El Norteño - POV Meela

31- Esto no se puede recuperar

Definitivamente quiero leer sus comentarios en este capitulo..😝😝

Este capitulo esta dedicado a
>> YesiDAb & >> madd145 Disfrutenlo mis amores..💜💚

Su lobo nos mantiene corriendo toda la noche, hasta que tonos suaves de color rosa y púrpura aparecen en el horizonte, su lobo mantiene un ojo en el camino y un ojo en mí. Cuando surge una oportunidad y me quita los ojos de encima un segundo, entro por un ataque, chasqueando mis dientes para vaciar el aire. Él me detiene, al parece sin esfuerzo.

Mi orgullo se ha ofendido, y mi loba busca venganza en cada oportunidad. Con cada golpe de mis dientes, su lobo retrocede, pero no muerde. Él gruñe en su pecho como una advertencia. Sigue empujándonos hasta que nos acercamos a la puerta de atras de una pequeña cabaña en las afueras de la casa de manada. El rey deja su forma de pelea, volviendo a la piel humana. Golpeo la cola, esperando que se vuelva y me enfrente. Sin un enlace de manada, no podemos comunicarnos sin estar en forma humana. La indignación aumenta profundamente en mi loba.

-"Hueles mucho mejor."

Quiero romperle el vientre y comer su hígado mientras lo observa. Quiero que mi hocico gotee con su sangre. Le miro a los ojos y creo que entiende mi intención.

-"Tus ojos brillan como oro cuando estás loca, ¿sabes eso, Meela? Puedo decirte lo que estás pensando mirando tus ojos".

Bajo la cabeza y doy un paso más cerca, con las orejas aplastadas hacia atrás. Siento un suspiro y arrugo mi nariz hacia atrás, exponiendo mis colmillos.

-"Meela, no había nada que yo pudiera hacer. Mi lobo exigió lo que era suyo. Tu olías a otro varón Incluso tu sabes las consecuencias de esto. Cada mujer sabe cómo reaccionaría un compañero. No soy diferente de tu padre o hermano ¿Qué habrían hecho?"

Es un instinto hereditario profundo que todos los hombres tienen en ellos. Sus lobos son incapaces de tolerar el olor de otro macho en su pareja. Sé que sus palabras son ciertas, pero no hace menos revoltoso que marcara a mi loba sin consentimiento. Pasa sus dedos por la barba, agarrando el extremo. No tiene disculpas, ni remordimientos.

Me lanzó hacia él, tratando de atacar a su pantorrilla con mi mandíbula. Se gira un poco para golpear mi cabeza contra una pared. Mi dignidad se rompió, me alejo de él.

-"Meela, entra." Sostiene la puerta abierta para mí. "Vamos a luchar todo el día de mañana si quieres, y todo el día después de eso, pero por ahora, necesitamos dormir un poco. Cuando estemos descansados, tenemos que hablar de lo que ha pasado. Tengo que hablar contigo, Meela. Quiero tratar de empezar de nuevo contigo." Sus ojos se ven tan tristes, de un gris apagado.

Entré en la pequeña cabaña y husmeaba, tratando de encontrar algún peligro o sorpresa oculta.

-"Puedes tomar el dormitorio, tomaré el sofá, deberías cambiarte de ropa en el armario, la ducha esta al final del pasillo, buenas noches, Meela". Su voz suena cansada, no hay lucha en él.

Corriendo por la puerta abierta del dormitorio, la cierro con mis caderas. Busco a través de la cómoda ropa apropiada. Una vez vestida y cubierta completamente, salgo de la habitación.