Amor

Aparición

Stuart estaba feliz, demasiado a decir verdad.

Llevaba semanas intentando ser su amigo y lo logró después de tanto esfuerzo. Llegó a su casa, afortunado.

Cerró la puerta detrás de él con suavidad. Escuchó la televisión en la sala, contento se dirigió hasta allí para contarle a Russel aquella felicidad que desbordaba su alma.

-¡Russ adivina que pasó! -habló mientras corría hacia allí, el susodicho volteó notando su felicidad.

-No lo sé, ¿que? -sonrió, contagiado de su ánimo.

-¡Tengo una amiga! -rió una y otra vez, su amigo arqueo una ceja.

-¿No lo son todas? - 2D rió con inocencia infantil mientras negaba.

-Hablo de Noodle -cubrió su boca intentando apagar aquellas risas indiscretas, Russel sonrió maravillado.

-¿En serio? ¡Que bien! -felicitó -¡Deberías invitarla! ¡Quiero ver a la pequeña! -sugirió emocionado.

-¡Que buena idea Russ! -gritó antes de salir corriendo a su cuarto cual adolescente.

Russel rió cuando lo escucho caerse pero levantarse con rapidez, sintiéndose invencible, mientras gritaba un sonoro "¡Estoy bien!". Regresó su vista a la pantalla pensando que el programa no era tan interesante como las reacciones que tenía su amigo al estar cerca de aquella jovencita.

...

2D nunca antes se había sentido tan pleno como inconscientemente lo hacia al estar al lado de su amiga.

Todos esos días se los pasaba solo con Noodle, la saludaba cuando se la topaba y se escabullía para almorzar con ella. Se sintió orgulloso cuando en algunos momentos ya lograba notar cuando bromeaba a cuando no, su voz se tornaba ligeramente mas suave cuando bromeaba mientras que era fuerte cuando hablaba normalmente.

Stuart le observaba atentamente, descubriendo cosas que antes ignoraba. Como que a Noodle le encantaban los fideos, lo cual era chistoso por su nombre de pila. O que también amaba a los animales, pero no contaba con suficiente dinero para mantener uno, anotó mentalmente su regalo de cumpleaños. También que sus dientes estaban perfectamente apilados y relucientes, debajo de sus finos labios.

Poco a poco iba excavando y descubriendo cosas nuevas, lo cual lo mantenía maravillado.

No obstante le daba miedo que Paula descubriera su reciente amistad. Bien sabia que ella era una mujer tranquila y linda, aunque los días anteriores antes de perder contacto, se portaba posesiva e infeliz. Tenía miedo de encontrar en Noodle una potencial excusa para pelear y comenzar a prohibirle el contacto con su estudiante.

Porque no estaba seguro si le haría caso.

Ambos se encontraban sentados a la sombra de un frondoso árbol, a veces comían sin decir ni una sola palabra y el la observaba con detenimiento. O también que ella hablaba un poco mas de lo normal y preguntaba diversas cosas o temas.

-¿Sabes? -habló el después de un rato, olvidando lo que le iba a pedir -Los amigos tienen apodos -sugirió notablemente contento.

-Tu tienes un apodo -dijo con la boca llena, había dejado de fumar tanto para dar paso a su bien escondida glotonería.

-No m-me gusta mucho ese apodo -jugó con ambos dedos.

-¿Por que no? Te queda -el rió un poco y ella encogió sus hombros -¿Entonces como quieres que te llame? -casi pudo notar un brillo en sus ojos.

-2D -susurró rápidamente, alucinante.

-¿Tommy? ¿Como Tommy es mejor que abuelo? -cruzo sus brazos, indignada.