Paparazzi. [Camren]

Cap. [4]

Pov Lauren.

Me eligió.

Traté de poner una sonrisa sincera que terminó por verse como una horrible mueca patética. No pude evitar sentir malestar ante el hecho de que me haya elegido.
Entre todos los interesados que estaban ahí, tenía que elegirme a mi, la persona a la cual le importa tres hectáreas de pico su vida, su carrera, su todo.

'Teen Music Universal' ésa estúpida frase no dejaba de repetirse una y otra vez en mi mente.

'Teen Music Universal', maldito el momento en el que acepté éste estúpido trabajo.

Dinah, la asistente personal de la chiquilla, me dio un pase para poder entrar a la residencia, y me indicó a que hora debía estar aquí mañana para la estúpida entrevista.

Volví a el hotel en cuanto tenía lo necesario para mañana, eran las 07:30 pm, y yo ya estaba muerta de cansancio.

Odiaba profundamente el tráfico de NY, era un asco.

-

Luego de cenar, y justo antes de dormir, no podía dejar de pensar en aquella chica.

¿Por qué mierda tuvo que elegirme a mi?

Pov Camila.

-¿Lo ves Dinah?, ¡Ella es perfecta!.- Exclamé.

-Está bien Chancho, ella es linda... pero, ¿No crees que estás exagerando un poco?.- Preguntó.

-¿Qué?, para nada, ¿Acaso no la viste?

-La vi Camila.- Dijo riendo.

-No la conozco y creo que ya la amo.- Hablé y luego me tumbé en mi cama.

-Estás loca.- Rió.

-Por ella sí, fue amor a primera vista.- Suspiré.

-O..k.. estás comenzando a asustarme.- Bromeó.

-Cállate idiota.- Reí.- Quiero a ésa chica para mi.

-Oh, claro a tus padres y a Simon les encantará la idea...

-¿Puedes dejar de darme tantos ánimos?.- Inquirí con seriedad.

-Lo siento, es solo que ya sabes lo que piensan acerca de hablar sobre tu orientación sexual, y todo éso ante el público.

-Lo sé... pero algún día tendrá que salir a la luz lo que soy.

-Así será Camila, pero aún no es el momento.- Prometió.

-¿Cuándo?

-Pronto.- Aseguró.- Mientras tendrás que seguir fingiendo tener un crush con el mojón ése.

-El no me agrada mucho...

-¿A quién le va a agradar?.- Preguntó riendo.

-Cierto.- También reí.- Debo dormir, porque mañana veré a el amor de mi vida, así que fuera de aquí.- Dije empujándola fuera de mi habitación.

-Descansa, también te quiero.- Dijo sarcásticamente y se fue.

Dije que debía dormir, pero en realidad no se si pueda hacerlo, pues mi cabeza me repite a cada segundo, la imagen de ése chica, estoy ansiosa por verla de nuevo.

Pov Lauren.

Salí de el hotel, y me dirigí de nuevo a la residencia de la chica.

En realidad no iba con muchas ganas, pero a final de cuentas, tenía que hacerlo.

Cuando llegué, los guardias me exigieron que me retirara, cosa que cambió cuando mostré aquel pase.

Me dieron entrada y poco tiempo después una mujer de aspecto mayor me condujo por el gran patio de la casa, lo que me pareció una eternidad, pues la maldita casa era aún más grande de lo que parecía.

Llegué al living de la residencia, en donde la niña ya me esperaba, hoy llevaba un vestido rojo ceñido al cuerpo, tacones negros y un moño de el mismo color para su cabello.

Se sentó cómodamente y enseguida yo pedí permiso para hacerlo también. Cortesía, dirían algunos, pero para mi sólo era educación, me lo habían impuesto desde muy pequeña. Y humildad, palabra que quizá no conociera ésa chica.

Comencé con el cuestionario, tirando la primera pregunta, pero sin embargo...

-Eres muy linda.- Comentó aquella muchacha rica.

Me encorbe ligeramente, un poco ruborizada por aquel comentario tan putamente descarado, ¿Qué demonios estaba haciendo?, ¿Jugando conmigo?, ¿A caso le parecía divertido molestar a la gente sólo por ser una niñita mimada?

-La pregunta, por favor...- Insistí, tratando de mantener la serenidad.

La chica seguía mirándome con aquella expresión, algo perdída, y yo me sentía tan observada... yo era aquí quien haría las preguntas pero aún así.

-Creo que me estoy enamorando de ti.- Expresó como si fuera lo más natural de el mundo.

Abrí los ojos y pensé que ésa niña se había tragado una langosta en mal estado, pero ella continuó.

-Metas... ¿Mis metas para el futuro?.- Devolvió la cuestión y yo asentí.- Mis metas son casarme contigo... quizás adoptar, hacer una canción que represente mis más profundos sentimientos por ti, y luego viajar, quiero llevarte a conocer cada rincón de el planeta...- Me miró.- En serio me enamoré de ti, a primera vista.

Yo mientras tanto, con cada comentario sentía una gigantesca necesidad de suicidarme, o morir. Entre mis apuntes coloqué. 'Casarse, adoptar, hacer una canción que represente sus más profundos sentimientos, y viajar por cada rincón de el planeta', claro que no iba a poner que conmigo. ¿Qué pensaría todo el mundo?

-Tu edad.- Proseguí tratando de mantener la calma, y la poca paciencia que me quedaba.

-Dime la tuya primero.- Respondió ella mientras se acomodaba en su asiento y sonreía.

Volví a insistir, pero ésta se negaba, y nuevamente esperaba mi respuesta.

Estuve a punto de levantarme e irme, pero el padre de Lucy me comería viva si dejo a la estúpida cantante a media entrevista, y por más incómodo que fuera para mi, tuve que extender la diminuta paciencia que aún existía en mi.

-Bien.- Maldita cría hija de puta.- Te diré mi edad... tengo 21.

-¿21?, ¡Oh dios!, 21... luces más joven, y sexy... me encantas. Realmente me encantas.- Me sonrió coqueta y dulcemente.

De inmediato sentí ganas de golpearme la cabeza contra cualquier superficie plana o al menos arrojarle algo en la cara a ésa chica, ¿Así eran todos los artistas?, ¿Con el derecho de joder a quien se les diera la gana?

-Tu edad.- Suspiré.

-17, cuatro años menor que tú, igual creo que podemos tener algo.- Dijo adoptando una posición más sería.- No es mucha diferencia, ¿Verdad?

Abrí los ojos como platos, ya, una era buen chiste, dos era pasable, tres era molesto... pero que siguiera ya era bastante incómodo, ¿Por qué lo hacía?
¿Con que intención?