Capitulo 43 - Adoras que sea mandona....

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Narra Dulce

Me levanto de la cama cansada de esperar a Chris, la última semana ha estado demasiado inmerso en el trabajo. Los últimos meses han sido caóticos, entre estar pendientes de Charlie y Alonso e intentar tener otro bebé se nos han pasado diez meses.... si, diez meses , que rápido pasa el tiempo no?....
En estos meses han pasado muchas cosas, unas buenas, otras no tan buenas pero siempre se podía solucionar cualquier problema que se presentara. Qué les puedo contar? Ahhhh ya se, abrí una boutique de ropa para niños y bebés en compañía con Ana.... si ya nos llevamos bien y no hay ningún tipo de celos hacia ella, al contrario he encontrado en mi cuñada una excelente amiga además de que ha logrado lo que nunca nadie pudo, soportar a mi primito por más de un mes, técnicamente llevan saliendo juntos tres meses pero todo este tiempo han estado viéndose y conociéndose, nunca creí que diría esto pero hacen una linda pareja, el problema aquí son los recientes celos de mi hija hacia su prima Arantza, no quiere que se le acerque a Pablo ni medio centímetro.
Me acuerdo perfectamente de su última escena de celos hace apenas dos días, todo iba muy bien hasta que Arantza se le ocurrió preguntarle a Ana que si Pablo sería su papá, nada más escuchar eso y mi hija se volvió histérica, hasta un empujón le dio a su prima, pego un grito diciendo que su papi era solo suyo y que no lo quería ni así de cerca de él, para luego pegar dos deditos y mostrarle, por supuesto hubieron gritos y lágrimas, los gritos del lado de mi hija y las lagrimas de mi sobrina.... ese día estuvo guindada del cuello de su padre el resto de la tarde, sin querer que nadie se le acercara..... no se a quién habrá salido, se los juro que no.

Por otro lado está Alonso, mi bebé está cada día más hermoso, es perfecto como su madre obviamente y que les puedo decir me trae babeando todo el día. Al principio creíamos que él sería el calmado pero no señores, si Charlotte tiene energía inagotable él tiene el doble, se la pasa riendo a toda hora y tiene una mirada pícara que tiene flechada a más de una, es el alma de la fiesta y a cada lugar que llega todos tienen que ver con él.... por eso les digo que es igual que su madre, le encanta ser el centro de atención .
Y Chris....mi Chris es el mejor esposo y papá del mundo, todo los días me doy cuenta de lo afortunada que soy por tenerlo a mi lado y precisamente porque se la clase de hombre que es él tengo que estar más que pendiente de espantarle cualquier lagartona que se le quiera meter por los ojos, ese hombre es mío y de nadie más, pero es que ya ni respetan que es casado, que tiene dos hijos y una hermosa esposa que lo defenderá con uñas y dientes si es necesario pero obviamente con clase.

Vuelvo a la realidad y termino de darme una ducha después de estar largos minutos desvariando, tomo mi toalla y la envuelvo alrededor de mi cuerpo, camino hasta el vestidor en busca de mis cremas hidratantes y recuerdo el regalo que compre para Chris esta mañana, muerdo mi labio al imaginar lo mucho que le va a gustar así que espero que esto nos libere un poco de la tensión que hay desde hace algunos meses porque no he logrado quedar embarazada. Después de un tiempo de intentarlo nos dimos cuenta de que algo estaba mal así que fuimos al medico y nos dijo que nuestro caso era el de una infertilidad secundaria, que aunque ya habíamos tenido otros embarazos con este nos costaría más.

Seco mi cuerpo lentamente deseando que Chris entre por esa puerta y así tener que ahorrarme ir a buscarlo para seducirlo....pero a quien quiero engañar, con Chris no tengo que hacer mucho trabajo porque lo tengo gobernado y siempre detrás de mí.
Hidrato mi piel y coloco perfume en mi cuello, es el favorito de Chris, me miro en el espejo y me veo increíblemente sexy con esta lencería color negro.... si yo fuera mi marido no lo pensaría dos veces y me llevaría a la cama.

