Quiéreme de una vez.

¿Todo bien?

~Poché~

—Te lo prometo Poché—Escuché que me dijo Calle antes de besarme.

Cerré mis ojos y en lo único que pensaba era en ella, ese beso hizo que me tranquilizara, fuera de todo sólo necesitaba a Calle para sentirme bien.

Nos separamos en el momento que el carro que venía atrás pitó en señal de que el tránsito estaba fluyendo y ya teníamos que avanzar.

Sonreímos y vi como ella posó su mirada al frente avanzando un gran tramo. Después de unos cuantos metros pasamos a un lado de un accidente automovilístico el cual estaba provocando tanto tráfico.

—¿No había nada feo cierto?—Le pregunté a Calle ya que yo había cerrado los ojos por cualquier cosa.

—Espero que no, solo estaba el carro desecho—Me contestó mirándome de reojo—Tranquila, ahorita ya va a ser más rápido el camino.

—Ojalá siguiera el tráfico—Le dije mirándola.

Vi como me miro de manera rápida y sonrió, volví a escuchar como mi estómago hizo nuevamente ese ruido extraño.

—Calle—Le dije pensando en el por qué mi estómago hacía eso, hasta que recordé que no habíamos comido nada desde la mañana.

—¿Sí?—Me preguntó en un tono que me pareció muy tierno.

—Creo que tengo hambre, ¿Tú no?—Le contesté dudosa ya que ella no había mencionado algo al respecto.

—¿Quieres comer algo en especial?—Me preguntó mientras seguía manejando.

—¿Pero tú si tienes hambre?—Le pregunté mientras veía como detenía nuevamente el auto. Miré hacía al frente y noté que ya estábamos en la ciudad y nos había tocado un alto.

—Sí, un poco—Dijo mientras me miraba sonriente.

—Detente en mall, y ahí buscamos algo—Le dije y nuevamente se puso en marcha.

Recorrimos las calles de Los Ángeles como por 10 minutos más y llegamos a la plaza, subimos el estacionamiento hasta el último piso y en un cajón de este detuvo el auto. Me quité el cinturón que traía y vi como Calle hizo lo mismo.

Revisé mi celular para ver la hora, 20:10, y en seguida lo guarde en la bolsa del short que traía.

—¿Bajamos?—Le pregunté al ver se había recargado sobre el asiento.

Asintió y en seguida abrió la puerta que se encontraba a su costado, hice lo mismo y bajamos al mismo tiempo.

Observé como caminó hacía donde me encontraba y extendí mi mano para que la tomara. Una vez que lo hizo la atraje hacía mi.

—¿Estás bien?, me pareció que tu animo bajo poquito—Le dije a lo ojos.

—Creo que si sería mejor seguir en el tráfico y no haber llegado nunca—Dijo mientras me tomaba de la cintura y me abrazaba.

—Pero si siguiéramos en el tráfico yo iba a morir de hambre—Le dije provocando que sonriera.

—Vamos para que comas—Dijo volviendo a tomar mi mano mientras caminaba hacía la entrada de la plaza.

Caminé con ella y una vez en la plaza entramos a un restaurante de waffles al que ya habíamos ido un par de veces.

Nos sentamos en una de las mesas con vista hacía la ciudad. Mientras hacíamos el pedido de lo queríamos vi como Calle se tenso al mirar su celular.

—¿Todo bien?—Le pregunté después de terminar de ordenar.

—Sí, bueno, no se—Me respondió riendo,—No importa.