Amor

Fin

Stuart se observaba atónito frente a aquel espejo de cuerpo completo.

Vuelve a colocar su rebelde pelo hacia atrás, como lo hace cuando va a trabajar. Se pregunta si su esmoquin esta acomodado correctamente o si se ve lo suficiente atractivo para su prometida, suspira con los nervios a flor de piel.

-Vaya, luces muy bien Dents -hablan atrás de él, es Russel, una gran sonrisa surca su rostro.

-H-Hola Russ -saluda con palpable ansiedad -C-Crei que estarías con Noodsy -se acerca a el y acomoda mejor su corbata.

-Quería pero Murdoc dice que el casi no pasa tiempo con ella y es su turno -ambos ríen discretamente, es más que obvio que la quiere tanto como ellos aunque lo niegue.

Ven abrirse la puerta, es el varón de quien tanto hablaban. Viene con expresión triste, le miran extrañados.

-Sus estúpidas amigas me hecharon -pronuncia acostándose en uno de los sillones, se miran entre si confundidos.

-¿Por qué? -interroga Russel, cree saber la respuesta.

-¿Yo que mierda voy a saber? Malditas locas -refunfuña en su sitio a lo que ríen juntos. Centra su vista en Stuart -¿Como te sientes imbécil? -el aludido abre los párpados sorprendido, no siempre le preguntaba eso. De hecho, nunca.

-M-Muy nervioso -juega con sus dedos -Temo que algo salga mal, que olvide mis votos o que me deje plantado en el altar -inhala asustado -¿N-No se ha ido verdad? -exclama al borde de una crisis nerviosa.

-Dents, no pasa nada ella esta... -es interrumpido.

-¡Se ha ido face-ache! ¡Vine porque ella escapo y no la encontré! -dramatiza el mayor, el otro lanza un chillido de terror ignorando las carcajadas de este.

-¡D! ¡Tranquilo! Iré a ver a la princesa, todo estará bien -lo toma de los hombros y lo sienta en un sillón, asiente mas tranquilo.

-E-Esta bien Russ -cede razón y lo ve marcharse por la puerta.

Pasan los minutos y no regresa, comienza a hiper ventilarse. Las dudas asaltando su mente, sus inseguridades aunando muy dentro de su corazón, el miedo calando sus huesos. A punto está de gritar que lo ve regresar, está tallándose los ojos de las lágrimas.

Teme lo peor.

-¿R-Russ? -llama como un niño que apenas conoce el mundo exterior, vulnerable.

-Oh, Dents... -se acerca a el para darle un abrazo, se tensa creyendo que es por lástima -Se ve tan hermosa... -sonríe cariñoso, el alma le regresa al cuerpo.

-¿D-De verdad? -sonríe de oreja a oreja -¡Quiero ver! -camina hacia la salida y es apresado por el moreno.

-No, es de mala suerte -engaña, el recuerda esto y asiente comprensivo. Lo ve sonreír de nuevo, esta vez más burlón -Ya se porque sacaron Murdoc de la habitación -susurra, nota como el mayor salta de su lugar, alcanzando a oír.

-¿¡Que!? ¡Es mentira lo que sea que te dijeron! -grita avergonzado, Russel ríe. 2D ve a ambos.

-Las chicas me dijeron que todo iba bien, Murdoc se comportaba -ríe un poco intentando aguantarse las carcajadas - Hasta que la pequeña finalmente se puso su vestido -ríe mas alto, Stuart no sabe si se lo imagina pero cree que nota una tonalidad de rojo en las mejillas de su otro mejor amigo -¡Comenzaste a llorar muchísimo! -se carcajea frente a sus narices - Y como se lo contagiaste a la princesa derramo su rímel -ríe aún más, 2D le mira.

-Murdoc, no esta bien sabotear la boda de otros -desaprueba ignorando el tema del que pudo burlarse. El mayor les grita improperios avergonzado.

Siguen charlando, Stuart siente los nervios casi desaparecer por completo.