Bajo las escaleras de dos en dos y reviso que no haya nadie, el servicio ya se retiró, Charlie está en casa de su padre y Alonso debe de estar durmiendo al cuidado de su nana así que esta era mi oportunidad para seducir a mi marido.
Abrí la puerta del despacho sin que Chris lo notara, se le veía tan concentrado leyendo esa montaña de papeles que ni siquiera notó mi presencia, cierro la puerta colocándole seguro y es ahí cuando alza su mirada y me mira de arriba a abajo, sé que le encanta lo que ve y esta noche no va a ser para nada aburrida.
— Señor Uckermann está ocupado?— todavía sigo en la puerta con mi bata de seda entreabierta .
— Un poco señora Uckermann ¿pasa algo?—me acerco hasta él y me siento sobre su escritorio.
— Pasa que su esposa lo necesita en su habitación— mira mi cuerpo detenidamente y mi Dulce interior empieza su trabajo de seducirlo, acaricio su pierna con mis pies desnudos y veo cómo su respiración empieza a entrecortarse y a agitarse.
— Dul....— Mis pies siguen provocándolo hasta que noto como su erección crece entre sus pantalones , tiene las pupilas dilatadas y su lengua recorre su labio inferior una y otra vez.... Se que mi marido me desea y yo lo deseo a él, sigo martirizándolo hasta que ya no puede más, aparta mi pie y abre mis piernas bruscamente, se coloca entre ellas y toma mi cara entre sus manos, me muerdo el labio al verlo así de pasional.
— Estás jugando con fuego cariño— dice a escasos centímetros de mis labios.
— Ya sabes lo que quiero amorcito.... quiero que dejes todo esto a un lado y me hagas el amor toda la noche — tomo sus manos y las pongo sobre mi cuerpo.
— Dul tengo que terminar todo esto...—intenta resistirse pero no pienso dejar que empecemos a caer en la rutina.
— Christopher más te vale que.... — mi boca fue callada por su beso, salvaje y exigente, suelto un gemido entre sus labios cuando siento que la temperatura empieza a subir poco a poco, enrollo mis piernas en sus caderas y lo pego a mi para que no escape, sus besos bajan por mi cuello haciendo que me estremezca, baja las tirantes de mi camisón y se encuentra con mis senos desnudos, los observa con dedicación relamiéndose los labios, para luego posar sus manos en mis pechos haciéndome suspirar, masajea mis senos haciendo que mis gemidos salieran sin control por mi boca, cuando siento su boca rodear mi pezón mientras su otra mano estimula el que había quedado sin atención creo que perdí cualquier tipo de concentración. Me arqueo más ofreciéndoselos, cuando estuvieron duros y excitados se separa de mi dispuesto a quitar mis bragas, sus manos suben por mis piernas y las jala lentamente provocándome a la vez que besa mi cuello.
— Que tal si seguimos esto arriba— me alza y enredo mis piernas alrededor de sus caderas, camina conmigo escaleras arriba y cuando llegamos a nuestra habitación me coloca suavemente sobre la cama, siento cómo sus besos bajan por mi cuello y sus manos recorren mi cuerpo, lo ayudo a deshacerse de su ropa y cuando lo hago volvemos a unir nuestros labios en un pasional beso.
— Hazme el amor— susurro en su oído, toma mi cara entre sus manos y me hace verlo a los ojos.
—Te amo más que a mi vida preciosa— no puedo evitar estremecerme cada vez que me dice eso, lo quiero, lo necesito pero sobre todo lo amo.
—  Y yo a ti amor— nos fundimos de nuevo en un largo y apasionado beso, me coge entre sus brazos y vuelve a acomodarme sobre la cama, sus besos logran encenderme como siempre, sus caricias en mi piel hacen que me sienta en el mismo cielo y no queda ni un solo centímetro de mi cuerpo sin ser acariciado ahora sus besos bajan por mi cuello hasta mis pechos y ahora soy yo quien trata de desnudarlo, desabrocho sus pantalones y bajo sus bóxers dejando su imponente erección a la vista.
— Ve algo de su agrado señora Uckermann — me mira y tiene esa sonrisa ladeada que me vuelve loca. Su voz es ronca y sensual, la necesidad por estar juntos crece más y más, se acomoda entre mis piernas y sin quitarme los ojos de encima siento como se hunde en mi de forma lenta y pausada haciendo que se nos corte la respiración, vuelve a salir y sus movimientos son suaves y pausados, yo no puedo evitar gemir, y así una y otra vez hasta que empiezo a temblar y necesito más de él, necesito sentirme suya, necesito sentir que pertenezco
— Chris por favor — le pido en un susurro, me estoy retorciendo del inmenso placer que se acumula en mi cuerpo.
— Deja de mandar hasta en la cama preciosa — suelto una carcajada porque es verdad que me encanta manejarlo y dirigir las cosas así que esta vez dejo que tome el control.
— Cállate que adoras que sea mandona — ambos reímos y Chris vuelve a capturar mis labios de forma salvaje.
Nuestros ojos se encuentran y siento como sus movimientos se vuelven más rápidos y placenteros.
— Nunca me oirás aceptar eso— dice entre gemidos.
— Oh Chris...— su nombre sale de mi boca en un grito que me deja prácticamente sin aliento.
— Me encanta escucharte decir mi nombre mientras te hago el amor — oírlo decirme esto hace que mi cuerpo se estremezca completamente....siento como estallo en mil pedazos, disfrutando de un fabuloso orgasmo que me hace ver estrellas.
Chris me sigue unos segundos después, liberándose y llenándome por completo, nuestras respiraciones están agitadas y nuestros corazones laten desbocados, Chris se acomoda a mi lado y me acerca a él estrechándome entre sus brazos.

Cuando vuelvo a recuperar mi respiración me suelto del agarre de Chris y coloco mis piernas hacia arriba sobre el espaldar de nuestra cama.
— Qué haces?— me pregunta acariciando mis piernas.
— Ya sabes lo que hago— digo deteniendo su mano que sube y baja causándome un cosquilleo.
— Sigues con eso— ruedo los ojos porque él sigue creyendo que es una locura.
— El doctor dijo que no era una locura, que de verdad servía.....además me relaja.
— Bueno mientras te relajas.... tengo algo que decirte— sigo con mis ojos cerrados concentrada en mi mantra.
— Qué?— digo tratando de no perder mi centro.
— Se me había olvidado decirte qué mañana habrá una fiesta — abro uno de los ojos  y lo veo, sabe cuán molesta me pone que haga este tipo de cosas.
— A la que por supuesto no iremos porque me avisas con una noche de antelación — le digo entre dientes.
— Dul cariño es importante — me mira con ojos suplicantes y con esa carita de perro mojado que logra convencerme la mayoría de las veces.
— Christopher no tengo un vestido que ponerme, además ni siquiera se de qué manera tengo que ir vestida, tengo que comprar accesorios, agendar peinado y maquillaje, qué no piensas en mí?— le preguntó sentándome en la cama para luego buscar mi camisón y colocármelo.
— Vamos preciosa tienes un vestidor lleno de vestidos, zapatos y bolsos de diseñador— y que quiere él? Que digan que Dulce Uckermann repite vestido? Nunca en la vida... nunca.
— Vestidos que ya he utilizado — le digo irritada.
— Si te prometo dejarte comprar varios vestidos y accesorios y además encargarme que los estilistas vengan a peinarte y maquillarte mañana vendrías conmigo a la fiesta?— estoy de espaldas a él cepillando mi cabello pero me gusta la oferta, es bastante tentadora pero me gusta martirizarlo un poco.
— Lo pensaré — le digo tratando de ocultar una sonrisa.
— Amor porfis ¿si?— vuelvo a la cama y acomodo mi espacio.
— Está bien, pero elijo los vestidos que quiera incluyendo zapatos, bolso y joyas — Chris rueda los ojos pero sé que al final terminará aceptando.
— Dulce ....
— Bueno si te vas a poner de tacaño entonces no voy— me cruzo de brazos y hago mi actuación de enojada.
— Está bien, está bien.... puedes comprar sin restricciones — alza los brazos dándose por vencido y sonrío victoriosa.
— Sabes que te amo verdad— digo mientras me acerco a él y beso de nuevo sus labios.

Qué tal estos calientes ?😏😏😏 se pasan de verdad 😂 pero se aman con locura eso si😻💕Dejen sus comentarios y sus votos ⭐️ las quiero💕

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