Narra Annie:
Mis lágrimas comenzaron a caer cuando el se marchó de mi recámara, las lágrimas me quemaban, odiaba llorar porque era como el ácido el dolor que produce en mi es inexplicable. Limpie mi rostro y me miré en el espejo, me sentía vacía y sola. La puerta de mi recámara sonó y dio paso a Alex, sonreía y me entregaba una bolsa con helado y chocolates, sonreí y lo dejé pasar.
Alex: tu novio me quería matar -dijo riendo -no lo culpo... soy irresistible y es normal que se de cuenta que soy mejor que el y que yo si te merezco -dijo riendo.
Annie: No hablemos de el -dije seria -trajiste mi pedido?
Alex: Por supuesto -dijo abriendo la bolsa y sacando una caja llena de cigarros y tres botella de vodka.
Annie: Excelente -dije abriendo la primera botella y prendiendo un cigarro.
Alex iba a ir por unos vasos pero yo negué, bebí directo de la botella. Cuando íbamos a terminar la tercera, escuchamos ruidos provenientes del piso de abajo. Nos miramos y reímos como locos. Con mucho trabajo logré mantenerme de pie, apagué el cigarro y prendí uno nuevo. Le hice un ademán a Alex y este me siguió, no se como logré bajar las escaleras, en el estado en que estaba era sorprendente. Nos dirigimos hacia el despacho y ahí estaba mi abuelo sentado platicando con Lucas y mi padre, digo, con percy. Nos miraron extraños y entonces apareció Cipris junto a Lucas.
Annie: La noche es linda eh? -dije riendo y dándole una calada al cigarro.
Percy: desde cuando fumas...
Annie: desde que mi vida se jodió viejo-dije riendo y tambaleándome de un lado a otro hasta llegar
Zeus: mas respeto Annie -dijo serio -me puedes decir que significa esta escena patética, pensé que estarías en tus cinco sentidos, no puedo creer lo que mis ojos ven
Annie: relájate abuelo -dije sentándome y cruzando mis piernas -la vida es una y hay que vivir como si fuera la última vez, sabes algo, te hace falta mas diversión... te recomendaría que te echaras una buena tanda de...
Zeus: Annie -dijo echando un fuerte grito que hizo que se cayera mi cigarro.
Annie: Hay -dije haciendo un puchero -mira que hiciste abuelo, no importa Alex dame otro.
Alex se tambaleó hacia donde estaba y prendió otro luego este se acercó a Cipris y le dio un ligero golpe en las nalgas, esta quedó roja.
Cipris: como te atreves -dijo haciéndose a la indignada.
Alex: No me digas que ahora te harás la decente... ambos sabemos que ese nombre no te queda... -Alex y yo echamos una fuerte carcajada.
Annie: La zorra se ofendió --dije fingiendo asombro.
Cipris: Cállate maldita -dicho esto se iba a abalanzar contra mi pero Percy lo impidió.
Las puertas del palacio se abrieron y dieron paso a una mujer medio despeinada.
Clarisse: que pasa, porque tanto escándalo.
YOU ARE READING
La hija de Percy
RomanceCuando un semidiós es creado, también lo es su compañera...