sus ojos van desde el Alpha hasta mí.

Su aroma aún persiste en las habitaciones en las que ha estado, me doy cuenta justo antes de entrar. Me encuentro acechándolo, tratando de acercarme, como en un juego de gato y ratón.

El desarrolló se esta notando fuertemente en mí, con cada fase que pasa de la luna. Así como la luna tira de las mareas hacia dentro y hacia fuera, tiene un efecto en el ritmo de desarrolló natural de mi cuerpo.

Comenzó sutilmente con mis caderas cada vez un poco más anchas, unas curvas que están tomando forma. Mi pecho se está volviendo más lleno, más pesado, hasta el punto que estoy dejando mis sostenes. Puedo sorprender el norteño mirando, retorciéndose entre sus pantalones vaqueros, veo su deseo, es tan evidente que me pone una sonrisa a la cara.

El color de mis labios se oscurece, mi cabello se vuelve más largo y grueso. Sólo una vez me tocó y solo fue para pasarme los dedos por el pelo, llevarlo a su nariz y oler profundamente antes de murmurar algo incoherente e irse lejos de mí.

Los ciclos cambiantes de la luna preparan mi cuerpo gradualmente para su primer calor. Pequeños cambios ocurren todos los días, pero es mi mente la que más sufre. Mis sueños se están volviendo demasiado intensos. Todo lo que sueño es con sus caricias, sus labios, su cuerpo. Me despierto con ansias violentas de él.

El aura a mi alrededor comenzará a cambiar junto con el sabor de mi piel. Será dulce, como fruta madura lista para ser comida. Un olor embriagador hará que mi norteño se emborrache de lujuria hacia mí.

La luna también tiene un efecto en su cuerpo. Se vuelve más agresivo, el suministro de testosterona cursando a través de su sistema es tres veces mayor. Sus rasgos están esculpidos, su esencia masculina es aún más prominente. Sus músculos se están tensando, su resistencia y su fuerza están aumentando.

Así como la luna entra en su etapa final en lo alto del cielo, también mi cuerpo despierta sus deseos suprimidos ... Las vueltas de la luna para reunir compañeros.

Estoy despierta en plena noche, puedo oler al norteño, justo en la otra habitación. Su olor masculino me está volviendo loca. Aprieto las sabañas en mis manos, me retuerso y me agarro en la parte superior de las sábanas. Tengo que luchar contra la compulsión de ir a estar con él.

Estoy inquieta, la energía de la luna llena está llamando a mi naturaleza. Me estoy volviendo loca pensando en él. Quiero sentir su piel rascarse contra la mía. Una corriente eléctrica atraviesa mi cuerpo. Necesito probar sus labios, su cuello. Quiero rascarle la espalda, marcarlo.

Estoy en llamas con una necesidad tan básica, me enloquece. La necesidad de aparearme, de reproducirme, de tenerlo enterrado profundamente en mí con los dientes hundidos en mi cuello. Me estremezco con el pensamiento, eso solo hace que mi excitación hacia él aumente.

El Norteño - POV MeelaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora