El Matrimonio Perfecto

Capitulo 44 - Ignorándome...

Narra Dulce

Y aquí estoy yo en medio de un dilema tratando de encontrar un vestido que ponerme para la dichosa fiesta, tiene que ser justo a la medida porque no hay tiempo para hacer retoques. Saco a Chris de su oficina una hora antes de su hora de almuerzo y lo traigo conmigo para que me ayude a encontrar un vestido, pero no ha servido de mucho porque según todos le gustan, todos me quedan bien y lo último que le escuché decir fue un : llévate cualquiera de los que están en la pila que te llevaste al probador.... es en serio? Ni siquiera me ha prestado atención porque está pegado a ese bendito celular escribiéndose con quien sabe quién o resolviendo quién sabe qué.
Es que el idiotita no entiende que esto es importante? Si no me va a prestar atención mejor que se vaya por donde vino y mientras me busco alguien que si pueda ayudarme a elegir un vestido, llamó a Ana pero su celular salta directamente al buzón de mensajes y luego recuerdo que debe de estar en medio de su vuelo..... luego recuerdo que puedo llamar a su tormento y en definitiva él si me ayudará a escoger un vestido para esta noche.
Unos veinte minutos después oigo la puerta de la boutique abrirse y ahí aparece él tan sexy como siempre y con ese aire de superioridad que siempre carga.... no es lo que están pensando pero es que tampoco por estar casada estoy ciega, que ame a Chris no quiere decir que deje de encontrar a Pablo guapo.
— Está tan concentrado que ni siquiera notó mi presencia — me dice medio sorprendido cuando llega hasta mi lado y me saluda con un beso en la mejilla.
— Lo sé por eso te llamé, a este paso me tocará ir desnuda a la dichosa fiesta— le respondo rodando los ojos.
— No te verías nada mal— me dice al oído mientras ambos vemos a Christopher concentrado.
— Lo sé pero.... oye acuérdate que estoy casada y tú tienes una novia — le digo reaccionando.
— Y qué? Ciego no estoy cariño, sabes que calientas a cualquiera— me agarra por la cintura y vuelve a besar mi mejilla mientras se ríe.
— Díselo a mi marido para ver si sale de ese transe en que está — lo señalo y él sigue así, en las mismas, sin prestarme atención
— Mucha habladuría ya.... muéstrame los que te gustan más y te ayudo a escoger— me muerdo el labio nerviosa y le muestro la pila que hay afuera.
— Hay una pila aquí y si quieres puedes ver en la tienda cuál te gusta— me encojo de hombros y el asiente.
— Está bien espérame en el vestidor — me cruzo de brazos y alzo una ceja .
— Oye cómo que espérame en el vestidor... me vas a poner el vestido o qué?— por su sonrisa cínica se que saldrá con alguno de sus apuntes.
— Te he ayudado a hacerlo la misma cantidad de veces que te lo he quitado— si si yo misma me busco estas cosas.
— Esto se lo contarás a nuestra hija en algún punto de su vida verdad?— se ríe y asiente.
— No la subestimes que entiende muchas más cosas de las que crees.... mamá dice Charlie vuela con los motores apagados
— Salió a ti, demasiado viva esa niña— veo más y más vestido y ninguno me convence, es tan difícil ser yo.
— Ay no pues salió solamente a mí, y tu qué? Santa Dulce te digo— me van a salir canas a temprana edad por su culpa.
— Ahhhhh deja de decirme así caray— le digo irritada.
— Ya ya pruébate este, es de tu gusto y seguro va con tu figura — me entrega un vestido
— Dirás mi perfecta figura
— Si si tú perfecta figura entra rápido y pruébatelo que tengo otras cosas que hacer
— Qué harás esta noche
— Yo también voy a la fiesta no te había dicho?
— No pero con quién irás? Ana no está en la ciudad
— Y eso qué? solo es una fiesta además va a asistir mucha gente con la que mi papá  y yo tenemos negocios así que ya sabes cómo funciona esta, hay que hacer acto de presencia .

De regreso a casa espero a Chris para mostrarle lo que compré, al final terminó solo pagando y luego dejándome en casa para ir de vuelta al trabajo, no se que carajos le pasa pero hoy ha estado muy extraño, prácticamente ni me ha prestado atención, algo muy extraño después de anoche.... pero bueno toca esperar a esta noche, suspiró resignada y leo el mensaje que me acaba de enviar diciendo que los estilistas estarán aquí a las seis y que tratará de llegar antes para arreglarse.... ya? Sin un te amo o algo parecido.
Chris no llegó hasta hace una hora a vestirse para ir a la dichosa fiesta y precisamente llegó cuando me estaban arreglando así que no pudimos estar a solas, solo estuvo un rato viéndome desde el marco de la puerta haciéndome sentir por un momento un deja vu del día de la fiesta en la que al final termine accidentada, después de un rato se excusó y se retiró de la habitación.
Una vez maquillada y peinada busco el vestido que compré esta mañana con ayuda de Pablo, es un hermoso vestido blanco con escote profundo y con dos aberturas a los lados, voy en busca de mis joyas y me coloco unos hermosos aretes de diamantes que se ven y van perfectos con el vestido, me coloco un brazalete a juego con los aretes y por último me coloco unos zapatos plateados que se amarran a mis piernas haciéndolas lucir más largas y estilizadas. Busco mi bolso de mano y reviso que todo esté en orden, antes de bajar me miro en el espejo y me veo.....hermosa como siempre , sonrío y vuelvo a poner la máscara de Dulce perfecta que utilizo en todas las reuniones, si creían que lo había dejado a un lado con el paso del tiempo pues ya saben que no, de toda esta gente depende que los negocios de Chris y de mi familia sigan tan bien como están, y si tengo que ser hipócrita y políticamente correcta lo haré, aunque me reviente la presencia de más de uno.
Bajo las escaleras lentamente y una vez abajo busco a Christopher, está en la sala tomando un vaso de whiskey, el segundo según yo que lleva en la noche, levanta su mirada cuando me siente llegar y se levanta hasta llegar a mi lado, me da un beso corto y esto es lo último.
— Qué te pasa? — le pregunto a punto de perder la paciencia.
— De qué hablas Dul? — que me crea tonta me da aún más coraje, el no es así conmigo, no como ha sido hoy, distante y desinteresado por lo que yo haga o deje de hacer.
— No me quieras ver la cara de idiota Christopher porque si sigues con esa actitud me quedo aquí en casa, no creas que disfruto mucho jugando a ser la esposa perfecta otra vez, prefiero estar en mi casa con mis hijos y no estar sonriendo toda la maldita noche agarrada de tu brazo.
— Lo siento está bien, se que no querías venir desde el principio.... — lo interrumpo porque le está dando vueltas al asunto y ese no es el problema.
— No es eso Chris, haz estado raro todo el día, me has ignorado y sabes cuánto detesto eso— me cruzo de brazos y ni siquiera así se digna a decirme que pasa.
— Dul solo tengo la mente en otra parte no pasa nada— bueno me tocará tomar decisiones extremas, si él lo quiere así pues ya no es culpa mía.
— Dímelo o ahora mismo subo a desvestirme — le digo muy en serio y por mi cara sabe que es verdad , cuando finalmente suspira sé que me dirá lo que le está pasando.
— Está bien te lo diré..... mi mamá ha estado buscándome y dice que quiere que dejemos a un lado todo lo que pasó con el juicio..... y quiere hablar con nosotros en la fiesta
— Qué? Ella también va?
— Dul....
— Dul una mierda Christopher no sé cómo puedes creer en su arrepentimiento, me quiso quitar a mi hija y casi pierdo a Alonso por su culpa
— Dul no estoy diciendo que la voy a perdonar, ni siquiera he aceptado hablar con ella pero ha sido tan insistente en el día que realmente ya no se ni que pensar.... es mi madre de todos modos.
— Te recuerdo que tú madre me acusó de que según ella Alonso no era tu hijo
— Sabes qué ? Mejor no pensemos en eso, ¿si?estás hermosa mi amor — esta vez besa mis labios apasionadamente tomándome desprevenida
— Así está mejor— le digo cuando nos separamos de ese beso tan apasionado.
— Vamos? — le digo que si y salimos de la casa rumbo a la dichosa fiesta,algo me decía que no traería nada bueno pero ojalá solo fueran paranoias mías.

En el camino hablamos de mil cosas, de nuestros hijos, de trabajo, de cosas de la casa, en fin cosas cotidianas, justo antes de llegar Chris me besa sorpresivamente y vuelve a ser el marido cariñoso que siempre es, susurra un té amo en mi oido haciendo que me estremezca. Toma mi mano al bajar y caminamos hasta la entrada del gran jardín donde es la dichosa fiesta, mientras caminamos nos saludan y nos detienen varias veces, me recuerdo mentalmente ser políticamente correcta y perfecta para que la gente crea que es un placer hablar con ellos aunque no sea verdad.
— Apenas llegamos y ya estoy asqueada de esta gente— ruedo los ojos fastidiada y me cruzo de brazos, me da mucha flojera toda esta gente.
— Ya lo sé pero trata de disfrutar mi amor— me toma por la cintura y me acerca a él, me abraza y besa mi coronilla con ternura.
— Trataré pero creo que solo lo lograre con un milagro— suspiro y me mentalizo para aburrirme el resto de la noche.
— Aquí está tu milagro— escucho su voz y automáticamente se instala una sonrisa en mi cara, me separo de Chris y abrazo fuertemente a mi primo.
— Pabloooo— ambos nos unimos en un largo abrazo y es que llegó mi salvación para que esta noche no sea tan aburrida con toda esta gente estirada.
— Primita..... estás deslumbrante cariño, te queda perfecto el vestido que te escogí — me tiene agarrada por la cintura y besa mi mejilla.
— Cómo que el vestido que te escogí ? — pregunta Chris jalándome a su lado.
— Cuñado es que esta mañana estabas tan distraído que ni siquiera notaste que yo estuve en la tienda— ambos me miran a mi y yo.... yo qué culpa si él no me prestaba atención.
— Dulce por qué no me dijiste? — Ahora resulta, tras que me ignora ahora me reclama.
— A ese nivel de ignorarme llegaste Uckermann.... ni cuenta te diste que llamé a Pablo y que me ayudó con el vestido — me encojo de hombros y trato de que se sienta culpable.
— Ya sabes a ponérselo y a quitárselo — mi marido ya iba directamente a él y tuve que interponerme.
— Chris Chris que haces amorcito quieres salir mañana en el periódico o en las revistas de sociales, contrólate y tú deja de molestarlo cada vez que estás junto a él.... Chris es mentira  no le prestes atención— es todo un show estar en medio de estos dos y me agota.
— Es que no aguanta ni una bromita — su sonrisa cínica hace que Chris se enoje más, pero es que mi marido también no ayuda, es muy cuadrado y aveces parece un viejo caray.
— Antes de que digas nada yo no lo invité, el ya estaba invitado — le digo antes de que diga algo.

Durante del pasar de la noche me la pasé saludando a toda esta gente, pero después de un tiempo decidí apartarme un poco y dejar que Chris lo hiciera solo, al igual que Pablo que también hablaba con un grupo de empresarios, a lo lejos veo a la bruja de mi suegra que tiene una copa en la mano y habla muy animadamente con una rubia que trae un vestido negro con algunas rayas de colores y con un escote demasiado pronunciado y una abertura a un lado .
Siento como alguien se acerca por detrás mío y cuando volteo veo que es Pablo que pasa su brazo por los hombros.

Qué tal mis amores ?😏quién será la rubia que habla con la bruja?😏a qué habrá llegado? 🙈Dejen sus comentarios y votos ⭐️las quiero 💕